Yang Jungwon, un chico de 18 años, con una vida normal, piensa que está Maldito, todo aquel que se acerca a él muere con el tiempo.
Decidido a averiguar sobre el pasado de sus padres vuelve al pueblo donde murió su madre, descubriendo consigo que er...
- Heeseung, Lee Heeseung - Se comenzó a acercar a nosotros, Sunghoon tomó mi mano causando una sonrisa en el rostro del contrario - El brujo blanco
- ¿Cómo sé que no está mintiendo? - Le pregunté
- No está mintiendo Jungwon - Escuché decir a Sunoo - Hola Heeseung.
- Sunoo ¿Cuánto tiempo ha pasado? - Se acercó al hada que estaba en su tamaño real para darle un pequeño abrazo.
- Casi dos décadas, sigue siendo el mismo- Se acercó a nosotros - Cuidé a Jungwon como me pidió, es un gran chico. - A este punto yo solo escuchaba la conversación, Sunoo si lo conocía.
- Buenos, Jungwon y Sunoo vamos - Me quedé pensando en sus palabras, acaso Sunghoon y Jay no venían con nosotros - Los vampiros aquí no son bienvenidos.
- Un momento - Dije ya un poco molesto - Si Sunghoon y Jay ni vienen, no iré a ningún lado, además de Ni-Ki. Si ellos no son bienvenidos, no tengo nada que hacer aquí.
- Jungwon, anda - Me dijo Sunghoon apretando mi mano - Pasamos por mucho por llegar hasta aquí.
- No me importa, sin ustedes no me voy a mover de aquí.
- Viste lo que son capaz de hacer lo vampiros y aún así quieres que vengan con nosotros - Escuché decir a Heeseung, me miraba fijamente, yo no iba a cambiar mi opinión - Está bien que vengan, al menos sé que uno de ellos no te hará daño.
- Entonces ¿Todo lo de antes fuiste tú? - Preguntó Sunghoon a mi lado.
- Si, necesitaba ver qué tan fuerte era su fuerza de voluntad, si podían manejar sus sentimientos, el hechizo que puse era de que se sentirían atraídos por aquello que desean - Hizo una pausa viendo a Sunghoon - Tu pasaste, tu hermano no, pero Sunoo lo puede controlar.
- Estas cosas son innecesarias, hemos pasado por suficientes cosas ya - Mencioné, realmente me molestaba un poco, podía entender que tal vez se estaba cuidando pero seguía siendo exagerado.
- Bueno, ¿Para qué me buscaban? - Dijo con su mirada amable.
- Necesito saber - hice una pausa no estaba seguro de nada ya - De quién soy hijo, saber la historia de mis verdaderos padres, en el diario de los padres de los Park lo mencionaban y ahora también es sobre él - Dije señalando a Niki- Sunoo usó su algo de hada para salvarlo pero si corazón solo late 3 veces por hora, no sabemos que pasa.
- Te puedo ayudar con todo, pero es necesario que lleguemos a la casa, será más fácil y más cómodo de explicar - Estaba serio, tal vez venían temas duros - Lo siento por lo de antes, pero no confío en los vampiros.
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Llegamos a su casa, estaba en medio del bosque, todo a su alrededor era verde y fresco, habían muchas flores lindas, pajaritos y más animales, parecía vivir en mucha armonía, su presencia me daba tranquilidad, no se veía como alguien malo, incluso Sunoo volaba a su lado entre pequeñas conversaciones que tenían entre ellos, su sonrisa dejaba ver aquellos hermosos dientes que poseía, andaba con una gran gabardina negra que lo protegía del sol y de la lluvia. Por otro lado Sunghoon iba demasiado callado a mi lado, algo le preocupaba pero no quería indagar, no era el momento y atrás de nosotros iba Jay con Ni-Ki, Jay por otro lado estaba lleno de culpabilidad, podía entenderlo perdió el control y fue gracias a Sunoo que no pasó nada.
