10. How it's

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Hoseok suspiró, había perdido la cuenta de las veces que lo había hecho al igual que ya no sabía cuentas veces Jungkook se había alejado para luego volver y apresurarlo.

No pensó que hablarle sobre su sexualidad le causaría tanta curiosidad.

―Salgamos a cazar ―había dicho el chico refiriéndose a salir a ver parejas y, si tenían suerte, ver alguna homosexual.

Hoseok no supo negarse, él mismo había causado la curiosidad en el chico que hasta ese entonces ni siquiera había pensado en las relaciones románticas y la vida de pareja.

― ¿Cómo sabes si son pareja o no? ―Jungkook preguntó tomando a Hoseok del brazo mientras veía de un lado a otro buscando gente que parecieran tener una relación romántica.

―Pues... Por cómo se miran, como se tocan, como hablan entre sí y la cercanía que tienen ―Hoseok explicó ―. Los novios no se portan como lo harían un par de hermanos. Pero puede ser fácil confundir entre novios o hermanos y amigos.

―Creo que entiendo... ―asintió confiado ―. ¿Qué hay de ellos? ―señaló a un par de chicos sentado en un banquillo, parecían estar bromeando entre ellos, habían bolsas de compras a su alrededor y se veían bastante cercanos ―. ¿Novios o amigos?

―Complicado, podrían ser amigos, pero también novios... ―bajó la voz mientras pasaban junto al par de desconocidos. Hoseok aprovechó y los detalló notando algo ―. Creo que son pareja, tienen anillos ―le susurró al oído al menor ―, aunque eso también lo usan los amigos...

― ¡Que difícil! Quería ver el amor humano en acción ―Jungkook se quejó, poco a poco se sentía más y más frustrado ―. ¿Acaso nadie se da besos en la calle? Eso haría todo más fácil, los amigos no se besan ¿o si?

―Aveces...

― ¿Aveces? ―Jungkook dejó de moverse ―. ¿Me estas diciendo que hay amigos que se besan?

―Nosotros lo hicimos ―mencionó para poder dar un ejemplo aunque le avergonzada mencionar aquel suceso ―. También existen los amigos con derecho, suelen parecer pareja y hacen más o menos lo mismo que ellos, pero manteniendo el título de solo amigos.

―Creo que me rindo, las relaciones humanas son muy difíciles ―Jungkook se giró para volver a casa, aunque luego de tanto caminar no tenía mucha idea de a dónde ir.

―Sé que no es igual a verlo en personas comunes, pero creo que algunas películas de romance servirían para que veas como es ―el mayor sugirió, no entendía el interés de Jungkook en ver el amor en acción, como había dicho, pero prefería que lo logrará con tal de verlo alegre.

―Supongo que servirá ―se encogió de hombros.

Caminaron varias calles hasta que Jungkook pudo ubicarse lo suficiente como para dejar de sentirse perdido. Casi 15 minutos después ya estaban de vuelta en el apartamento.

Hoseok agradeció tener toda una lista de películas románticas grabadas en su televisor, solo tuve que seleccionar las que mejor te trataban el amor y dejó todo preparado para una pequeña maratón.

―Voy a hacer palomitas, ¿me ayudas? ―invitó, aunque sabía que para hacerlas era más que suficiente una persona.

― ¡Sí! ―Jungkook siguió al mayor hasta la cocina dispuesto a ayudar, aunque al final no hizo nada más que ser un espectador.

Hoseok sacó el maíz mientras la olla se calentaba.

― ¿Las quieres con mantequilla o aseite?

―Como sepa mejor ―respondió viendo cómo Hoseok echaba varios granos de maíz en una taza para luego sacar de la nevera la barra de mantequilla, cortó un pedazo grande y los dejó caer dentro de la olla, rápidamente se comenzó a derretir y fue entonces cuando echó la taza con el maíz y cerró la olla.

―A esperar... ―murmuró poniéndose junto a Jungkook, ambos en total silencio observando como la cocina hacía su magia, en pocos minutos una fiesta de explosiones se estaba dando dentro de aquella olla.

Cuando ningún grano faltó por transformarse en una esponjosa nube Hoseok encargo de servir, vertió todo en una misma taza y se la entregó a Jungkook.

―Apaga la luces, así será como el cine ―Jungkook pidió, ya estaba sentado cómodamente en el mueble con una manta cubriendo sus piernas y la gran taza llena de palomitas.

Hoseok hizo lo pedido dejando la sala a oscuras, solo la pantalla del televisor iluminaba ligeramente el lugar. El mayor tomó su lugar junto a Jungkook cubriéndose también.

―Ok, vamos a ver cuatro películas, espero no te quedes dormido ―Hoseok advirtió dándole play a la primera película.

Le pareció entretenida y divertida por varios momentos, ambos protagonistas sufrían de la misma enfermedad por lo que le llamó la atención la curiosa relación que tenían. La siguiente película comenzó automáticamente, las palomitas ya se habían acabado y el frío los hizo cubrirse aún más con las sábanas.

El título de la segunda película era Koizora, tenía subtitulos por lo que Jungkook sintió que estaba practicando su lectura en vez de ver una película. El incio fue confuso, pero cada minuto que pasaba se le hacía más interesante. Cuando la escena de beso llegó, no pudo evitar hacer un comentario.

―Me preguntó si el beso que te di se vio así de incómodo ―murmuró sin apartar su mirada del televisor.

―No tanto ―Hoseok se removió en su lugar al recordar esa parte de la película. Había olvidado que había una escena con índole sexual. Entre la oscuridad, el sonrojo sobre sus mejillas no era notorio, pero eso no evitaba que le avergonzara tener que ver esa parte con Jungkook a su lado.

― ¿Eso es lo que llaman sexo? Interesante... ―Jungkook comentó por lo bajo completamente absorto en la película.

Hoseok se mantuvo en silencio mientras seguía arrepintiendose de su elección, lo más probable es que Jungkook acabará llorando antes de que la película acabará, pero no fue capaz de llegar a verlo ya que se quedó dormido antes de darse cuenta.

Casi una hora después, Jungkook le puso pausa a la película, se sentía abrumado por tantas escenas tristes. Observó a Hoseok dormido en una posición no muy cómoda y no dudó en tomar su cabeza para acomodarla sobre su hombro.

Jugó on el cabello del mayor por un rato teniendo cuidado de no despertarlo.

Recordó la primera vez que lo vio en la tienda de mascotas, le agradó de inmediato. Hoseok se veía amable gracias a su sonrisa y además de la atrayente fragancia que desprendía de él.

Aunque las cualidades del mayor seguían siendo las mismas para Jungkook, había algo distinto, pasando más tiempo como humano sus sentimientos por Hoseok se desarrollaban de una forma distinta a como sería si fuera un pequeño cachorro.

Su forma de ver a Hoseok iba mucho más allá de un perro que quiere incondicionalmente a su dueño.

El mayor lo sacó de sus pensamiento cuando se movió acomodándose en dirección contraria, un gracioso y tierno sonido salió de su boca. Jungkook notó que el chico volvió a ponerse en una posición incomoda por el poco espacio, decidió volver a su forma canina para que el espacio fuera suficiente como para poder dormir con Hoseok sin inconvenientes.

De esa forma Jungkook se refugió entre los brazos de un Hoseok profundamente dormido.

Thighs~


Capítulo madrugon

ᴀᴅᴏᴘᴛɪɴɢ ᴀ ʟᴏᴠᴇʀDonde viven las historias. Descúbrelo ahora