Me volví muda. No hablo. Solo pienso. Pienso y pienso conmigo misma. Soy como un avox. No siento. Se mas de lo que desearía, y fui castigada por ello. Soy un muto. No quiero volver a escuchar el nombre Ca..to. Nunca más en toda mi vida.
Es duro ir a la academia, lo bueno es que ahora que no estoy distraída, soy perfecta. No le falló a ningún tiro, desde ningún lugar. Soy la mejor de la academia. Ca...Ese chico rubio es el segundo mejor.
No salgo de mi casa más que para ir a la academia. Todos los días me siento y veo por la ventana cuanta gente pasa...Como los odio. Felices con su vida...Me dan asco. Todos los días alguien toca la puerta...Supongo que será Ca... El chico rubio que va a la academia. No sé porque viene. Yo nunca lo conocí. Ni lo conozco. Ni tengo la intención. No me muevo de mi silla. No hago nada. Cada vez que tocan la puerta no me molesto en parpadear. Ahora sí que estoy aislada. Faltan tres días para la cosecha. Otras de las cosas que más odio en mi vida, aparte de mi vida, los juegos. No porque se muera gente, eso me da placer, si no porque es otra de las estúpidas obras del capitolio.
Sera mejor si voy a dormir. Son las diez y sigo aquí, en esta silla pensando en que tanto quiero morir y que putrefacta es mi vida.
Ya no sueño. Ahora simplemente duermo. No puedo soñar si no siento nada. Además, solo una persona sueña. Yo no soy una persona. Hace dos días que no como nada, y sin embargo sigo a pie, sin molestias. Cuando me doy cuenta ya eran las siete y media, y no había dormido.
No me molesto en peinarme perfectamente como lo hacía antes, y apenas me lavo la cara.
Llego a la academia. Como siempre está el grupo de idiotas sin remedio que nunca aprenderá a lanzar una flecha aunque la lancé con la mano, que encima se burlan de los demás, el grupo de idiotas que me golpeo cuando estaba con...Estaba al lado del chico rubio. Y el chico rubio. Todos son idiotas. Pero bueno, como ya dije, yo odio a todo y a todos.
Otra vez, perfección en mis cinco tiros. Ya me arte de esto. Soy demasiado perfecta. Necesito hacer algo mas...Voy a practicar lanzamiento de lanzas.
Las primeras dos dan en el estomago, la tercera en el corazón y la cuarta falla.
Escucho como el grupo de las lanzas que siempre acaban en el corazón o en algún punto cercano se ríen de mí. Agarro cuatro lanzas, tiro las primeras dos que dan en el corazón, y las otras dos en la cabeza.
Los deje con la boca abierta. No sentí placer. No sentí nada. Solamente lo hice por hacerlo. Lo único que me da placer es ver gente morir...Lo único...Eso me hace reflexionar; Si tanto placer me da ver gente morir, ¿por que no voy a los juegos? Es decir, ya me especialice en dos habilidades, me falta practica en lanzas, pero aun así soy buena. Además, podría matar toda la gente que yo deseara. Y si me matan, bueno...¿Y que tiene de malo? Mi vida es tan miserable que ahora que lo pienso, ir a los juegos es mi única salvación. Además, yo no le temo a la muerte. Suena la campana, estoy por levantar mi bolsa cuando el rubio de ojos azules me frena y yo agarro mi cuchillo y se lo pongo en la garganta. Esa escena se me hace conocida... No hablo, pero el sí.
-Clove...Enserió quiero hablar contigo.
Pues yo no, asi que vete haciendo fila para tributo porque al menos ahí te aceptaran. Y no te conozco, asi que sigue por donde viniste...Idiota.
Suelto mi brazo del suyo muy brutamente y él me agarra por los hombros.
-Clove, yo sé quién eres y sé que estas ahí, recuerda quien soy y porque me amas. Clove, recuerda por que yo te amo.
Acto seguido me besa. Acto seguido le doy un cachetón. Acto seguido me abraza y me dice que me quiere de vuelta...Acto seguido me suelto y me voy caminando a mi casa.
Ese chico rubio está equivocado. Yo no amo. Nunca ame. Y no sé ni siquiera bien lo que significa ese sentimiento. Además,¿ por que me beso? Ese chico está mal. Como todo el mundo aquí.
Tocan la puerta, como de costumbre, pero esta vez en vez de esperar la derriban. No me muevo. No me importa quien sea. Si me asesinan, será rápido porque tendrán la ventaja del ataque sorpresa. Aunque eso no me dejaría ir a los juegos...Da igual, uno va a los juegos con una intención, no?
Era el rubio de ojos azules...
-Clove por favor di algo, yo se que estas ahí, yo se que aun sientes algo.
No, no siento nada. Y lo admitiré. Este maldito imbécil de ojos azules llamado Cato me enseño sentir, y luego me golpeo para que olvidara todo y vea cómo se siente, solo por diversión... Asique solo diré lo que pienso. Y lo diré, con la intención de darle una cuchillada y si es posible provocarlo para que me mate.
-......¿Sabes algo Cato?
-CLOVE!
Una enorme sonrisa se esboza en su cara y yo prosigo con mi frase:
-VETE AL DIABLO.
Su sonrisa se hace todavía más grande y me abraza.
-Clove yo se que estas enojada conmigo, pero juro que hice lo que hice sin pensar dos veces...No tuve tiempo de hacerlo.
-Y que pasa si te enojas todavía más conmigo, es decir, te enojaste porque te desobedecí, y no voy a seguir una orden tuya porque no eres el idiota de mi padre, ¿que pasa si yo hago algo peor, eh? ¿Y si mato a alguien y tu simplemente te enojas por el hecho de que he cometido un delito de pena a muerte? Eh,¿ Cato? Me matarías.
Odio hablar. Odio a Cato. Odio todo y a todos. Me odio. Pero sé que decir lo que dije haría que ese infeliz sufra, asi que lo hice. Hable por primera vez en dos meses y medio.
-Clove te pido que me perdones. Falta un día para la cosecha...Sabes que me presentare como voluntario...Es posible que nunca te vuelva a ver...Te amo, y quiero pasar mis últimos minutos posibles, contigo.
Creí que no sentía nada...Pero sus últimas palabras me quebraron la garganta...
"Te amo, y quiero pasar mis últimos momentos contigo..."
Como la idiota que soy, sin darme cuenta mis ojos empiezan a lagrimear. Pero no lloro, solo caen unas cuantas lágrimas y Cato me abraza.
¿Por que siempre soy tan idiota? ¿Y bipolar? Bueno...Pase dos meses en el estado que estoy ahora y realmente un ser bipolar cambia de opinión más rápido que eso...
Me odio. Me odio por...
Me odio por amar a Cato.
¡¿QUE DEMONIOS ME PASA?!