∆|•Cassy Potter•|∆ Parte I y II. [En Proceso]

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Casiopea.

—Profesor Snape, lo estaba esperando —dijo Dumbledore, luego señaló el asiento a mí lado-. ¿Quiere sentarse?

—De hecho profesor, venía a buscar a la señorita Potter para mostrarle la casa de Slytherin y explicarle cómo serán sus clases desde ahora.

—En ese caso se pueden retirar— dijo el director haciendo una seña con su cabeza para que me levantara.

***

Me perdí la clase de herbologia y el almuerzo, genial.

El sarcasmo no va contigo¿Sabes?

Cuando llegué al aula de la profesora McGonagall ya había algunos chicos esperando que la profesora llegue. A los pocos minutos llegaron Harry, Ron y Hermione.

—Hola, Cassy—me dijo Harry sonriendo—. ¿Que es lo que quería Dumbledore?

Yo me acomodé un mechón de cabello tras la oreja. No sé cómo se tomaría Harry la noticia.

—Bueno... —comencé nerviosa—. Él dijo que también debo pertenecer a Slytherin. Que debo... Ya sabes... Estar en ambas casas.

—¿En ambas casas?— preguntaron los tres juntos.

—Si. El profesor Snape también habló conmigo—expliqué—. Dijo que tendré que pasar una semana en cada casa. La semana que esté en Gryffindor iré a clases con ustedes y la otra semana con Slytherin.

—Eso es horrible—dijo Ron.

—¿Y por qué no puedes quedarte solo en Gryffindor?— preguntó Harry con una mueca. Ron y Hermione no lo notaron, pero sonaba un poco triste.

—Él dijo que habló con antigüos directores y estos le dijeron que solo había ocurrido un caso igual al mío. Y que los mismos fundadores del colegio ordenaron que se haga de esa forma. Algo estúpido, si me lo preguntas a mí.

—Eso es injusto— dijo Harry—. De todas formas no debes pasar tanto tiempo allí si no quieres. Mientras que no tengas que dormir o ir a clases te quedas con nosotros.

Yo le sonreí. En ese momento llegó la profesora McGonagall y nos hizo entrar al aula, me senté junto a Hermione y saqué mis libros.

La clase de la profesora McGonagall fue muy complicada. Aún que logré convertir mí escarabajo en un botón en menos de quince minutos. Logré convertir tres, Hermione perdí la cuenta, Harry uno y Ron no logró hacerlo para cuando salimos del aula.

Ibamos caminado hacia el aula de defensa contra las artes oscuras cuando me dieron ganas de ir al baño.

—Chicos, guardenme un lugar junto Hermione—les dije doblando por un pasillo—. Voy al baño y los alcanzo.

—¡Apúrate!— escuché el grito de Harry mientras me alejaba.

Llegué al baño e hice mis necesidades y volví a salir apurada, al llegar a la esquina de un pasillo escuché voces y decidí detenerme a escuchar un poquito.

Chismosa.

—Pero le estoy diciendo que no fui yo...

—Pues no me importa— era la voz de Filch—. Estás vagando por los corredores en horas de clases.

Recordé una anécdota que me había contado Fred y decidí acercarme corriendo.

—¡Señor Filch!— dije llamando su atención—. Llevo buscándolo casi media hora. El profesor Dumbledore lo busca, dijo que era muy importante. Quería consultar no sé qué sobre echar a Peeves.