Escenarios con Dostoyevsky

Estocolmo - Parte 1

Aviso/Nota:
Primer punto a tratar: la parte 2 del capítulo anterior la voy a subir luego de los pedidos que ya tengo, como semi consuelo y mini spoiler, no todos son muy alegres, aviso porque ahorita ustedes quieren matar a Fyodor, y no sé si a mi también JAJSJAJSH
Segundo: Este pedido tendrá 2 partes, siendo esta la primera, luego de la parte 2 los capítulos volverán a ser independientes como los otros y volveremos a laborar con normalidad.

Para poner contexto, la onda de este capítulo va de que T/N es hermana de Dazai, pero es secuestrada por el ruso esperando que le de síndrome de estocolmo.

                            ᙏ̤̫ ᙏ̤̫͚
                                 
Fyodor Dostoyevsky

Hace algún tiempo que supe de la existencia de T/N, fue en los tiempos de la Dark Era. Merece toda mi atención ya que es una mujer perfecta, solo tiene un pequeño problema: Su hermano, Osamu Dazai.

La solución a este conflicto no es muy complicada, me gustaría no tener que lidiar con esto pero es un detalle mínimo si se tiene en cuenta que cuando todo salga bien podré estar con T/N.

Un secuestro no es la más romántica de todas las opciones, pero sí la más efectiva.

Pude haber ordenado el secuestro y esperar, pero me presentaré yo mismo. Mis subordinados son inútiles en extremo y no traerían a esa bella dama con el trato que merece.
Algo que no pienso permitir.

...

Puesto que me aprendí su horario el secuestro fue bastante sencillo, quizás tener mi primera interacción con ella sea lo complicado.

Entré a la habitación donde se encontraba, atada de pies y manos pero de forma que no le lastimara.

—Buenas tardes señorita, me presento, soy Dostoyevsky. Mi superior está algo ocupado así que me ordenó que la cuidara hasta que tuviera tiempo de tratar ciertos asuntos con usted. Por ahora le traje algo de comer.

Una pequeña mentira, si decía que yo la secuestré me iba a complicar todo, y evitar problemas es algo que prefiero.
Le extendí un plato de ensalada.
La femenina miró el plato y luego a mi.

—Yo no quiero eso —dijo con desdén.

—Mis disculpas —respondí— pero luego de un secuestro debe de tener hambre, si hay alguna otra cosa que prefiera puede decirme.

—De hecho sí, pastel, si no es mucha molestia.

—Ahora lo consigo.

Sin darle la espalda me encaminé a la puerta, me detuvo lo que dijo:

—Con galletas encima.

—Como ordene.

Apenas salí de la habitación me encontré a Nikolai, que estaba sumido en una incontrolable risa, y Sigma lo miraba como si ya fuera un cadáver.

—Su hermano le ha de complacer todos sus caprichos —dijo Nikolai. Apenas fue posible entenderlo debido a su risa exagerada—. ¿Seguro que vas a aguantar todo lo que te pida, Dos-Kun?

—Voy por el pastel que pidió mi dama, no dejes que este señor se le acerque —le pedí a Sigma, que asintió con la cabeza.

Lo más rápido posible, regresé de la pastelería más costosa que encontré.

—¿No molestaron a mi mujer? —pregunté a mis colegas.

—Gogol sigue muriéndose de la risa —contestó Sigma a punto de llorar—. Ya no sé si se está burlando de mi o si está en su sano juicio.