No me iré

153 18 0
                                    

Hermione entro en la pequeña cabaña, a penas logro dar un par de pasos cuando Narcissa Malfoy apareció tras la puerta de la habitación con la varita en alto.

—¡Quieta! Cómo entraste aquí…

Hermione miro con cautela a la mujer también con su varita en alto apuntándola ante cualquier posible ataque, cuando un quejido llamo su atención.

—Draco —susurro la castaña bajando su varita y corriendo hacia la habitación sin importarle que Narcisa aún la estaba apuntando.

En cuanto entro a la habitación las lágrimas cayeron por su rostro al ver al rubio tumbado en la cama con el torso desnudo lleno de vendajes, corrió hasta él acariciando su rostro.

—Draco…

—¿Hermione?

—Draco, lo siento tanto, esto es mi culpa…

—¡Claro que lo es! —grito Narcissa apuntando a Hermione logrando que ella quedara atrapada en la pared mientras sentía como su garganta era apretada quitándole la respiración.

La castaña llevo sus manos desesperadamente a su cuello para tratar de liberar la presión en el mismo sin éxito.

—Como te atreves a entrar en mi casa, venir aquí y tocar a mi hijo, ¡Despreciable sangre sucia!

—No… —soltó Draco con dificultad tratando de levantarse—. Basta… no la toques… ¡Suficiente! —grito de manera débil mientras caía justo en los pies de la castaña.

Narcissa horrorizada bajo su varita para correr al rescate de su hijo.

—Como puedes defenderla… —dijo indignada —como puedes humillante así ante está impura.

Draco no contesto, lo único que le importaba en esos momentos era socorrer a Hermione quien tocia con dificultad recuperándose.

—Eres un Malfoy… que no lo entiendes Draco… esto que haces es una vergüenza para la familia…

Narcisa seguía hablando o más bien reprochando a Draco.

—¡Es una sangre sucia!

—¡Dije que suficiente! No te atrevas a llamarla así nuevamente…

Draco se levantó con dificultad para enfrentar a su madre, pero Hermione también lo hizo tratando de detenerlo.

—Draco no lo hagas, por favor…

—No voy a permitir que manches el buen nombre de esta familia por alguien como ella… —soltó la mujer furiosa y luego apunto a la castaña —Y tú… ¡Quita tus manos de mi hijo! —grito tratando de alcanzarla, pero el rubio se interpuso.

—El nombre de nuestra familia ya está bastante manchada con la sangre que tengo en mis manos… tú y mi padre se aseguraron de eso y te lo diré una última vez. No te atrevas a tocarla… —amenazo Draco con decisión.

Al segundo siguiente su cuerpo ya no resistió más y cayó de rodillas al piso.

—¡Draco! —grito Hermione con desesperación llegando hacia el.

—¡No lo toques! —grito Narcissa apuntándola con la varita —Y lárgate si no quieres que lance una maldición sobre ti que hará que supliques morir…

—¡Haga lo que lo de la gana! —estallo la castaña cansada levantándose para quedar al mismo nivel de la mujer mirándola con altanería—. Tortúreme, máteme si quiere, pero no me iré, no dejaré a Draco y mucho menos así.

Hermione saco su varita para colocar nuevamente a Draco en la cama, miro a un lado donde se encontraba una pequeña cómoda que ahora estaba llena de todo tipo de pociones y hierbas. Las leyó rápidamente para saber que había y luego fue administrándole al rubio. Tras varios minutos cuando logro estabilizarlo este despertó.

Solo un juego (Dramione)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora