𝕎𝔼𝕃ℂ𝕆𝕄𝔼 𝕋𝕆 𝕄𝕐 𝕊𝔼𝕏 𝕊ℍ𝕆ℙ - WooSan/SanWoo

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—¿Por qué tienes tanto interés en ayudarme?

El señor Choi se quedó pensando la respuesta, parecía que ni él mismo sabía por qué lo hacía.

—Si puedo ser honesto, no lo sé. Creo que simplemente nos encontramos en el momento indicado, tú necesitabas un trabajo y yo un empleado, el probador es algo necesario para la promoción de nuestros productos. No quiero que pienses que hay una segunda intención en esta oferta que te hago, lamento si te hice sentir incómodo con tanta confianza.

—No tiene por qué disculparse, solo tenía curiosidad. Bueno, ahora que lo sé, acepto el trabajo.

—¿En serio?–yo simplemente asentí. Él me agradeció y comenzamos todo el proceso para que legalmente fuera un trabajador de la compañía. Luego de firmar algunos papeles, llenar algunos formularios y que el señor Choi me explicara algunos detalles del trabajo, me dijo mi horario de trabajo (que realmente no era un horario, simplemente los días que debía venir a la compañía a entregar los informes y a buscar los productos a evaluar.

—Parte del trabajo consistirá en brindar retroalimentación sobre la durabilidad, la sensación, la diversión, el cuidado posterior al uso, el diseño y el empaque de los productos. Tu sueldo será de 48,000 dólares anualmente, lo que significa que serían 4,000 dólares mensualmente sin contar bonos y comisiones.–abrí los ojos, eso era demasiado dinero por esa clase de trabajo. -—¿Alguna pregunta, pequeño?

—Entiendo... ¿es necesario tirarme fotos o algo así?

—Oh no no, no es necesario, solo redacción.–respondió con una sonrisa reconfortante. Su sonrisa era muy bonita y muy en el fondo me hizo sentir de cierta manera.—Bueno, si ya no tienes más preguntas, puedes pasar al departamento de Marketing y Ventas, diles que eres el probador, ellos sabrán qué hacer. Buena suerte, pequeño. Nos veremos por ahí.

—Hasta luego y muchas gracias por ayudarme.

—No tienes por qué.

Salí de la oficina con una sonrisa para dirigirme al departamento que me dijo el señor Choi.
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Solo mis gemidos se podían escuchar en la habitación. Luego de que me entregaran mis primeros productos, llegué a mi casa y la curiosidad me carcomía así que decidí comenzar a probar mis primeros juguetes. Ya llevaba dos orgasmos y este era mi tercero, no pensé que usar juguetes fuera tan bueno. Ahora me encontraba probando un plug anal de túnel, hasta ahora era mi favorito, estaba ansioso porque Hongjoong llegara. Estaba tan concentrado que no escuché como la puerta de entrada se cerraba ni las pisadas que se acercaban cada vez más a mí habitación.

—¿Wooyoung?–me asusté mucho al escuchar una voz y me cubrí con una sabana asustado. Vi quien estaba en la puerta y sonreí con picardía, me quité las sábanas y seguí con mi trabajo.

—Joongie~

Hongjoong tragó con dificultad y cerró la puerta con seguro.

—Veo que ya empezaste a trabajar...–dijo mientras se iba quitando los botones de su camisa uno por uno, yo lo miraba ansioso.

—Es que no llegabas, tenía que bajarme las ganas que me quedaron más temprano...–Hongjoong se subió a la cama y gateó hasta quedar encima de mí, se acercó a mi rostro y unió nuestros labios en un beso desesperado.

—¿Con qué estás jugando?–dijo separándose del beso y bajando hacia mi cuello, él amaba ese lugar.

—Es un plug anal de túnel...–decía entre suspiros, amaba como Hongjoong conocía cada uno de mis puntos débiles.—Funciona para tener mejor acceso visual al recto, para explorar el juego anal y eso, facilita insertar dildos, líquidos, dedos y penes, ¿quieres intentarlo?–la mirada lasciva que me dió Hongjoong hizo que algo dentro de mí se encendiera. Agradecía que mis padres ya no estuvieran en la ciudad, hoy sería una larga noche.
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