Capítulo 17.

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HARRY PDV.

Unos cuantos meses después...

"Sólo piensa en algo que odies, o alguna situación que no te gustaría y... Dispara".

Las palabras de Ziva quedaron grabadas en mi cabeza. Desde eso, ya no era el pobre chico que mataba palomas mientras entrenaba.

Había tenido una mejora que claramente se podía visualizar a lo lejos.

Solamente me concentraba, buscaba mi objetivo. Y disparaba.

Claro, pero antes tenia que pensar en eso.

"Algo que odies...".

"Algo que odies...".

"Algo que odies...".

Las palabras retumbaban una y otra vez. Mientras yo, estaba parado estático frente a mi objetivo, apuntando, esperando y pensando. Con el arma peligrosa en las manos.

"Dispara".

Pensaba y pensaba, hasta que imágenes se proyectaron en mi cabeza.

Alguien haciéndole daño a Niall.

Al centro.

Haciéndole daño a mi familia.

Al centro.

Mi nivel socioeconómico.

Al centro...

Luego, imágenes raras se comienzan a trazar en mi imaginación.

"La oscuridad adornaba el entorno, mientras unos rizos aparecían entre ésta. Era yo, ¿Qué ya no podía controlar mis propios pensamientos?. Aunque, después, caminaba de un lado a otro, algo nervioso. Intentaba esconder algo bajo la cama y unos golpes se oían a través de la puerta, seguidos por unos llamados. De repente, los golpes cesaron, más envés de golpes los sonidos se intercambiaron por un choque. Un choque entre el suelo y la puerta, ahora caída. Yo salte sobre mi lugar. Y luego, en acto de reflejo disparé con un arma que traía en la mano, dañando a sea quien sea la persona quien había derribado la puerta. La persona cayó, inconsciente en el piso. Dirigí la mirada a el individuo que se había atrevido a interrumpir el acto que, ni siquiera yo sabía de que se trataba y...".

Mis ojos se abrieron de par en par, mientras saltaba hacia atrás por el susto. Siguiendole formando las manos en puño, como consecuencia, apreté el gatillo, inconscientemente. Dándole al techo, lejos de cualquier centro.

Ziva entró rápido a la sala, tal vez se había percatado del impacto.

Yo, caí de rodillas asustado, con la respiración agitada, ¿Qué era lo que me pasaba?.

-Eh, ¿Qué ha pasado? - Ziva se acercó corriendo a mi, de una manera preocupada y sobre protectora.

-Nada, nada. Sólo que... He pensado cosas raras que, realmente, me asustan - dije entre dientes, pero no de una manera enojada, si no, era algo con temor. Tal vez si separaba mis mandíbulas y las soltaba para relajarlas comenzarían a temblar de una manera frenética.

-Harry, sabes que para mi eres como mi hermano menor, así que puedes contarme que te distrae de tu trabajo - me aseguró -Bueno, si te sientes cómodo y eso deseas - se justificó. Aunque, no quería decirle. Aún tenia la impresión que las mujeres iban y les contaban todo a las viejas vecinas chismosas.

Animals » Narry Storan.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora