Once

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Traté de ignorar el cosquilleo que sus palabras dejaron en mi estómago, pero se me hizo imposible. Así que durante el recorrido que hacemos de la yogurtería hasta alrededor del parque, mi estómago sigue emitiendo ese ridículo cosquilleo. No es que no me guste, pero me hace sentir rara. Como si quisiese que él me diga más cosas así de bonitas. Porque aceptémoslo, lo que me dijo fue bonito.

Quizá no entre en las frases para enamorar a una chica, pero definitivamente entra en las frases de hacer que una chica se sonroje y sienta un maldito cosquilleo que no la deja parar de sonreír como idiota. Es justo como me he sentido desde que salimos del local.

Para mi suerte Courtney está tan distraída con la presencia de Shawn que no nota cada vez que le doy miradas.


Nos sentamos junto a un árbol grande y viejo, mientras terminamos nuestro yogur. Shawn nos ha contado mucho más sobre él. Bueno, algo es algo. Mientras que Courtney parece nunca aburrirse.

- ¿Crees que vuelvas a dar un concierto aquí? -Le pregunta. Él se ríe, asintiendo con la cabeza, dándole una cucharada a su yogur congelado.

-Por supuesto. El vivir a aquí facilita las cosas, creo.

- ¿Puedo hacerte una pregunta, Shawn? -Él me mira, y me da una sonrisa; tomo eso como un sí-. ¿Por qué te has mudado aquí?

-Bueno, la verdad es que mamá ha estado soñando con esta ciudad desde hace mucho -levanta los hombros, relajado-. Así que cuando era un niño me prometí comprarle la casa que tanto quería. Ahora que tengo cómo, se la he comprado aquí, porque es lo que siempre soñó.

- ¿Cuándo eras un niño? -Me burlo de él.

-Oh, vamos, en dos meses tendré diecisiete años, ya estoy muy grande.

-Es lo que he tratado de decirle -Court gruñe-. Ella sólo tiene diecisiete, y los cumplió en marzo, y créeme cuando te digo que se burla de ti por tener dieciséis.

-No es mi culpa, te encuentro casi un bebé todavía -me río.

Nuestra tarde se pasa así. Nos pregunta sobre la escuela y sobre nuestro futuro. Cuando Court le pregunta sobre sus estudios, él responde que está terminando de graduarse en línea, porque los conciertos y todas esas cosas no le dan tiempo. Sin embargo, cuando se gradúe, seguirá como un artista.

-Quizá estudie música en alguna universidad, quién sabe.

El reloj da las seis y media dela tarde, y nos encontramos caminando hacia la casa de Court. Cuando estamos en la puerta, su padre sale y quita la alarma de su auto, un bonito convertible negro. Cuando pasa a nuestro lado ella le sonríe y lo saluda con un "Hola, papá", pero al parecer él sigue tan enojado como para asentir con la cabeza fríamente e irse en su auto.

Courtney suspira, negando. Le doy un empujón y luego la abrazo por los hombros, susurrándole palabras de aliento. Por otro lado, Shawn no sabe qué hacer. No tiene ni idea acerca de esta situación, por lo que es completamente normal que se sienta incómodo y solo meta las manos a los bolsillos de su pantalón.


- ¿Quieres que entre contigo un rato? -Le digo. Ella niega con la cabeza de nuevo y me sonríe.

-No, está bien. Ya estuviste lo suficientemente afuera como para que yo provoque un castigo con tus padres.

Pongo los ojos en blanco ante su estúpida excusa. Pero la entiendo; quiere estar sola.

-Está bien. Sabes que puedes llamarme si necesitas algo, ¿vale? -Ella asiente y me da un abrazo.

-Nos veremos mañana en la escuela, te quiero. Adiós.

Pruébalo ; Shawn MendesDonde viven las historias. Descúbrelo ahora