-Estás despierto?..
-mmm.. un poco. Dijo kei somnoliento.
Sin ánimos de dejar la confortante comodidad de estar abrazados, se rehusaban a salir aún de la calidez de la cama.
-kei..
-mm?
-quiero que conozcas a mis padres..
-eh?!!..Se sentó sorprendido.
-lo he estado pensando durante unos días y..bueno..me gustaría que te conocieran..que dices?..
-eeh ..mm.. Kei no sabía qué responder a una invitación como esta. Definitivamente no era algo que esperaba que sucediera alguna vez. Nervioso?, ansioso?, preocupado?, la mezcla de sentimientos era infinita.
-te gustaría?, si no quieres yo puedo entender.. no te sientas obligado de ninguna manera..
-yo..crees que les agrade?..
-claro que si!..como no querer a un niño lindo como tu.. Rió mofándose.
-no te burles..qué pasa si no me aceptan.. Dijo con voz preocupada.
-kei..eso no pasará..ellos verán lo feliz que me haces y será suficiente para que te quieran..
-mm..esta bien..iré..
-en serio? que bien!..vamos , levantémonos y empaquemos..
-queee?!! ahora?!
-claro..son solo unas pocas horas de viaje..estaremos de regreso mañana temprano..
-pero ya los llamaste? cómo llegaremos allá sin aviso..
-no te preocupes..les llamaré desde la estación..vamos! arriba!. Dijo con entusiasmo.
En el autobús, Suo conversaba animadamente con kei mientras se acercaban a su destino. Sin embargo, las palabras al igual que un eco, se quedaban flotando en el aire apenas alcanzando sus oídos. Kei se encontraba en su propio mundo interno de recuerdos. El viaje le había traído a la memoria unas verdes montañas, una cómoda cabaña, unas cálidas aguas termales. Su pecho se contrajo junto con un tenue gesto de dolor. Suo lo notó. Siempre lo notaba. Sabía perfectamente que después de todo este tiempo, Kei no olvidaba a Lan y nunca lo haría. Aun así, siempre guardó silencio, no había cabida para la reprensión. Lo aceptaba con sus sentimientos divididos, después de todo ,entendía que kei siempre se llevó la peor parte al ser castigado con un doble amor.
Al bajar del autobús, tomaron un taxi con dirección a la casa de los padres de Suo, quienes esperaban emocionados tras no verse en poco más de un año.
-Aquí es..llegamos.. Dijo mientras bajaban del auto.
-vaya!..que linda ca... Antes de terminar la frase, un enorme y peludo perro se abalanzó sobre él, haciéndolo perder por un instante el equilibrio, ladrando y lamiéndolo mientras agitaba la cola con tal vehemencia que parecía una hélice que lo haría volar por los cielos en cualquier momento.
-abajo Nana!. Gritó Suo intentando despegar a su perra del ataque cariñoso hacia kei. -lo siento...creo que está mas emocionada que nosotros de vernos. Rió.
-no te preocupes, Dijo riendo mientras lo acariciaba. - me gustan mucho los perros, siempre quise tener uno pero Lan.. Se detuvo al instante cuando se percató de lo que estaba a punto de decir. Intentó cambiar el tema de inmediato aunque Suo ya lo había escuchado sin decir nada.
-es tuya?
-si. fue un regalo de mi cumpleaños numero 12. Nana ya tiene sus años pero su energía no sabe de edades. Rieron.
-vamos adentro.
-hola mamá, papá..
-hijo! bienvenido! Dijeron mientras lo abrazaban con fuerza. - cómo has estado..te has mantenido viviendo bien? debiste haber venido antes..te extrañabamos mucho..
-he estado bien..también los extrañé...mamá, papá, él es Kei..
-Es un gusto conocerles.. Dijo kei algo nervioso y tímido.
-hola kei, que bueno tenerte aquí , ..Suo nunca trae amigos a casa..bienvenido..
-bueno..mamá..eso es porque kei no es precisamente un amigo..nosotros..estamos juntos. Dijo mientras kei incomodó se quedó en silencio.
-oh..es así?..en ese caso..bienvenido a la familia kei. Con una sonrisa afable le tomó la mano y lo guió al interior de la casa. -pasen, vamos adentro, deben estar cansados.
Suo llevó a kei a su habitación, que se encontraba en el segundo piso de la casa, para acomodar los bolsos y descansar un momento.
-estás más relajado? te dije qe no sería tan terrible. Dijo con una sonrisa.
- tus padres son muy agradables..se parecen a ti..Comentó mientras observaba a su alrededor la habitación en donde Suo había dormido la mayor parte de su vida. Algunas fotografías, figuras de colección, juegos, libros. Podía imaginar la infancia que había tenido..una muy diferente de la que él y Lan habían tenido.
-bajemos..mamá debe tener la comida lista..
-siéntense chicos, ya casi está listo..
- la puedo ayudar en algo señora? Dijo kei atento.
-gracias hijo, podrías llevar esto a la mesa?..
Sentados los cuatro, comieron los deliciosos y elaborados platos, que la madre de Suo se esmeró en preparar para la ocasión, en medio de una amena y divertida conversación.
-
ESTÁS LEYENDO
2BLE AMOR
RomanceEn ocasiones la felicidad se encuentra fraccionada...Sólo se puede sentir encontrando y uniendo las piezas que completan el amor.