Sueño Potterhead

CAPÍTULO 16

Narra Elena--escrito por leirem
Ayer a la noche Sky y Bella se quedaron hablando y yo me fue directa a la habitación. Luego les tengo que preguntar que pasó.
Me levanto de la cama y me empiezo a preparar.
-Leni-oigo que me llaman.
-¿Qué pasa, Luna?
Mi compañera de cuarto es Luna Lovegood. Era la única persona que tenía camas libres en su cuarto, así que ahora estamos las dos juntas.
-Los nargles me han vuelto robar los zapatos. ¿Me prestas unos?
Le entrego unas deportivas y salimos de la habitación.
-Te juro que nargles o no, como pille a quien te esconde las cosas se va a enterar-le digo a Luna mientras bajamos las escaleras.
-Hola, señoritas.
-Buenos días, Terry-le digo.
Terry Boot y Luna son las únicas personas de mi casa con las cuales pasó algo de tiempo.
Los tres bajamos al Gran Comedor y al entrar ellos van a la mesa se Ravenclaw y yo me dirijo a la de Gryffindor, donde están ya mis amigas.
-Hola a todos-digo mientras me siento.
-Hola-me dicen Herms, Sky y Bella.
-Buenas-dice Fred pasando el brazo por encima de los hombros a Sky.
Arqueo las cejas de forma interrogante y miro a Bella buscando una explicación pero ella está lanzándose mitaditas con Cedric de un extremo a otro del comedor y me ignora olímpicamente.
-Vale-suelto rompiendo el silencio-¿Alguien puede hacerme el favor de explicarme qué está pasando aquí?
Hermione, Harry, Ron y George comienzan a reírse, mientras que Sky, Bella y Fred enrojecen.
-Esperad,-digo mirando a mis amigas-¿todos saben que pasa menos yo? Me debéis una explicación.
Parece que se están pensando que decir pero Hermione no les da tiempo a responder.
-Tendréis que hablar luego o llegaremos tarde a Defensa.
Por lo que nos dirigimos a clase. Después de que el falso profesor Moody nos diera la misma charla que en los libros, la cual me sabía de memoria tras todas las veces que me he leído el libro, pregunta las maldiciones imperdonables.
Ron dice la maldición imperius y Ojoloco le hace el hechizo a una araña, la cual comienza a saltar de una mesa a otra y a subirse sobre algunos alumnos. Frunzo el ceño cuando veo que Ojoloco hace que se ponga sobre la cara de Malfoy, pero pronto me doy cuenta de mi error.
-¿No te parece gracioso?-me pregunta el profesor.
Y a continuación, la araña salta para posarse sobre el moño alto con el que me había peinado. Teniendo en cuenta la fobia que me causan estos arácnidos, mi reacción es bastante comprensible. Grito y me levanto de la silla, corriendo y saltando como una histérica. Tras de mí corren Sky Bella, tratando de calmarme.
-Leni, no... Tranquila...¡Haz el favor de estarte quieta!
Finalmente, Bella me quita la araña de encima de un manotazo y yo me derrumbo en el suelo, mientras que el bicho cae en el hombro de Sky.
-¡Pero qué cosita más cuca!-dice como si hablara con un bebé.
Pero su diversión dura poco porque el profesor lleva la araña a la mesa de Neville y le pregunta la siguiente maldición. Y cuando Neville nombra la maldición Cruciatus y Moody la pone en práctica con el animal, yo sigo demasiado temblorosa en el suelo para intervenir. Sin embargo es Sky quien le hace parar.
-¡Pare!¡No se da cuenta de lo que le está haciendo!
Ojoloco se detiene, pero coge la araña y la coloca frente a mi amiga.
-Tal vez usted pueda decirme la última-dice con un tono malicioso en la voz.
Sky niega con la cabeza. No soportaría ver algo así. Pero el mortífago disfrazado parece decidido a que hable.
-¿No quiere decirla, señorita Serrano? Tal vez prefiera que repitamos alguna de las demostraciones anteriores. ¿Qué prefiere, el Imperio-me señala al decir eso-o el Cruciatus?-en esta ocasión señalando a Neville.
-Avada Kedavra,susurra Sky muy bajo, con los ojos llenos de lágrimas.
Y entonces Moody mata a la araña.
-Se acabó la clase-y tras estas palabras el profesor abandona el aula.
Sky se va corriendo de la clase, y Bella la sigue. Yo trato de levantarme, para ver si mi amiga está bien, pero siento mis piernas de mantequilla. Sigo apoyada en la pared, demasiado asustada para moverme. La clase ha quedado vacía y yo continuo en el suelo, temblorosa. De pronto noto alguien acercarse a mí. Qué raro. Habría jurado fluye estaba sola. Alzo la mirada y le veo a él, extendiendo la mano, esperando a que se la coja.
-Creo que tú amiga te necesita. Pero antes parece que tú necesitas ayuda.
Sonrío y le cojo la mano, levantándome, quedando muy cerca de él. Es mucho más alto que yo. Me sonrojo al darme cuenta las estupideces que pienso. Le miro, aún sonriente.
-Gracias, Draco Malfoy.
Después de esto, tomo mis libros y salgo corriendo en busca de mis amigas, dejándole, ahora sí, solo en el aula.