BM

Extra 3- Capítulo 1.1

La mansión era muy ruidosa desde la mañana. Hoy fue el día en que Qiang finalmente tuvo una entrevista para entrar en el jardín de infancia.

—No,Qiang. Dejemos a Sharky hoy.

Qiang llevaba un traje de marinero y pantalones cortos que quería usar en los días importantes. Xiao Zhan quería que usara el traje que compró para aquel día, pero, aunque se vio obligado a renunciar a la idea de cambiarle el traje, no podía permitirle llevar el muñeco.

La cara de Qiang pronto se puso blanca de sorpresa cuando señaló el muñeco de tiburón que sostenía con fuerza. Tan pronto como vio su cara, el corazón de Xiao Zhan se debilitó.

—Bueno, Qiang, dejemos a Sharky con el Sr. Dylan durante la entrevista. Está bien, ¿Verdad?

Mientras daba un paso atrás y llegaba a un compromiso, Qiang abrazó el muñeco y miró a Yibo esta vez. Porque Yibo siempre lo escuchaba cuando lo miraba desesperadamente. Xiao Zhan, que conocía su tendencia a ser infinitamente suave con su único hijo, no tuvo más remedio que suspirar en cuanto lo vio. Tan pronto como pensó que debía ir a la oficina del director con un muñeco, Yibo, que estaba de pie y observándolos hasta entonces, cruzó silenciosamente sus brazos y abrió la boca.

—Papi tiene razón. Coge el muñeco y déjaselo a Dylan mientras hablamos, ¿Vale?

La cara de Qiang, traicionada por la facción de confianza, se endureció hasta el asombro. El niño, que era incapaz de decir nada con la boca abierta, era probable que estallara en lágrimas pronto, así que Xiao Zhan sabía lo que pasaría, miró a Yibo haciéndoselo saber, así que Yibo levantó al niño y le dijo en voz baja.

—Qiang, ¿Qué dijo papá? Dijo que ibas a hacer nuevos amigos, ¿Verdad?

—Sí.

El niño pronto asintió con lágrimas en los ojos. Yibo lo tranquilizó con una voz sorprendentemente amistosa.

—¿Pero no sería difícil si otra amiga quisiera llevarse bien con Qiang? Mira, si llevas a Sharky no podrías darle la mano a tus amigos debido a que debes sostener el muñeco, ¿Verdad?

—Uh…

Las palabras sacudieron notablemente a Qiang.

—Sólo mientras te encuentras con tus nuevos amigos y les dices “hola “. Puedes mantenerte alejado de Sharky por un segundo. Puedes hacerlo, ¿Verdad? Porque Qiang es un chico valiente.

—… Sí.

Sólo entonces el niño se limpió las lágrimas con los brazos mostrando que se sentía aliviado.

—Está bien solo por un minuto.

—Sí. Dylan va a esperar fuera de la puerta con Sharky, ¿De acuerdo?

Mientras Yibo le miraba a los ojos, Dylan asintió sensatamente. Qiang, que lo confirmó, tomó un gran respiro. Exhaló y agarró el muñeco.

—Puedo hacerlo.

—Sí,Qiang.

Yibo sonrió y besó al niño en la mejilla. El niño, a quien besó en la mejilla, preguntó rápidamente con cara de preocupación.

—¿Qué pasa si los piratas vienen a buscar a Sharky?

—Dylan lo protegerá.

Cuando Yibo lanzó la respuesta, Dylan rápidamente intervino.

—Así es.

—Ya veo.