Se ajustó el cuello de la camisa y trato de ordenar su cabello, hace ya varias horas había felicitado a Oikawa por su cumpleaños, pero había sido algo rápido y simple para dejar que el argentino tuviera un sueño decente, si bien era sábado y no tenia entrenamiento, Iwaizui no quería perturbar mucho los horarios de sueño de su novio.
—Viene tarde ¿no? – Hanamaki del otro lado de la pantalla picaba con su palillo un pedacito de fruta
—Bueno, en Argentina son poco más de las 11 de la mañana, es normal que tenga cosas que hacer – Issei dejaba un nuevo recipiente con fruta sobre la mesa
—Pero el eligió la hora de su desayuno/cena de cumpleaños, debería ser más puntual, además es sábado y esta en casa, no hay motivos para retrasarse – el pelirosa se cruzó de brazos, indignado
—Quizá sus compañeros llegaron de sorpresa – Hajime miraba la pantalla de su teléfono, en busca de noticias de su novio
—En ese caso debió avisar que venía tarde –recargó su cabeza en el hombro de Mattsun – pude haber cenado hace horas y no estar comiendo cochina fruta
—Oye no insultes a la fruta, que no tiene la culpa de que seas un glotón
Iwaizumi no dijo y se limitó a mirarlos "discutir", los envidiaba y era algo que no se atrevería a decir en voz alta, si bien ese par se había tardado un buen tiempo en comenzar a salir desde lo que hicieron la vida se vio con mas color del que tenía, Makki que había estado lidiando con una crisis existencial respecto a que hacer con su vida y sumando el estrés de la peculiar familia que tenía volvió a sonreír con sinceridad cuando comenzó a salir seriamente con Mattsun.
Por otro lado, Issei había estaba agobiado con la universidad y el trabajo de medio tiempo que había decidido tomar, muchas veces parecía cansado y harto, se notaba que dormía poco y su dieta se basaba en comida instantánea ya que tuvo la increíble idea de independizarse aun cuando sus padres le insistieron en múltiples ocasiones que no era necesario, sin embargo todo eso pareció desaparecer cuando Makki le confeso sus sentimientos.
Ahora ambos vivían juntos y se notaban bastante contentos, Hajime envidia eso, envidiaba que ambos despertaban viendo la cara del amor de su vida todos los días, que se iban a dormir con una persona que adoraban, hablaban todos los días, tenían citas, podían caminar tomados de la mano (siempre ignorado los horribles cometarios y murmullos de desconocidos).
—Perdón, perdón, perdón –Oikawa había entrado a la llamada – se me fue un poco el tiempo
—Solo por hora y media – se quejó Makki
—Lo siento mucho, Saúl llego a primera hora de la mañana, fuimos a desayunar se fue el tiempo – se apresuro a decir
—¿Quién mierda es Saul? – Mattsun lo miraba con el ceño fruncido
—Un compañero, insistió mucho en llevarme a desayunar por mi cumpleaños y al final no pude negarme
—Tu desayunando y nosotros aquí muriendo de hambre, maldito Basurakawa – Makki se levanto fastidiado y se perdió de la visión de la cámara
—Está agarrando tus mañas de insultarme, Iwa-Chan – hizo un puchero mirando a su novio, que hasta ese momento se había mantenido en silencio
—Bueno, tiene hambre y aquí ya es casi media noche, supongo que es normal que este fastidiado o enojado – pasó una mano por su cabello, ese que había tratado de acomodar por horas
—De verdad lo siento, pero no pude negarme – los miró con rostro suplicante
—Querer y poder son cosas muy distintas – Mattsun dio un sorbito a su vaso de agua
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El Club Del Chisme
FanfictionAquel peculiar grupo tenia intereses y personalidades bastante distintas, sus vidas normalmente estaban ocupadas por el trabajo y la vida de supuestos adultos que llevaban, sin embargo, algo había logrado unirlos desde la preparatoria, algo que ni e...