Soy tuyo

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Si no tuviera la tira de seda aquí como prueba, aun creería que fue un sueño húmedo. De hecho estaba teniendo un sueño de Heaven, y de repente ahí está, sobre mí, tocandome. Me deja tan fuera de juego que ni siquiera encuentro fuerza para correr tras ella, y me duermo pensando que eso que mencionó Sarah que Ven sabe hacer con la lengua, va a perseguirme el resto de mis días.

Cuando me despierto es tarde, así que los tres ya se fueron, antes de que pudiera tener una conversación con Heaven y exigirle algunas respuestas. Como porque hizo eso, como porque la venda, como porque se fue, como cuando podemos hacerlo de nuevo, y algunas cosas más.

Resigno mi carrera fuera de la casa para estar aquí tan pronto como llegue, pero la puerta solo la cruza Derek.

-¿Y las chicas?-inquiero, cuando entra en la cocina.

-Tenían tarde de spa con Caleb, cosa que hacen siempre antes de comenzar los exámenes, o sea la semana que viene-contesta y asiento, para ir a sacar frustración al gimnasio. Ni siquiera llegan a la cena, porque al parecer salen a hacer eso también. Espero literalmente pegado a la puerta de mi habitación, y a eso de las diez la escucho caminar de puntitas por el pasillo. Abro de un golpe y ella da un respingo, tragándose un chillido, con sus zapatos en su mano.

-No quería despertarte...-balbucea, pero la interrumpo tomando su mano y jalandola adentro.

-¿Hoy no quieres despertarme?-inquiero cerrando detrás de mi, y avanzo a ella, que retrocede hasta caer sentada en el borde de la cama.

-Yo...no...quería...-balbucea, y me arrodillo en el suelo frente a ella.

-Querías escapar de la conversación que sabes que debemos tener-concluyo y lloriquea-Nena-llamo, poniendo mis manos en sus rodillas-Me parece que merezco algunas respuestas. Y no me malinterpretes, me encantó, pero quiero entender de donde vino eso en el medio de la noche-susurro, y mira hacia abajo con el indicio de un puchero.

-Era una prueba-susurra y parpadeo.

-¿Una prueba de que?

-De si podía...de si podía hacerte eso sin tener una pesadilla-murmura y parpadeo, pero entonces se me ocurre.

-Tienes pesadillas...desde lo que te hicieron-intento y hace una mueca.

-Algo así-susurra-Desde...desde entonces, casa vez que hago algo sexual con alguien, incluso solo tocarlo o que me toque, en la noche tengo una pesadilla. No las...no las tengo siempre, ni una noche aleatoria. Solo después de hacer algo así. Sueño...que esa persona con la que hago algo entra a la habitación y se suma al tio-susurra y cierro mis ojos, sintiendo dolor físico por esto-No...no lo había pensado, hasta anoche. Derek tuvo una pesadilla, le hablé de esto, y él me preguntó si desde entonces siempre que hacia algo sexual esa persona aparecía en la habitación. Estaba por decirle que si, cuando...cuando noté que no-murmura, aun mirando hacia abajo, y entonces entiendo-Luego de...de chocar contigo en el pasillo, yo estaba tan concentrada en convencerme de que no había sido nada, solo un mínimo contacto, que no noté que esa noche dormí bien, sin...sin la pesadilla. Primero pensé que era porque me creía mi propia mentira de que no era nada, aunque tampoco era muy sólido, podría ser. Pero...luego de lo de la sala de cine, tampoco, y con eso no podía engañarme. Entonces se me ocurrió que era porque...porque dormía contigo. Luego de...esas dos veces, dormimos juntos. Así que quise comprobar si era...si era eso. Una mamada con otra persona bastaba para que apareciera en la habitación, ya lo había probado, así que supuse que funcionaría. Por eso...por eso me fui, anoche. Quería dormir sola, y comprobar si así si tenia la pesadilla-concluye y suspiro, tragando.

-¿La tuviste?-susurro, y ella niega. Mi cuerpo se afloja y mi cabeza cae en sus piernas, porque habría odiado que soñara conmigo haciéndole eso, agrediendo de esa forma su cuerpo.

Sistema de frenoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora