Deseo

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Más tarde ese día y después de que Hermione tuviera una larga charla con la menor de los Weasley ya se encontraba en su última clase del día, porque Ginny tenia razón, le había hecho entender que si estaba en Hogwarts era por ella y no debía dejar que sus planes se vean estropeados por un jodido imbécil como él. Y sobre todo porque no importaba lo que había pasado está mañana, lo que le había dicho, nada cambiaba las cosas entre ambos. La duda y el dolor seguían ahí y no lo podía cambiar aunque su corazón le pedía a gritos que fuera a sus brazos.

Camino a paso apresurado para llegar al aula en el tercer piso donde sería la reunión, sabía quién eran los prefectos de cada casa asignados, pero aún desconocía el nombre del otro premio anual que la apoyaría en sus funciones, al parecer también se encargaría de la organización de la ceremonia a los caídos, algo que la alivio bastante tomando en cuenta todo el trabajo que eso conllevaba.

—Señorita Granger —saludo Minerva McGonagall en cuanto la vio entrar y tras una disculpa por su llegada tarde está se sentó en la banca más cercana a la directora.

—No se preocupe a llegado justo a tiempo.

Hermione observó el lugar con todos dentro, los reconocía eran los prefectos asignados de este año de las cuatro casas, pero aún no se daba cuenta de quién era el otro premio anual.

—Estábamos hablando sobre los horarios de patrullaje para este año…

—Siento llegar tarde.

Hermione salto de su silla mirando hacia la puerta y ahí estaba Draco de pie apoyando su brazo en el marco y con esa sonrisa arrogante mirándola, volteo ligeramente mientras sentía su sangre hervir para enfrentar a la directora quien parecía reusarse a encontrar su mirada.

—¡Qué hace él aquí!

—Señor Malfoy, pase acabamos de empezar —hablo la directora en tono calmado ignorando completamente a la castaña, quien empezó a respirar pesadamente por la furia en su interior mientras apretaba los puños con cada paso del rubio acercándose al resto.

Ernie Macmillan un estudiante y prefecto de Hufflepuff, quien fue parte del ejército de Dumbledore acaricio delicadamente la mano de Hermione quien se encontraba en la silla a su lado acto que no pasó desapercibido por el rubio.

—Profesora McGonagall, estoy de acuerdo con Hermione porque Draco Malfoy un mortífago está aquí.

—¡Ex Mortífago! —recalco Draco mientras se acercaba hacia sus asientos —con notas muy por encima de las tuyas y en la guerra, te recuerdo que fui yo quien destruyó un horrocrux—. Una vez estuvo lo suficiente cerca del chico agarro su mano con la que sostenía la de la castaña apretando con demasiada fuerza.

Sabía que podía romperle la mano en un segundo para enseñarle a no tocar a su castaña, pero era un Slytherin, inteligente y astuto no caería en provocaciones e impulsos innecesarios, debía jugar muy bien sus cartas si quería reconquistar a Hermione, así que solo soltó una sonrisa arrogante y de superioridad.

—Con permiso —dijo el rubio dando un apretón mucho más fuerte y apartando bruscamente la mano del chico de la de Hermione para pasar y sentarse a unos cuantos asientos tras ella.

Ernie siguió con la mirada desafiante a Draco sin demostrar la menor debilidad.

—Van a seguir juzgándonos por los errores de nuestros padres o podemos continuar con la reunión —hablo Astoria Greengrass la nueva prefecta de Slytherin sentada al lado del rubio.

—Los horarios de los prefectos para sus rondas ya están establecidos —comento McGonagall tratando de aliviar la tensión.

Astoria le brindo una sincera y dulce sonrisa a Draco logrando que la castaña pusiera los ojos en blanco y regresará su vista hacia la directora. Estaba molesta, muy molesta, pero debía empezar a cambiar de estrategia, de reojo volvió a mirar la ya roja mano del chico a su lado, conocía a Draco sabía de lo que era capaz, pero estaba quedando como una loca histérica dejándose llevar por sus impulsos, debía relajarse si quería ganar esta batalla. No dejaría que las acciones arrogantes y tramposas de Draco tuvieran algún efecto en ella, estaba decidida a demostrarle lo equivocado que estaba en cuanto a sus sentimientos.

Solo un juego (Dramione)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora