Un pollito llamado Park Jimin [Y.M] [#1] [✓]

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Yoongi tomó la mano de su omega y le dio un beso, ambos salieron de la habitación para dirigirse al restaurante donde iban a desayunar, Yoongi entrelazó su mano con la de Jimin y por medio del lazo recién formado le iba generando seguridad. Cuando llegaron al lugar ya estaban sus padres esperándolos, ambos se sentaron y Jimin mordió su labio inferior un poco, pues a pesar de tomar un calmante aún le dolía un poco su espalda baja, Yoongi con disimulo le acaricio la espalda.

—Lamentamos mucho no estar en la cena de anoche. —hablo Jimin.

—Descuida Jimin. —sonrió la omega. —Yoongi dijo que estabas cansado por el viaje.

—Sí. —sonrió apenado.

—Jimin y yo queremos dar una noticia. —se levantó el alfa. —nos vamos a casar.

—Anoche Yoongi y yo nos comprometimos. —dijo Jimin.

—La boda debe ser a lo grande. —sonrió la omega. —y lo más rápido posible.

—Me alegra tu entusiasmo Layla. —la vio el alfa. —pero Jimin y yo decidimos casarnos cuando ambos seamos mayores de edad y terminemos nuestros estudios, por supuesto.

—Para ello faltan cuatro años, hijo. —habló la alfa. —pero si es su decisión la respetamos.

—Jimin cielo. —habló su madre. —¿Estás seguro de tu decisión? —le pregunto preocupada.

—Sí, mamá, lo estoy. —sonrió. —amo mucho a Yoongi y quiero estar siempre con él.

Luego de ese desayuno Jimin iba caminando junto con sus padres los cuales habían decidido hablar con él a solas, la familia de tres se sentó en la arena para ver las olas y hablar un poco.

—Tus abuelos se pondrán felices por la noticia. —habló el alfa.

—Lo sé. —asintió. —leí el testamento de mi bisabuelo con un poco de ayuda de un abogado de confianza de la señora Sakura.

—¿Y qué dice eso? —preguntó su madre.

—Tendré acceso a la fortuna Park cuando me case. —los vio. —al ser menor de edad y como mis abuelos manejan la fortuna, no me casaré hasta ser mayor de edad y yo pueda manejarla sin terciarios.

—Eso fue muy inteligente bebé. —habló su padre. —mis padres no se cansarán hasta tener esa fortuna en sus manos.

—Por eso decidí que al ser mayor de edad cambiaré el testamento. —dijo. —si algo me llegará a pasar mi fortuna les pasaría a ustedes y si a ustedes les pasa algo la fortuna se iría a gastos de la residencia dónde están los omegas de pollo y sus parejas.