La Tríada

10

Kinn:

Estaba en mi habitación revisando unos papeles que mi padre había pedido para cerrar un negocio. Las puertas fueron abiertas de golpe, Ken entró con el rostro pálido y la respiración agitada.

-¿Qué es lo que pasa? - Pregunte, el beta tomó una bocanada de aire antes de responderme.

-El señor Vegas fue emboscado - Me levanté del sofá.

-¿Quién estaba con él? ¿Dónde está Porsche? ¡El se fue con Vegas! - Ken bajó la cabeza y miró al suelo, incapaz de verme al rostro.

-No lo sabemos señor...

-¡Como que no lo saben! ¿Dónde está Vegas? - Gruñó frustrado al no obtener respuesta - Busca a Arm, que rastreen sus teléfonos.

-Si señor - Ken salió despavorido de mi habitación, tomé mi teléfono y llamé al número de Porsche, nadie contestó y la llamada fue directo al buzón de voz.

-Vamos bebe, responde - Intente de nuevo, el teléfono sonaba apagado.

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Vegas:

Dejé a Porsche en la casa de Kim mientras esperábamos los resultados de las pruebas, subí a mi auto y manejé en dirección a mi casa. Mi padre me había llamado hace un rato gritando histérico para que regresara de inmediato.

Mire por el espejo retrovisor, dos autos habían comenzado a seguirme hace unos diez minutos. Tomé mi teléfono para llamar a Kim y advertirle que nuestro escondite pudo haber sido encontrado.

-¿Qué pasa? - Kim contestó a la llamada al segundo timbre, su voz se escuchaba tensa. El pobre chico estaba aterrado ante la idea de que su omega fuera su hermano.

-Me están siguiendo, no se si saben sobre tu casa. Saca a Porsche de ahí y protegerlo hasta que regrese - Kim asintió y escuche la preocupada voz de Porsche de fondo.

-Vegas, ¿Que pasa?

- Todo está bien bonito, te veré cuando vea que es lo que mi padre quiere.

-Cuidate - Me pidió.

-Le haré, por favor no te pongas en peligro y sigue a Kim.

-De acuerdo - La llamada terminó, mire por el retrovisor una vez más, comprobando que en efectivo los dos autos me estaban siguiendo y se acercaban a mi para atraparme en medio de la autopista.

Acelere, ignorando por completo los límites de velocidad. Mis perseguidores lo notaron y aceleraron para no perderme de vista. Doble en una intersección para entrar en una solitaria carretera, si estos tipos venían a matarme no les importaría nada mas. Incluso si hay testigos eso no los detendría para completar su misión y asesinarme.

Uno de los autos se acercó hasta quedar a mi lado, el piloto bajo las ventanas y armas sobresalen de esta.

-¡Acábalo! - Gritó alguien, se escuchó un estruendo y el coche perdió el control hasta salir de la carretera y estrellarse contra un poste de luz produciendo un sonido estridente.

-¡Khun Vegas! - Un tipo en motocicletas se acercó a mi auto, el casco me impedía ver su rostro. Pero el gruñido de mi alfa confirmó quién era aquel tipo.

-Pete! ¿Qué demonios haces aquí?

-El señor quien nos envió a protegerlo - Vi por el espejo, varios guardaespaldas en motocicletas dispararon al auto restante.

-¿Protegerme a mí o a Porsche? - Pete rio ante mi pregunta.

Algo pasó rozando el brazo de Pete, el omega grupo adolorido y una mancha roja comenzó a formarse en su camisa blanca. El siguiente disparo dio en una de sus ruedas, el omega freno de golpe, yo hice lo mismo y salí de mi auto mientras Pete bajaba del vehículo sosteniendo su brazo.