Kei abrió los ojos hinchados con dificultad. Lentamente revivió lo sucedido el día anterior. Todo le parecía surreal. Miró a su lado pero el espacio durante años ocupado estaba vacío. Al sentir su mano sujeta por algo, volteó para ver a Suo quien permanecía durmiendo arrodillado en el suelo con los brazos y la cabeza sobre la cama sin soltar su mano.
-Suo?..
-mh..eh?.. kei!..despertaste.. estás bien?. Preguntó con preocupación sin importarle lo adolorido y gélido de su cuerpo.
-me duele la cabeza..
-bajaré a comprar algo para que comas y puedas tomar algún remedio para el dolor... espérame, no tardo.
Suo salió de la casa en dirección al mercado donde incontables veces había visto furtivamente a Lan y kei. Intentó no pensar en la situación insólita y peculiar en la que se encontraban. Mantendría su mente en el presente cotidiano para sacar a kei del angustiante recuerdo. Compró lo necesario y volvió rápidamente.
Al pisar el cuarto peldaño de la escalera, una añosa voz le saludó.
-hola hijo.. eres amigo de Lan?
-eh? Ah.. hola señora, soy amigo de kei, me llamo Suo.
-ah ya veo.. los chicos nunca traen amigos a casa.. bienvenido, es un gusto conocerte..
-gracias señora..
-puedes decirme Ohara hijo..
-es un placer conocerla señora Ohara..si me disculpa, debo subir ahora..kei necesita su medicamento...
- ¿está el pequeño enfermo?..
- solo es un dolor de cabeza, no se preocupe..
-dónde está Lan?..
-emm..al parecer tuvo que hacer un viaje.. Mintió. No pudo decir más.
-vaya..no me dijo nada.. bueno, no te quito mas tiempo hijo..si necesitas algo no duden en decirme...salúdame a kei..
-si señora Ohara..permiso..
Entrando en la habitación, Suo encontró a kei en la misma posición en que lo había dejado antes de salir, con su mirada perdida en alguna parte alejado de la realidad. Preocupado, se acercó y puso su mano en su frente para confirmar la temperatura de su cuerpo. Aliviado de que no tuviera fiebre, se sentó a su lado para acomodarlo en una mejor posición.
-kei.. te traje esto. .bébelo todo si?..
-dime Suo.. Dijo con voz seria. - ¿Cómo llegaste aquí ayer?..
-Recibí una llamada que me despertó muy temprano..no supe quién era..la persona no dijo mucho.. solo me dió instrucciones sobre la dirección en donde te encontraría... me resultó extraño y no sabía si la información era verdadera. .pero aun así me apresuré a llegar.. estaba preocupado por ti..
Kei hizo un pequeño gesto de dolor llevándose las manos a la cabeza.
-vamos, toma el medicamento, te aliviará la migraña.. ¿quieres dormir un poco más?
-mm..
-descansa.. saldré mas tarde a comprar materiales para reparar la perilla de la puerta..
- la puerta se dañó?..
-emm... algo así.. tu no te preocupes, será fácil de arreglar..
Kei volvió a recostarse. Suo deslizó una almohada bajo su cabeza y lo cubrió cuidadosamente para protegerlo de la fría mañana. Mirando en dirección a la ventana, kei volvió a perderse en sus pensamientos mientras unas lágrimas emergieron de sus ojos.
-Lan..se ha ido no es así?.. él..me dejó?.. Comenzó a correr por sus mejillas el llanto.
-kei..puedes llorar todo lo que necesites.. yo estoy contigo..no te dejaré. .nunca lo haré..
Abrazándolo, intentó contenerlo los minutos, las horas, los días que necesitaba para soltar su tristeza y continuar una nueva vida juntos.
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2BLE AMOR
RomanceEn ocasiones la felicidad se encuentra fraccionada...Sólo se puede sentir encontrando y uniendo las piezas que completan el amor.