Bajo La Piel // Kookmin

Capítulo 11

—Jungkook.

—Hola —saluda soltando su agarre de mi muñeca.

Espero a que continúe pero como no pasa nos quedamos mirándonos durante unos segundos hasta que me aburro.

—Si no dirás nada lo mejor es que continúe mi camino —hago el ademán de irme pero me detiene.

—Creo que nos debemos una conversación, aquel día yo-

—No es buen momento para hablar, quizás si es que hoy vas a dormir a casa lo hagamos ahí.

Es todo lo que digo para marcharme, cruzo la pista y puedo sentir su mirada sobre mi espalda.

Una parte de mi quería escucharlo, arreglar las cosas y prometernos que nunca más nos lastimaremos, así como lo hicimos otras veces. Pero la parte orgullosa de mí se niega a ceder, pues las veces en lo hice terminé más decepcionado, él simplemente prefirió evadir el problema e irse, ni siquiera le importó cómo me sentiría así que ahora no puede acercarse como si nada y querer hablar.

Me detengo cuando estoy frente a la casa de Jackson y antes de tocar el timbre limpio con el dorso de mi mano las pocas lágrimas que están sobre mi rostro.

—Bien Jimin, ahora sonríe y toca —me digo a mi mismo y así lo hago.

No espero mucho para que la puerta sea abierta y la figura de mi ex novio entre en mi campo de visión, me recibe con una amplia sonrisa, nos saludamos y me invita a pasar. Juntos nos dirigimos hacia el comedor donde una deliciosa comida está servida.

—Vaya, ¿tú preparaste todo esto?

—Me encantaría decir que sí y sorprenderte, pero eso sería mentirte y eso es algo que jamás pienso hacer en mi vida —dice sin percatarse que sus palabras acaban de provocar estragos en mi interior— compré la comida de un restaurante muy bueno.

Asiento y sonrío para disimular mis ganas de romper en llanto otra vez, ¿por qué duele pensar en que Jungkook si es capaz de mentirme?

Comemos mientras Jackson me pregunta algunas cosas de la universidad, le respondo todo y le cuento sobre la competencia y como casi se me va el alma al pensar que el profesor no me seleccionaría. Él también me cuenta sobre lo bien que se pudo adaptar a una nueva ciudad y cómo le va en su trabajo.

El resto de la tarde nos dedicamos a realizar nuestro pasatiempo favorito que es ver películas y luego de unas horas ya es hora de volver a mi apartamento.

—Me encantó pasar la tarde contigo, Minnie —acaricia mis mejillas.

—A mí también, Jack —le abrazo colocando mis manos alrededor de su cuello, mientras el me sostiene de la cintura.

Huele tan bien que no soy capaz de soltarlo quedándonos así durante unos cuantos minutos. Cuando creo que ya es suficiente le suelto, pero él a mi no y al momento de intentar separarnos nuestros rostros quedan frente a frente a escasos centímetros, siento mis mejillas calentarse y que sus ojos estén mirando mis labios no ayuda para nada.

Poco a poco se acerca más y se por donde va esto, si no lo detengo me va a terminar besando, pero ¿lo quiero detener? no lo sé, aún tengo el recuerdo de cómo se sentían sus labios sobre los míos y es una sensación que, sin duda me gustaría volver a experimentar, pero no porque aún lo quiera o me atraiga, porque no es así, la primera vez que lo volví a ver después de mucho tiempo tuve dudas, las cuales se disiparon el resto de veces que nos vimos, y pude llegar a la conclusión de que lo quiero y aprecio como un amigo, mas no como el novio que un día llegué a tener.

Giro mi rostro impidiendo lo que estaba por suceder, me mira con confusión y le entiendo, nunca le hablé de Kook así que creo que es normal que se sienta así.

—No es correcto —digo.

—Lo siento, no quería incomodarte, pensé que tú también quer-

—Tengo novio.

Sus ojos se agrandan y su boca se abre ligeramente, no dice nada, solo agacha la mirada.

—No quería confundirte, Jack perdóname —le acaricio la mejilla y me puedo percatar de las lágrimas que está derramando— será mejor que me vaya.

No me quedo a ver su reacción, simplemente salgo lo más rápido que puedo, mi corazón una vez más duele, lastimé a una buena persona por segunda vez, pero juro que no era esa mi intención.

Está lloviendo y las gruesas gotas me empapan en un instante, me abrazo en un intento nulo de querer protegerme y comienzo a correr hacia la parada más cercana de autobús.

Pasan los minutos y ningún vehículo aparece, es como si el universo estuviera conspirando en contra mía, bueno quizás merezca todo lo que me pasa. Espero unos quince minutos más y como sigue sin parecer transporte, me resigno a caminar.

Avanzo de forma lenta ignorando la lluvia, cuando mi móvil suena de manera repentina. Es Tae, quien comienza a hablar a penas atiendo.

—Ya sé cual es el vínculo que tiene Jungkook con Ji-Eun —dice— te espero en el café de siempre, yo ya estoy aquí así que apresúrate.

Corta y yo bufo, no tengo ánimos de nada, pero realmente quiero saber lo que mi mejor amigo tiene que decirme, es por esa razón que he cambiado mi ruta y ahora me encuentro en camino al café.

...

Holaa, hoy me estuve sintiendo mal y no pensaba actualizar pero como mañana no podré y no quería dejarles sin capítulo, ahí lo tienen. Espero que sea de su agrado y pues eso... cuídense mucho 💜