Wonyoung [Sunsun]

XXXVIII

Sunoo suspiró por tercera vez frustrado de no ser capaz de poner su completa atención en estudiar para su último exámen. Estaba bajando las escaleras para pedirle al grupo de adolescentes que invadia su casa que se callaran ¿acaso ellos no tienen cosas que hacer también? Cuando estaba abriendo la puerta de su habitación el timbre sonó.

Mientras iba a mitad de camino se sorprendió de encontrarse con su nuevo conocido, (casi amigo puesto que era bastante de su agrado aunque no le gustara admitirlo) en la puerta.

—Oppa, ¿qué haces aquí?—preguntó Wonyoung algo desorientada.

—Olvidaste esto en mi casa el otro día.—extendió timidamente una bufanda rosa. Hubo un silencio entre ambos y las risas de sus amigos en la sala invadió el lugar.—Veo que estás ocupada, debería irme.

—Espera.—hasta Wonyoung se sorprendió así misma cuando su voz salió acelerada, no queriendo que se vaya.—Puedes pasar si quieres, están mis amigos.—informó.—Pero si te sientes incómodo no hay problema.

—Sería un placer.—sonrió con dulzura causando un sonrojo en la chica.

No sabía que se arrepentiría de su decisión, apenas entró se vió rodeado por el grupo de amigos quienes lo analizaban de arriba a abajo. Había tres chicos que lo observaban con los brazos cruzados, uno al lado del otro y no parecían felices de su presencia.

—¿Quién es él Wonyo?—preguntó el azabache.

—Un amigo.—presentó y las chicas soltaron una risita ya qué sabían de quien se trataba.

—¿Amigo? Nos tienes a nosotros, no necesitas más.—refunfuñó el australiano.

—Además, no parece confiable, ¿de dónde se conocen?—esta vez fue Jay quién habló.

—Del centro comercial, y sean amables con él.—los acusó.—Los conozco, celosos.

Sunghoon había olvidado completamente que había sido él quien había incentivado a Wonyoung a aceptar salir con ese chico puesto que la castaña no lo había vuelto a nombrar. No se arrepentía porque la mayor de los Kim tenía un brillo especial en sus ojos pero sabía que debía cumplir su rol de mejor amigo y asegurarse de que no sea un mal partido para ella.

—Mucho gusto, soy Yeonjun.—finalmente se presentó con amabilidad tratando de causar una buena impresión y de no dejarse intimidar por el trío de chicos. En una de las mesas había un chico más alto  que no parecía interesado en la escena y miraba sus uñas con aburrimiento.

Apenas terminó de hablar Sunoo terminó de bajar las escaleras curioso de quién sería el invitado que en ese momento se encontraba de espaldas a él. Al verlo, su novio lo llamó.

—Justo a tiempo, bebé. Estabamos conociendo al “amigo” de tu hermana.—Sunghoon le hizo señas tratando de ocultar una sonrisa, sabiendo perfectamente de que si había alguien intimidante y desconfiado era él.

Pero todos se llevaron una sorpresa cuando una sonrisa gigante se instaló en el rostro del más bajito al darse cuenta de quién era.

—¿Yeonjun hyung, qué hacés aquí?—parecía contento con la inesperada visita, de todos los lugares, jamás hubiera esperado encontrarselo en su casa.

—¡Sunitoo! Qué agradable coincidencia, solo pasaba por aquí porque Wonyoung se había olvidado algo en mi casa.

—¿Ustedes se conocen?—indagó algo receloso Sunghoon y la sonrisa de Sunoo desapareció.

—Y-yo, nosotros.—comenzó a balbucear sintiendo la mirada escéptica de su novio quemar.

—Nos conocemos por un taller de arte.—mintió al ver que al rubio no se le ocurría nada, este solo le agradeció con una sonrisa tímida.

No les creía nada, ¿por qué su novio parecía feliz de la visita de aquel desconocido y para colmo mentían sobre su relación?

—¡Esto es genial!—musitó feliz la castaña ajena al ambiente tenso que inevitablemente se había creado.—Estoy segura de que se llevarán de maravilla.

—Yo debo seguir con mis tareas.—hizo una mueca disculpandose.—Pero diviertanse y no hagan mucho ruido. Un gusto encontrarte aquí, Yeonjun hyung.

¿Eso era todo? Sunghoon esperaba algo más por parte de su novio sabiendo lo sobreprotector que podía llegar a der con Wonyoung, ¿tan bien se llevaba con ese tal Yeonjun como para no importarle que salga con su hermana?

Sunoo trató de despedirse de Sunghoon con un beso corto pero este le corrió la cara claramente enfadado con él. Trató de ocultar el malestar que eso le causó manteniendo una sonrisa cordial a la hora de despedirse del resto.

—Deberías disimular tu enojo.—aconsejó el estadounidense una vez volvieron a tomar asiento, ahora todos le hacían preguntas al recién llegado dirigiendo su completa atención a él.

—Es él, el de los mensajes.—mencionó apretando los puños.

—¿Estás seguro? ¿Qué tan probable es que lo sea?

—Estoy seguro.

—Igualmente creo que deberías hablar con Sunoo.—trató de razonar.—Hace días estás haciendote la cabeza con eso y jamás se lo mencionaste.

—Mira quien habla, casi te da algo cuando Jungwon dijo que no podía venir por salir con Heeseung.—replicó de mal humor.

—Pero yo tengo justificación, después de enterarnos lo que hizo, ¿cómo no preocuparme? De todas formas, la comunicación es algo importante. No seas de esas personas que se enojan sin motivo alguno y luego explotan, ahora estás en una relación y si algo te inquieta debes hablarlo.

Sunghoon odiaba que su amigo tuviera razón y lo maduro que parecía en ese momento. Como si supiera que decir y que hacer cuando en realidad el siempre se dejaba llevar demasiado por sus emociones.

—Jungwon es un maldito suertudo por tenerte.—más que un halago, había sonado como una queja.

—Lo sé.—contestó con una sonrisa arrogante.—Mañana es San Valentín Romeo, ¿qué planeas hacer?

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aparezcooo

nada tenía este cap medio que estaba terminado medio que no pero soy muy vueltera disculpen

siento que hace mil no actualizo y habra pasado menos de una semana perdón soy muy intensa 😔👊

hace poco me uno a u

como siempre gracias por tomarse el tiempo de leer mi historia, espero que les guste 🥺❤️