Tres

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Son las once de la mañana hasta ahora. Llevamos un poco más de cinco horas haciendo fila fuera del teatro. Las barras de chocolate que estaban en mi bolso han pasado a la historia, al igual que las patatas fritas. Sin embargo, mi estómago ruge como nunca.

Courtney está en una fila diferente a la mía, en donde sólo hay menos de 20 personas; se supone que es la fila del "M&G". Mientras que yo estoy en la otra, en donde, sin pensarlo, cuento más de 100.

Pero no me preocupo. Courtney está a mi lado, y sin ningún problema ella se hace amiga de las tres chicas que están en su fila y las dos chicas que están frente a mí y trata de integrarme.

- ¿Y bien? ¿Cómo conocieron a Shawn? -Una de las chicas que está frente a Courtney pregunta.

-Vine.

-Vine

-Una amiga me mostró un cover que hizo, y me gustó.

-Vine.

Luego todas me miran a mí; era mi turno de responder. Y sin darme cuenta me pongo nerviosa. Yo no lo conozco. De milagro me sé su nombre, hasta hoy me entero de que soy cinco meses mayor que él, y sólo me sé una canción.

¿Qué se supone que debo decir ahora?

Como si mi mejor amiga leyera mis pensamientos, ella responde por mí.

-Gaby no es fan de Shawn -puedo jurar que las chicas con las que nos estábamos haciendo amigas, me miraron entre confusión y asco.

Bitch, whaaaaaat?

-Soy la que soy su fan, y ella es mi mejor amiga en todo el mundo. Le pedí que viniera conmigo al concierto porque no es que tenga mucha vida social aquí. Ella sabe quién es Shawn -eso podría catalogarse como una mentira- y lo diferencia entre los demás cantantes -bueno, tal vez eso sí sea verdad-, pero no es una gran fan. Ella viene conmigo.

Las miradas de las chicas ya no son de confusión. Ahora hasta parece que quieren llorar de la ternura.

- ¿Entonces sólo vienes por acompañar a Courtney? -Yo asiento con la cabeza con una sonrisa-. ¡Eso es muy tierno!

-Además, ella pagó mi entrada -levanté los hombros-, no iba a perderme un concierto gratis por nada del mundo, sobre todo si estamos hablando de lugares preferenciales.

Todas comienzan a reír y de pronto ya no me siento como mosca en leche. Una de las chicas saca el tema de Jacob a relucir y yo casi tengo un ataque de felicidad por darme cuenta de que a ella también le gusta.

A la hora del almuerzo, no hacemos más que pedir un domicilio a Pizza Hut. La fila no se ha movido un centímetro, y todas seguimos en el suelo, esperando a que sean las cuatro de la tarde para que abran las puertas del teatro. El tiempo pasa, y cuando me doy cuenta, Courtney está casi llorando; comienza el "M&G".

Las chicas se esa fila se levantan emocionadas, a punto de colapsar y comienzan a arreglarse. Courtney no sabe qué hacer.

-Todo estará bien, ¿vale? -Me levanto del suelo y le tomo de las manos-. Tú te mereces eso, esto y mucho más, Court. Todo ese tiempo que has esperado para conocerlo valdrá la pena. Ahora ve, sonríe, bésalo y dile cuánto lo amas.

Ella derrama lágrimas, y por un momento pienso que yo también voy a comenzar a llorar.

-Está bien, Court. Estoy completamente segura de que ese tal Shawn va a quedar sorprendido por tu belleza -le doy ánimos-. Por favor, no llores. No salgas llorando en la foto, ¡esto es un momento que quizá no se repita! ¡Tienes que guardar un buen recuerdo de esto! ¿No querrás ver una foto tuya con Shawn cuando sales llorando, verdad? -Ella se ríe y se limpia las lágrimas cuando la fila comienza casi a avanzar-. Ve y pon la sonrisa más linda que tienes. Suerte.

Pruébalo ; Shawn MendesDonde viven las historias. Descúbrelo ahora