Parte 11

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Tenían a grandes cocineros capaces de crear auténticos manjares con ingredientes sencillos bajo su mando, lo mejor que podía pagar el dinero era parte de su estilo de vida.

— Que bien huele —fue lo primero que dijo Zora al llegar

— No pensé que me recibirían con mi specialité

— La ocasión lo amerita —lo sorprende por detrás llevándoles los últimos platillos en una bandeja

— No pude percibirte como de costumbre

— Tomen asiento —replica y el personal encargado los atiende como es debido, la elegancia estaba en su punto máximo con unos invitados de altura y mucho sueño perdido.

Sentadas una al lado como en aquellas tardes de antaño donde compartían la mesa desde niñas, vivieron una vida plena hasta que tuvieron que dejar el paraíso por las cosas que trae la edad, sin embargo una de ellas conservó en su corazón los momentos vividos del pasado y la otra permitió que las personas la cambiaran bajo sus propias vivencias.

Demasiado grande solo para solo cinco comensales sin embargo arribaron a ella dos más de traje que permanecieron en silencio, procurando degustar pasando desapercibidos

— Disfruten

Necesitaban sentir el placer de un platillo cuyo ingrediente principal fue amor, no hablaron de lo que estuvieron haciendo antes de ir a su rescate, dejarían de lado su propios placeres por ir al encuentro de alguien que lo necesitaba.

— ¿Qué tal te están tratando?

— No me puedo quejar —responde aliviando la intriga que les produjo esa pregunta

— Ellos son mis joyas preciadas

— Pues tengo una en mi mesa de noche —dijo Moyka recordando donde la estaba guardando

— ¿Y estos hombres quienes son?

— Son parte de nosotros, observadores —le sirve un poco más de ayran, un refresco típico de Turquía

— Lo entenderás luego, lo sé, el tiempo es mi mejor compañía supongo es lo que sigue —se rehusaba a seguir escuchando que pronto los entendería con mas claridad

— Pues a mi me da un poco de miedo que no digan nada

— No es que no quieran, es que no pueden —responde provocando que tozan levemente acercando su puño a la boca en señal de 'mejor no hablen de nosotros'

— Lo que les espera es amargo y a la vez dulce, entenderán como el mundo en el que vivieron fue el irreal y el que vendrá a sus mentes siempre estuvo allí, esperando que lo vieras en toda su dimensión

— Será mejor que lo sepan mañana —Moyka cambió la copa por un vaso más grande donde cupiera una de sus bebidas favoritas

— El guión que leerán es real, verídico y molesto, cuando vean la crudeza de la realidad igual para todos, tomarán la decisión adecuada.

— ¿Qué es lo que tenemos que saber? no podrían ser mas específicos

— Tu padre últimamente se ha reunido con Ilumicorp ¿verdad Vaarin?

— Algo había escuchado pero no estoy segura —vuelve a probar bocado haciendo uso del cuchillo y el tenedor

— No me ignoren en mi propia casa

— Tranquila, tienen mucho tiempo por delante, si tenemos en cuenta que estarías muerta tanto en vida como en el sentido explicito de la palabra, has avanzado mucho, se paciente y espera —Moyka saboreaba su platillo favorito, una creación hecha en el país rico en ingredientes únicos

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