ℂ𝕠𝕦𝕝𝕕 𝕓𝕣𝕖𝕒𝕜 𝕪𝕠𝕦𝕣 𝕙𝕖𝕒𝕣𝕥? • [ 𝚃𝚊𝚎𝙺𝚘𝚘𝚔 ]

04.

"Largas y pesadas horas de estudio eran lo único que rondaba en la cabeza del pelirrojo, arrastraba los pies con pesadez y pereza mientras se dirigía a la biblioteca.

Su último profesor le había recomendado empezar a leer más sobre filosofía, alegando que sus notas iban cada vez más en decadencia y eso podría afectar en sus notas finales, cursando apenas su segundo semestre de preparatoria y ya comenzaba a tener problemas con sus notas, realmente era algo que Jung Hoseok deseaba evitar.

Sus padres ya tenían bastantes problemas en mente como para sumarles más, definitivamente no deseaba que sus padres recogieran sus malas notas al final del semestre.

Además, debía hacer sentir orgullosa a su hermanita.

Al entrar a la biblioteca agrandó los ojos al ver lo extensa que era esta, sabía de ante mano que se trataba de un lugar muy grande y con gran variedad de libros, pero verlo en carne propia era incluso fascinante, incluso para alguien como él, a quien no le agradaba tanto la literatura.

Con pasos lentos empezó a buscar en todas las secciones de la biblioteca, deteniéndose en una en especial para poder buscar los libros que fueran necesarios sobre filosofía, y alguno que otro que no tuviera nada que ver con el tema pero que pareciera interesante para el. Al final simplemente tomó tres libros y se dispuso a buscar una pequeña mesa en donde poder leer a gusto, estuvo leyendo por alrededor de dos horas, hasta que recibió una llamada por parte de su mejor amigo, por lo que tuvo que dejar los libros en su lugar y salir para poder atender dicha llamada, lo que menos quería era importunar a los demás lectores.

—¿Qué sucede?—preguntó finalmente al salir de la biblioteca, apoyándose en un muro que tenía cerca.

—¿En dónde estás?—preguntó el otro por medio de la línea telefónica.

—Tuve que venir a la biblioteca por unos libros, ¿sucede algo? ¿Tienes algún problema?—preguntó preocupado, de alguna forma podía escuchar la voz de Taehyung un poco quebrada, como si estuviera a punto de llorar.

—Yo...—una pausa interminable pareció escucharse desde la otra línea, lo único que podía escuchar eran las cortas y pausadas respiraciones del castaño—solo quería escuchar tu voz... estoy bien.