parte 10 Segundo amor

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Unos golpes suaves en la puerta despertaron a Lan de sus intranquilos sueños. Se levantó ágilmente de la cama para salir a atender la puerta después de arropar a kei que continuaba profundamente dormido.

-buen día hijo, lamento molestar tan temprano..

- buen dia señora Ohara, pase ..le ofrezco algo para beber?

-no es necesario hijo, solo quería saber si se encontraban bien ..anoche escuchamos algunos ruidos fuertes y gritos.. estaban discutiendo tu y kei?

- discúlpeme si los hicimos preocupar. Anoche ..tuvimos una pelea pero todo está bien ahora.. lamento si les causamos problemas.. por favor discúlpeme con el señor Ohara de nuestra perte..no volverá a pasar..

-no es necesario hijo.. solo estamos preocupados por ustedes.. sabes que si necesitan algo nos puedes avisar..

- muchas gracias señora Ohara..

-bueno , no los molesto más.. salúdame al pequeño kei..

- lo haré.. déjeme ayudarla a bajar..

Al volver, kei se encontraba de pie junto a la puerta esperando.

-te despertamos?

-mm

-te sientes bien? quieres volver a la cama?

-estoy bien..lan..sobre lo de anoche..

-déjalo así.. lo hablaremos después.. desayunemos para que tomes tu medicina..


Despidiéndose con un suave beso en la frente de kei, Lan se marchó a la cafetería para solucionar un par de cosas pendientes que tenía retrasadas debido a los últimos acontecimientos que le habían impedido asistir al trabajo.


En casa, kei dedicó su tiempo a asear la casa y encargarse de diversas tareas intentando distraerse sin éxito de cualquier pensamiento que invadiera su mente. Sabía con certeza que amaba profundamente a Lan, pero también amaba a Suo. Esto generaba una culpa y una ansiedad insoportables.

El celular sonó repentinamente sacándolo de su concentración. Al ver la pantalla de identificación, su corazón dió un salto inevitable. Sabía que no debía contestar pero necesitaba al menos poder despedirse. Con manos temblorosas, respondió.

-Hola Suo...

-kei? como estas?.. estaba preocupada por ti..

-estoy bien.. y tu? cómo estás..el golpe..duele?

-no duele..no fue nada. Kei.. ¿podemos vernos?

-Suo..yo..no debería..no puedo..

-kei..por favor.. necesito verte..

-l..lo siento Su..o . Dijo estas palabras apenas audibles mientras las lágrimas se derramaban por sus mejillas.

-kei..no..no llores por favor..,qué puedo hacer..dime..

-esto es muy difícil..no puedo más.. no sé qué hacer. Lloró.

kei, calma.. podemos hablarlo, vamos a solucionar esto.. puedo hablar con Lan..

-no!.. yo no..no soy capaz de nada! soy un cobarde!.. odio esta maldita situación! cómo llegué a esto! no lo pedí! no lo quiero!!. te daño a ti, daño a Lan, me estoy dañando a mi mismo! Llegando a su límite, Kei descargó las palabras con un impotente arrebato.

-tranquilízate, kei..escúchame bien..no te pongas así.. todo estará bien.. lo que menos quiero es provocarte dolor.. vamos a calmarnos.. ninguno de nosotros buscamos llegar a esta situación.. tampoco te pediré que escojas . Solo necesito que sepas que te amo y solo quiero que decidas lo mejor para ti, lo que sea estará bien para mi.. mientras tu estés bien con eso..

Con un incesante zumbido en sus oídos y un pecho apretado, las respiraciones de kei se le dificultaban en gran manera. Sus labios solo pronunciaron una palabra.

-adios..

Las temblorosas manos dejaron caer con un seco golpe en el suelo el celular que segundos antes guardaba la voz de su segundo amor. Kei lloró amargamente hasta caer agotado en un letargo.



-kei?..bebé?, despierta.. estas bien? que haces recostado aquí?. Preocupado, Lan levantó a kei del suelo y lo acomodó en el sillón de la sala mientras buscaba algo para que bebiera. kei apenas reaccionaba. Al ver a Lan en casa, supo que el día ya se había ido.

-vamos bebé, traga con cuidado.. te sientes mal?.. has comido algo?

-mm..no..no tengo hambre..

-tienes que comer.. te prepararé alguna cosa rápida..

Kei, con una mirada perdida en algún rincón de la sala, aún teniendo a Lan en su vida, se sintió vacío e incompleto por primera vez.


2BLE AMORDonde viven las historias. Descúbrelo ahora