La vida de Jess.

CAPITULO 21

-Chicos y chicas, como siempre empezamos por el principio para hacer las pruebas, esta vez diré un número al azar y empezara esa persona, ¿entendido? Bien, empezaremos por... A ver a ver -echa un vistazo a la lista de clase y dice el balón- el diecisiete, ¿quien es?
Genial, soy yo, no me importa mucho, pero siempre me pasa a mi macho. Doy un paso al frente.
-Soy yo -digo levantando la mano- ¿que hay que hacer?
Oigo unas risitas a mi espalda, probablemente sea Raúl, o uno de esos imbéciles que le acompañan, en fin.
-La prueba consistirá en hacer el mayor número de posiciones de acrosport en un minuto, será por parejas, y, como veo a Raúl con ganas, lo harás con el Jess.
-Eh, no, no es justo, por que tengo que hacerlo con él -protesto aunque se que no va a servir para nada-
El profesor se gira y coloca unas cuantas colchonetas en forma de cuadrado. Raul se me acerca, pone su brazo sobre mis hombros
-¿Que pasa Jess? ¿No quieres hacerlo conmigo?
-Prefiero que me caiga un rayo -contesto bruscamente- quita tu brazo de mis hombros, ya.
-Venga ya, sabes que quieres, además soy la mejor pareja que podrías tener, total, tus amigas te han dejado, no ibas a tener muchas opciones, tienes suerte de hacerlo conmigo.
-Si, ya, mis amigas están bien conmigo, gracias por la preocupación.
Doy media vuelta y me dirijo hacia el profesor, cuanto antes empecemos antes acabaremos.
-Raúl ven aquí -grito-
-éste se acerca y me dice en bajo -Ves como tenias ganas guarrilla.-
-Lo que tu digas, mas te vale que hagas bien esta prueba, empezaremos con posiciones en el suelo y luego iremos haciendo las de rodillas y luego las de de pies. Yo peso menos que tú, así que, obviamente, me cogerás tu a mí.
-¿Quieres hacer una prueba o el kamasutra? -dice mientras se ríe-
-Cállate y hazlo.
Raúl se tumba en el suelo, para prepararse para la primera posición. Yo sigo de pies esperando el aviso del profesor para empezar.
-El minuto... Empieza... ¡Ya!
Nada mas decirlo me agacho y me pongo encima de Raúl con mi cabeza en sus pies, agarro sus tobillos y el los míos, extiendo los brazos y él hace lo mismo, de modo que estoy en el aire. Me bajo haciendo una voltereta y hacemos otra posición, así hasta que el profesor da la señal de que se ha cumplido el minuto, en ese momento yo estaba haciendo el pino con las piernas en los hombros de Raúl y las manos levantadas del suelo. Bajo y ambos miramos al profesor como diciendo que que le ha parecido, él simplemente nos dice que estamos en el grupo de los buenos. Bueno, en realidad no dijo exactamente eso, pero la cuestión es que lo hemos hecho bien y estamos en ese grupo.