✔ 𝗘𝗟 𝗠𝗜𝗦𝗧𝗘𝗥𝗜𝗢 𝗗𝗘 𝗔𝗡𝗨𝗕𝗜𝗦 ━━━━ Moonknight

14. Propuesta....

Steven caminaba hacía la estación de trabajo en donde su novia pelirroja iba saliendo, agradecía a todos los dioses haber llegado justo a tiempo.

Sentía sus nervios a flor de piel y sus manos sudaban.

—Relajate Steven— exclamó Marc tomando el control y limpiándose las manos en el pantalón —No podremos proponerle matrimonio con las manos sudadas.

—Es que estoy nervioso— se justificó —¿Y si dice que no? ¿Y si esto arruina la relación que llevamos hasta ahora?

—O que tal si la une más y dice que si— respondió Marc con una actitud positiva poco común en él.

Avanzó unas cuantas cuadras más hasta que llegó detrás de ella y tapó sus ojos con ambas manos.

—Si adivinas quien soy tendrás la cita con el mejor hombre del mundo.

—Por tu tono de voz, eres Marc— soltó una pequeña risa mientras tomaba sus manos para poder ver y voltear a verlo.

Marc sonrió feliz ante su acto, ella sabía perfectamente quien era quien, la tomó de la mano y la llevó caminando a su restaurante preferido.

Steven y él estaban realmente emocionados y felices por dar el gran paso.
Mientras caminaban hablaron y rieron sobre su día, cualquiera que pasara junto a ellos podía ver su amor relucir a través de ellos.

Star amaba estar con ellos porqué se sentía libre de cualquier peso en sus hombros, sentia que al lado de Steven y Marc no importaba lo que se avecinara, por qué si, en su mente aún andaba la idea de ese dios con sed de poder pero al lado de los hombres que más amaba eso era lo de menos.

Al llegar al restaurante Steven fué ahora el que pidió la mesa que había reservado con anterioridad, dejó que Star se adelantara unos cuantos pasos y le pidió al hombre de la recepción que preparara todo para la propuesta, él ya sabía que hacer ya que Marc y él lo habían hablado días antes.

Agradeció al recepcionista y se fue con su novia pelirroja que lo observaba con curiosidad.

—Lo siento, es que debía hacer algo antes— sonrió torpemente mientras se sentaba en la silla al extremo frente a ella.

—Esto es muy lindo de su parte pero saben que no me gusta que gasten dinero en lugares como este— exclamó tomando su mano sobre la mesa —Con llevarme a comer una buena hamburguesa soy feliz, vegetariana claro.

Ella no era vegetariana y tampoco Marc y ahora que lo pensaba tampoco Jake, Steven era el único vegetariano, pero haría el intento por comer sano al lado de Steven aunque por la noche se acabara todo a su paso en la cocina.
Ahora entendía porque le dijeron que se veía más llenita.

—Si pero una chica como tu merece un lugar como este— respondió Steven —Y además- bueno, creí- creíamos que- que iba de acuerdo a esta noche especial.

Su lengua se enredaba y aunque Marc lo veía fijamente diciéndole que debía relajarse simplemente no podía, su corazón latía al mil por hora.

—¿Sucede algo? ¿Te sientes bien?— preguntó Star al verlo sudar.

Le comenzó a doler la cabeza a Steven, quería tomar el control, volteó a ver a Marc por el reflejo pero ya no estaba, sintió una punzada y volvió a perder la conciencia.

Star bufó al ver que su novio se había ido y jugueteo con su copa al ver la expresión divertida de Jake.

—Debo decir que te ves hermosa— coqueteo acercándose a ella.

—Lo sé, gracias— respondió acercándose igual para martirizarlo un poco pero no funcionó.

Jake sabía que le iban a proponer matrimonio pero quiso intervenir, no sabía bien el porque pero cuando se dio cuenta ya estaba tratando de tomar el control.

—Steven fue fuerte, no iba a ceder el control— exclamó apartandose de Star dejándola con una ceja alzada, le había devuelto lo de la otra vez —Eres mala aveces pero me gusta.

Jake tomó el vino y se sirvió un poco en su copa, Steven no lo había hecho porque el alcohol no era su mejor amigo.

—¿Por qué tomaste el control?— cuestionó la pelirroja.

Él no supo que responder así que desvío su mirada pensando en alguna salida y como si Khonshu lo hubiera escuchado (lo cual hizo) apareció detrás de Star y habló.

—Debes ir por el abanico, el reloj comenzó a correr y ella no puede venir.

Jake asintió y se levantó —Debo irme.

—Es broma ¿Cierto?

—Noup— antes de escuchar sus reclamos caminó a la salida y le pidió nuevamente el anillo de compromiso al recepsionista con la excusa de que será otra noche.

Dejó a Star sentada allí con las palabras en la boca, pagó lo que faltaba para acompletar lo de la mesa y salió de allí.
Tenía hambre pero más que eso estaba enojada con Jake por haber tomado el control y después irse sin darle alguna explicación.

Ya no había ningún taxi, parecía que todo el mundo había desaparecido ya que la calle estaba solitaria y no andaba ningún alma.

Tendría que caminar a casa, apenas dio el primer paso cuando sintió una extraña sensación recorrerle la espalda, haciendo que se le pusieran los pelos de punta.
Apresuró el paso pero aún sintia que alguien la seguía, no tenia miedo pero la desesperación comenzaba a invadirla.

Doblo un callejón en donde esperó que su acosador se siguiera pero sintió un tirón por detrás.
Maldecía haber dejado su arma en la oficina, no la tomó porque creyó no necesitarla.
No podía verle la cara y eso era frustrante, comenzó a patalear y a tirar golpes al azar hasta que pudo liberarse y en vez de escapar se detuvo para intentar verle el rostro pero la oscuridad no le favorecía, se quedó a esperar un poco para ver cuál sería su siguiente reacción pero al creer que ya no había nadie soltó un suspiro.

Llamó su traje de Scareb Scarlet y huyó volando sin darse cuenta que aquel que la había atacado aún seguía oculto entre las sombras.

—Interesante....— susurró Seth.