La caída de Kaenri'ah // CHILUMI (Genshin Impact) // TERMINADA

Capítulo 20

Lleva todo el día revisando el ejemplar de "La dama y su destino" que Childe había comprado para él unos días después de leerlo, intentando en vano encontrar alguna pista sobre como evadir la profecía. Aether había vuelto a presentarse en la puerta hace una hora con la esperanza de que su hermana quisiera verlo, pero había regresado a los brazos de Xiao sin ver a esta.

Aunque por fuera el pelirrojo refleja seguridad Lumine sabe que solamente esta así para que ella este más calmada, lo conoce lo suficiente como para saber que eso es solamente una fachada y que en el fondo se encuentra igual de abatido que ella.

Childe se acuesta en el sofá donde se encuentra la rubia, apoyando la cabeza en sus piernas y enterrando la cabeza en su estómago. Una leve sonrisa eleva las comisuras de Lumine y comienza a acariciar el cabello naranja del otro. El ojiazul rodea la cintura de la menor con una de sus manos y mueve un poco su cabeza, disfrutando las caricias de su amada y permitiéndose cerrar los ojos por un momento. Al estar todo el día anterior buscando a la rubia se había desocupado de sus responsabilidades en el trabajo por lo que había estado toda la tarde ocupado en ello, además de aprovechar los ratos libres para buscar información en la biblioteca.

- Siento que tengas que pasar por todo esto - susurra Lumine.

- No digas tonterías, ni que hubiera sido culpa tuya. - deja un beso sobre el ombligo de esta y mira hacia arriba, encontrándose con esos bonitos ojos dorados.

- Lo de ayer sí que fue culpa mía.

- Fue elección mía dejar todo de lado para ir a buscarte. Y lo volvería a hacer si hiciera falta.

La rubia siente como la sangre asciende hasta su rostro y colorea de rojo sus mejillas y la punta de sus orejas.

- Pero...

Childe la calla atrayendo su cabeza hacia abajo con una mano y juntando los labios de ambos. Se toma un tiempo para saborearlos, memorizando cada parte de ellos y poco después se separa despacio con una gran sonrisa en los labios.

Lumine deja el libro sobre la mesa que hay a su derecha y se encarga de jugar con el flequillo del otro, haciendo peinados extraños con los mechones rebeldes del pelirrojo, quién solamente la mira con una sonrisa boba en los labios al ver su cara de concentración. Si no podía solucionar todos sus problemas al menos hará que se olvide de ellos por un momento.

Unos fuertes golpes en la puerta principal interrumpen el momento y hace que la pareja se sobresalte. Estos cesan por un momento, antes de volver a insistir con más fuerza y acompañados de unos gritos furiosos.

Él pelirrojo suspira y se levanta del asiento con una mueca de hastío, caminando a la puerta con el ceño fruncido.

- Ya decía yo que tu padre estaba tardando mucho en venir... - susurra Childe por lo bajo antes de abrir la puerta.

Frente a él se encuentra un Dainslef desarreglado, respirando forzosamente y con el rostro rojo de furia. Él menor no se deja intimidar ante la presencia del rubio y apoya uno de sus brazos sobre el marco de la puerta, en una clara postura defensiva, esperando paciente al ataque del otro.

Mientras el mayor se esfuerza por controlar su respiración el ojiazul levanta la mirada, mirando sobre el hombro del otro y encontrándose con la mirada del arconte y su hijo. Vuelve a dirigir una mirada de párpados pesados al padre de los mellizos y coloca el otro brazo tras la puerta para ser capaz de cerrar esta en cualquier momento dado.

- Dame a mi hija.

- ¿Disculpa?

- ¿Eres tonto o simplemente te lo haces? He dicho que me des a mi hija.