Libertad, honor , sacrificio, honra, amor o traición era algo que cualquier persona en su sano Juicio jamás se atrevería a mezclar para describir a una persona, Jeon Jungkook , lo sabia a la perfección...tanto que su vida pasada, ahora se recreaba...
Kim Taehyung, posiblemente era el hombre más hermoso que alguien pudiera conocer, alto, piel canela, ligeros toques y destellos aperlados que iluminaban sus preciosos iris negros, sus cabellos castaños, que dejaban ligeros mechones por su frente, y que hablar de su esbelto cuerpo, que solo hacia que los trajes de tres piezas de esos que solo podian ser elaborados por esos exclusivos sastres de seul, le hacian ver como la cosa más jodidamente preciosa del planeta tierra..
Donde el pisara, seguramente robaria no solo una mirada, si no robaria todo los corazones que se cruzaran en su camino...
—Park Naera— Repidito el joven Kim que yacia sentado en el tercer sillon de la sala de estar de aquella preciosa casa de los Jeon.
—Mucho gusto señor Kim, ¿A que debo su visita? — La voz de la mujer salio de forma dudosa, pues nunca antes en su vida habia visto al elegante hombre que yacia sentado frente a ella..
—Sabes, los dias de primavera llegaran pasando el infestante invierno, la esperanza renacera y el ave fénix surgira de entre las cenizas, trayendo consigo , la paz, la esperanza , el amor y la ilusion para la tierra marchita que antes estaba muerta.
Los ojos de Nae se abrieron como si no pudiese creer lo que aquel joven le decia, nadie más que ella entendia y sabia de memoria esa frase, y el hecho de que aquel desconocido la repitiera no indicaba nada bueno...
Solo habia una razon para que él estuviera ahí y aquello. Le estrujaba el corazon de un forma que no podia creer.. eso no estaba en el plan..eso no era lo que ella esperaba..
—¿El- el ave- fenix .. perdio sus alas?— Pregunto ella de forma lenta, y temerosa..
—El ave Fenix las ha perdido señorita— La voz de taehyung no tenia ni una pizca de algun sentimiento, era neutral.. simplemete anunciaba el mensaje que su hermano mayor Kim Seokjin le habia pedido entregar...
—Reloj central de la quinta avenida que colinda con la casa azul.. a las quince menos un cuarto el jueves—
EL hombre se levanto, sacudiendo el polvo inexistente de sus finisimos pantalones marrones, caminando de forma elegante y con la cabeza en lo alto hacia la puerta, sin decir ni una sola palabra más, Nae lo acompaño en total silencio, aun asimilando lo que el hombre acaba de decirle..
—Gra-cia-s — Susurro la castaña para depues cerrar la puerta, y subir a su habitacion.. desapareciendo tras aquellas puertas cafes, por un total del 24 horas, simplemente no queria que nadie más la viera.. por que ahora ella era esa pieza clave, para la revelion.. solo ella.
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
