Rollercoaster

Repararte

Arthur había desaparecido, pero escuche a los policías decir que el incendio que habían provocado en el sótano, había sido apagado por una enorme cantidad de agua, pero no tenían idea de lo que había pasado, pues habían apagado el sistema de los detectores de humo, solo él habría podido ser el responsable.

Regresé a casa y papá curó mi herida, me quedé mirando a la nada por largo rato hasta que me avisó que había terminado de suturarme.

-Necesitarás reposo por unos días, afortunadamente no llegó al hueso ni lastimó ningún tendón, solo reventó la piel y algo de tu musculo, el traje cumplió con su propósito, sería malo que te rompieras por tercera vez un hueso en el año -Bromeó, pero yo estaba desconectado - ¿Quieres hablar de lo que pasó?

No le dije nada, solo me levanté de la mesa de operaciones y me fui, no podía ir a mi habitación, porque sabía que ahí me encontrarían mis hermanos, no tenía energía para estar con ellos, ni con nadie.

Fui a una sala alejada del vestíbulo principal, solía practicar con el piano ahí porque el sonido no importunaba a nadie, hacía mucho tiempo que no me paraba en ese lugar y prácticamente era una de las habitaciones a las que solo yo entraba.

Recordé que no terminé de tocar y quise hacerlo en ese momento.

La voz se me cortaba, no podía cantar, el brazo derecho me dolía, no podía mantener el ritmo, no podía, no podía, no podía, no podía. No pude salvarla.

Golpeé las teclas del piano y una de ellas salió volando lejos, estaba tan deprimido que ni siquiera me importó y dejé caer mi cabeza sobre mi brazo sano.

Pasaron un par de días, Jay intentó hablar conmigo, al igual que Kon', papá y mis hermanos, pero había perdido las ganas de hablar, lo que trataban de decirme, no me reconfortaba.

No había salido de esa habitación desde que entré a ella, me costaba trabajo dormir, no tenía ganas de comer y no podía pensar en otra cosa que no fuera que le había fallado a una chica que estuvo dispuesta a sacrificar su vida por mí, porque la realidad era que yo estaba vivo gracias a que ella me defendió.

Una mañana cuando intenté volver a tocar de nuevo Fix You, descubrí que mi brazo derecho se encontraba mejor, pero al llegar a cierta nota, no pude continuar porque no estaba la tecla. Alguien se acercó y la puso sobre la tapa del piano, aquella que no quise levantar la vez que golpe el teclado, el aroma era inconfundible, agua salada.

No dije nada, quería que se fuera, pero se sentó a mi lado sin decir nada.

Tocó del lado derecho del piano algunas notas de la canción, me levanté enseguida para verlo.

Él no me miró, solo se concentró en seguir tocando, lo hacía despacio y dudoso, no tenía mucha experiencia haciendo esto, era notorio, pero lo seguí del lado izquierdo.

Con él a mi lado para tocar la parte que aún no podía completar, sentí que la obstrucción en mi garganta era menos densa.

"Tears stream down your fase when you lose something you cannot replace

Tears stream down your fase. I promise you I will learn from my mistakes"

Juntos terminamos la canción. Me eché a llorar y él me abrazó, recargué mi frente en su hombro y me desahogue como habría deseado hacerlo desde que ella murió frente a mí.

-Lo siento -Dije cuando al fin pude calmarme.

-No, yo lo siento, debí quedarme contigo sin importar quien me llamara, tú me necesitabas más y me fui -Se disculpó por su repentina desaparición, aunque sospechaba que algo tenía que ver con sus deberes de príncipe.