La Tríada

Final

Omnisciente:

Un mes, un mes en el que se sobrellevaba una guerra silenciosa entre la Tríada y la Trinidad.

Porchay seguía buscando a Macao sin cesar ni perder las esperanzas, Porsche y Luciano se habían unido para robar y eliminar negocios de tratas de omegas y también tumbaban posibles negocios importantes para la tríada, Vegas y Pete...

-Pídeme lo que quieras, no importa que, lo buscaré por ti - Aseguró Vegas, el embarazado de ya casi cuatro meses asintió avergonzado.

-Eran las dos de la madrugada, no puedo despertarte solo porque quiero comer algo.

-¡Hey! Estamos en esto juntos - Le recordó el alfa, Pete asintió y ambos sonrieron.

Las asperezas parecían ser limadas con el paso de los días y las atenciones del alfa hacía el embarazado omega. Vegas internamente esperaba que Pete cambiará de opinión en esos meses que le quedaban de embarazo, poder criar a su hijo juntos y darle un cálido hogar, pero el contrarió parecía reacio a tener un lazo estrecho con el.

-¡Hemos llegado! - Aviso Porchay en un grito, ambos omegas llegaron a la sala y se sentaron en un sofá frente a la pareja - ¿Como esta el cachorro más hermoso de esta casa?

Pete había descubierto que a el cachorro le gustaba la dulce voz de Porchay, y desde que este se lo había dicho, Chay le hablaba constantemente a su hinchado vientre.

Vegas y Porsche observaron la escena con ternura, mientras Pete acariciaba su vientre.

-¿Todo bien? - Preguntó el alfa a Porsche, este asintió y le restó importancia a la pregunta.

-¿Pete qué quieres comer hoy? ¿Algún antojo? Yo lo prepararé por ti - Ofreció Porsche, los ojos del omega brillaron.

-¿Seguro?

-¡Claro!

-¡Fideos! Salteados con verduras y huevo - Pete pensó por un momento - Y arroz frito.

Los tres rieron al escuchar la petición del omega.

-Yo hare los huevos - Ofreció Chay.

-Yo el arroz frito.

-Bien, haré los fideos y las verduras salteadas. Descansa un poco, y te llamaremos cuando todo esté listo.

-De acuerdo.

Pete se recostó en el sofá y Vegas le colocó cojines detrás de su espalda para que esta no doliera al estar acostado.

Los tres se fueron a la cocina mientras hablaban de su día, el teléfono del omega vibró con la llegada de un mensaje. El rostro de Pete se tenso al leer el mensaje de su señor.

-¿Todo en orden? - Preguntó Vegas en un susurró, Porsche asintió - Chay.

-Aún no hay movimientos - Respondió serio el omega, los tres susurraban para evitar ser escuchados por el embarazado.

Sabían que Pete no era idiota, y que sospechaba de ellos. Vegas había tomado el lugar como líder de la segunda familia, era el único que tenía contacto con la familia principal.

Desde que Kinn había asumido que Porsche lo había engañado y estaba embarazado de Vegas, no habían vuelto a verse. Aunque claro, la tríada exigía ver al legítimo heredero de la segunda familia, pero Vegas alegaba que su omega no estaba a buena disposición debido a su salud.

La controversia de que el omega de la tríada había traicionado a Kinn por irse con Vegas fue grande, pero a los implicados no les pudo importar menos. Vegas y Porsche se dedicaron a sus objetivos y a cuidar de Pete y Chay.