Sistema de freno

Un futuro

Tendría que haberlo pensado aun con alcohol en sangre, joder, claro que Travis tenía razón.

Fue cuestión de ver lo que traía puesto para darme cuenta de que quería comermela completa. Y mi mano...ya estaba ahí, joder, en el movimiento rápido terminó ahí, a centímetros de su coño. Ella se agitó y sonrojó, yo solo quería sentirla un segundo. Pero tocarla, la combinación de entender que no llevaba ropa interior, lo suave de su piel, el jadeo cuando rocé su clítoris, la humedad que encontré al bajar a su entrada, necesitaba más.

Gruño apoyando mi nuca contra la puerta de mi habitación y me peleo conmigo mismo, viendo mi dedo brillante de su fluido. Me rindo y lo llevo a mi boca, saboreandolo y soltando un gimoteo de placer. Tan liquido, un sabor tan suave, como ella. Su interior estaba tan blando y cálido, mojado. Sigo chupando mi propio dedo mientras sus gimoteos, su forma de retorcerse y aferrarse a mi llenan mi mente, haciéndome palpitar.

Joder ¿Y ahora que coño hacemos?

Luego de destrozarme la polla con pensamientos que no debería tener me siento más tranquilo, así que tomo el pantalón de pijama que me pidió Jared, que no quería dormir solo en boxers como los demás.

Bajo y me dirijo a la sala de cine, que es la cosa más genial que alguna vez vi. Cuando llego veo a casi todos ahí, acomodándose en la cama gigante, mientras Heaven les tiende almohadas y mantas. Busco con la mirada y noto que faltan no uno, si no dos de mis amigos. Me acerco a la cama justo cuando Heaven baja de un saltito, aproximándose al mini bar que queda detrás de mi.

-¿Harry y Jared?-intento, probando también si podemos ser naturales.

-Jared se durmió en el sofá de la sala con Blair y Harry fue cazado por Sarah-suelta y parpadeo, alzando mis cejas-Mmhm, se lo llevó a una de las habitaciones de invitados de arriba, del pasillo del viejo. Vanessa y Garret están en la del otro pasillo de aquí abajo, así que somos los que ves-concluye, rodeándome para tomar dos botellas de agua de la nevera.

-Creí que los de la banda te correspondían-apunto y ella asiente, dando un trago.

-Pero puede si es con mi autorización, la cual me pidió hace ya un tiempo, siempre le gustó Harry, y yo solo lo veo como amigo. Hasta hoy no había tenido oportunidad, pero si, esa chica sabe lo que quiere-concluye y me río, porque eso parece.

-Y Jared...

-Se abrazaron un momento con Blair en el sofá y se durmieron sin más. Les pusimos una manta y almohada, pero los dejamos ahí-concluye y asiento.

-Vale-contesto, y ella va a llevarles las botellas de agua a algunos de los chicos, así que me subo a la cama, en la esquina derecha. En total íbamos a ser dieciséis, pero seis no duermen aquí, así que sobra bastante espacio. Travis queda tendido a mi izquierda, pero a un sano metro, imagínate, ni me entero que está. Y a mi derecha sobra metro y medio. Vale, los amigos de Heaven están bastante apretados, de hecho creo que están haciendo una cucharita grupal, uno detrás del otro, pero aun así hubiéramos entrado todos aquí fácilmente.

-¿Ponemos alguna peli o ya quieren dormir?-pregunta Heaven bajito mientras baja las luces, como si realmente fuera un cine y estuvieran por comenzar las propagandas de otras pelis.

-Peli-reclaman varios y ella asiente.

-¿Opciones?

-Algo de Disney tío, luego de sus historias cualquier cosa que no sea Kung fu panda me va a acojonar-reclama Marion y nos echamos a reír, pero Heaven asiente. Abre la plataforma de películas y entra a la sección de familiares, de donde elige Como entrenar a tu dragón, por voto casi unánime. Termina de apagar las luces y la veo mirar desde la esquina hacia la cama, pero parece concluir que aquí es donde hay más lugar. Pasa corriendo y encorvadita frente a la pantalla, con lo que todos soltamos risitas, y termina por subirse a mi lado. Me acerco un palmo más a Travis, para darle a ella su espacio y que no sienta que tiene que dormir con medio cuerpo fuera si no quiere tocarme. Pero ella al parecer no tiene problema con eso, porque se pone de lado hacia mi, repta por la cama hasta encontrar mi brazo, y luego lo aferra, enroscándose a él como si fuera un peluche. Apoya su cabeza en mi hombro y rodea con ambos brazos mi bicep, mientras retiene mi mano extendida entre sus muslos, casi sus rodillas, en su favor. Se me dormirá todo el brazo en cosa de media película, pero está bien para mi.