capitulo 24

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Llamé al timbre con un nudo de nervios en el estómago. Tenía los papeles en la otra mano y tuve que contenerme para no estrujarlos por la tensión del momento.

Casi parecía que había pasado una eternidad cuando Marcy por fin abrió la puerta. Iba vestida normal, sin ropa de gimnasio, cosa que me sorprendió. Pero me alegró ver que su ojo azulado estaba mejor, aunque el interior seguía estando un poco rojo y tenía pinta de doler.

—Qué agradable sorpresa —me dijo, sonriendo.

—También me alegro de verte, Marcy.

—Yo siempre me alegro de verte, ya lo sabes, no hace falta que te lo diga.

Me hizo un gesto para que pasara, pero le sorprendió un poco ver que no lo hacía. Estaba demasiado nerviosa y sentía que ahí dentro iba a ser peor.

—¿No quieres entrar? —preguntó, confusa.

—No... yo... tengo que...

Me callé de golpe cuando vi lo que tenía detrás y me asomé un poco mejor.

—¿Eso son cajas? —pregunté, confusa.

Marcy se apartó y esa vez sí que entré. Me quedé mirando el piso con una mueca de confusión, sin entender nada. Casi todos los muebles estaban cubiertos y las cosas de Marcy dentro de cajas.

Espera, ¿qué...? ¿Se iba?

—¿Te vas a mudar? —pregunté, mirándolo.

—Se podría decir que sí.

No entendí nada, pero ahora mismo no podía pensarlo. Necesitaba acabar con esto, así que extendí los papeles hacia ella.

—¿Qué es esto? —preguntó con media sonrisa maliciosa—. ¿Mi discurso cursi?

—No... es algo mejor.

Marcy empezó a leer el papel distraídamente, pero vi que su expresión se volvía menos divertida y más perpleja a cada segundo que pasaba. Cuando vi que por fin llegaba al punto que quería, carraspeé y se lo dije.

—Son los papeles del divorcio firmados por Maggie.

Marcy me miró con la boca entreabierta, pasmada, y yo me apresuré a levantar el otro papel. Seguía estando muy nerviosa.

—Y eso es... el artículo del periódico. Imagino que lo habrás visto. Han metido en la prisión a varias personas y... bueno... quería que supieras que... ejem... a lo mejor... soooolo a lo mejor... yo he tenido un poquiiiiito que ver...

Marcy seguía mirándome con cara de Pikachu sorprendido, así que seguí hablando para llenar el silencio.

—Verás, la madre de andrew se puso en contacto conmigo y acordamos que yo robaría los papeles y ella se encargaría de buscar a alguien que publicara el artículo. Así que fui con Maddie, ivy y Alex a robarlos y... eh... ¡no te enfades con ellos, yo los obligué! Pero bueno, la cosa es que salió bien, después Maggie nos ayudó y... me dio los papeles y... ejem... bueno... aquí tienes.

Seguía mirándome con cara de perplejidad absoluta, así que de nuevo seguí parloteando como una idiota.

—Han echado a su padre de la SFWA, así que ya no es quien coordina quién entra y sale. Hablé con Olivia hace unos días por teléfono y... uf... no sabes la alegría que le di. Casi me pidió que me casara con ella y todo —risita nerviosa—. Le pedí que no te dijera nada porque... eh... quería darte yo la sorpresa.

Pausa. Abrí los brazos como si lanzara confeti al aire.

—¡Sorpresa! —dije como una idiota—. ¡Puedes resivir el premio y seguir escribiendo libros!

Todo tiene su tiempo  -MarcAnne-Donde viven las historias. Descúbrelo ahora