Una Oportunidad

Capítulo 23

Sábado 18 de julio, 2025.

El sol bañaba las calles de Madrid con su luz, el cielo despejado y más de cincuenta personas preparando todo para la boda que se realizaría ese día en aquella hermosa finca, cuando el reloj marcara las cuatro de la tarde dos personas cerca del centro de Madrid unirían sus vidas finalmente para siempre.

Porque cuando encuentras a esa persona que te hace sentir la vida como nunca antes, con la que sonríes de una forma diferente, cuando saca la mejor versión de ti, y cuando todo parece desaparecer cuando están juntos no la puedes dejar ir. Susurrando en su oído "cariño no tengas miedo, arrirguemonos a vivir esta historia de amor", luchando contra el miedo, eran ellos contra el mundo.

Con cada movimiento de las manecillas del reloj, estaban un paso más cerca de decir el mejor "¡SÍ!" de toda su vida.

Al ser las 7:00 am Itziar llegó a un hotel cercano al lugar donde sería la boda, donde la esperaba uno de los mejores estilistas de novias de todo Madrid con todo su equipo de peinado y maquillaje para prepararla, además de Karina la diseñadora del vestido que la ayudaría a ponerlo y ajustar pequeños detalles para que fuese perfecto.

Mentiría si dijese que no estaba nerviosa, por dentro el nudo en su estómago hacía presión, pero mayor era la emoción en su pecho por unirse al amor de su vida.

Álvaro por otro lado, había ido por los niños desde la noche anterior, ellos debían estar ahí en ese día tan especial. El traje estaba listo, su barba hecha, el cabello y accesorios listos para el gran día.

Un jardín lleno de flores, específicamente rosas en tonos blancos, rosas y algunas orquídeas en color lila acompañadas de lavanda, sillas blancas ordenadas hacia el altar que tenía un arco de flores cubriendolo. La mayor parte de la decoración era blanca con pequeños toques de color rosa, lila, la madera y el verde de las hojas.

En la entrada del recinto había un par de tarjetas para que los invitados dejasen sus buenos deseos hacia la pareja y luego pudiesen colgarlas. Junto a un letrero de cristal con la palabra "Bienvenidos" y sus nombres debajo junto a la fecha.

Se había fijado una hora de llegada para los invitados, para iniciar 45 minutos después y que todos estuvieran ahí.

Una hora antes salieron del hotel Itziar y sus damas de honor, en las afueras del hotel había un sin fin de fotógrafos, cámaras, reporteros que querían cubrir el evento del año, saludó de lejos a los presentes incluyendo algunos fans de ellos que estaban ahí.

Subieron a un carro antiguo que las llevaría hasta la finca.

El reloj marcaba las cuatro de la tarde de un 18 de junio, los invitados conformados por sus familias y  sus mejores amigos que al final del día eran su familia también, miembros del elenco principal de la casa de papel, productores, directores y todas esas personas que amaban habían tomado asiento.

Los padrinos y damas entraron, conformados por Pedro, Rodrigo, Luka, Najwa, Esther, Ursula, Miguel y amigos de Itziar y Álvaro.

El camino al altar estaba lleno de pétalos de rosas a los lados, una dulce melodía inundó sus oídos cuando la novia estaba por llegar, todos de pie, algunos ya con lágrimas saliendo admiraban lo hermosa que se veía Itziar en su vestido de novia.

Itziar apareció con un hermoso vestido de satín blanco, un escote recto con unos tirantes gruesos, corte sirena con una sobre falda y un velo cayendo por su espalda junto a la cola del vestido, con el cabello recogido hacia atrás y un maquillaje delicado e intenso a la vez, se veía perfecta, con el ramo de rosas entre sus manos caminaba hacia el amor de su vida, quien la esperaba con lágrimas en los ojos y una enorme sonrisa.