Gente Sombra

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Renzo había recurrido al experto en limpieza luego de capturar unas ratas en su casa y ahora aguardaba en el recibidor, los resultados de la fumigación.

-Señor, el aseo profundo finalizó. Efectivamente es como dijo. No sólo entregaron la información al rey Jerome, también se lo vendieron al Duque Donovan.- Massimo Muscari, la nueva mano derecha de Don Tony se limpiaba las manos con un trapo húmedo

-Donovan? El ducado del oeste que limita con Inster? Eso significa que habrá llegado a oídos de esas pestes la existencia de Polaris y la campaña belicista. Ramon, envía una misiva al cuartel general en el Pico de la Viuda para que Sunday como Bartolomeus estén al tanto. No dejaremos cabos sueltos- chasqueando sus dedos, Ramón se retiró

-La invasión deberá adelantarse. Una vez empiecen a morir unas cuantas gallinas, los gallineros elegidos se salvarán bajo las alas del buen granjero que saldrá a defenderlos en el momento exacto- la rabia y la migraña no se iban en Renzo luego de tres días por lo que optó en pensar en otra cosa

-Concuerdo. Cuando las comadrejas salen de su agujero es porque buscan ser exterminadas. Pero como dijiste, hay quienes no aprenden nunca que desafiar al granjero solo trae consecuencias- Jasper seguía cabreado por la farsa de sus aprendices

-Así mismo- en el instante en que creyó que el dolor de cabeza se había desvanecido, el maullido de Tigris lo desconcentró

*Meow meow*

-Regresaste rápido. Qué encontraste amiguito?- había traído una billetera y alguien venía tras el corriendo

-Ven acá gato, devuélveme eso!- un hombre rubio y portentoso trataba de capturarlo cuando Tigris se detuvo frente a ellos

-No deberías correr por los pasillos, Guido.- Don Tony lanzaba el humo del puro en su cara

-Lo siento jefe pero es que ese animal me saltó encima para encajarme las uñas y luego me robó la cartera! No sé quién dejó entrar a un gato callejero pero me ocuparé de el- se notaba enfadado

-Lo siento jefe pero es que ese animal me saltó encima para encajarme las uñas y luego me robó la cartera! No sé quién dejó entrar a un gato callejero pero me ocuparé de el- se notaba enfadado

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Tigris miró a Ren y lanzándo una espantosa sonrisa, desvió los ojos a la billetera azul en el suelo. Luego de recogerlo, solo bastó un segundo entre que trató de abrirlo y el descarado de Guido se lo arrebató de las manos violentamente.

-Qué crees que estás haciendo? Acaso sabes a quien intentas ofender?- el escolta Fabrizio, lo reprendió

-Lo lamento, es que sigo nervioso por este sucio animal. No volverá a repetirse, lo juro- inclinándose buscaba redimirse

-Vas a tener que disculparme por ensuciar tu piso pero no puedo dejarlo pasar- la semilla de la duda se instaló al momento de ser herido por Tigris y sin pensarlo más, Ren sacó su arma

*Bang bang*

-Ahhh! Por qué?!!!‐ Guido empezó a retorcerse en el suelo

-Ren, si fue solo por ese inconveniente creó que exageraste!- Don Tony se tapó los ojos para negar

Dulce DomingoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora