Capítulo 24

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Holi, aquí está el último.
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Lina

Fui al centro comercial y recordé por qué detesto ir a lugares en Noche Buena.

La gente se multiplica.

Si normalmente en una tienda hay 2 personas, en esa época hay 10.

Personas con prisa por todos lados, intentando conseguir los regalos de última hora y a pesar de eso, se mueven extremadamente lento.

No compré muchas cosas, solo fui al supermercado por un nuevo pavo, ya que Bastian arruinó el que teníamos intentando seguir una receta que Cooper le dió.

Pésima idea.

Salí de casa a medio día sonriendo como una idiota recordando lo que había pasado anoche con Cooper, estaba extremadamente feliz.
Y cuando volví, la sonrisa no había desaparecido de mi rostro.

—Hola, tío David—saludé al entrar.

—Hola, Lina. Tengo noticias.

Parecía muy feliz.

—Olivia logró que alguien la cubriera en el trabajo ésta noche.

Desde que llegué, casi no había visto a mi tía, y eso que vivía bajo su techo. Habíamos coincidido los días que me levanté a las cuatro de la mañana para ir a la montaña.

Ósea, un día.

Ella trabajaba en un hospital y con sus horarios o guardias, era muy complicado verla.

—¡Cenará con nosotros!—dijo mi tío emocionado—iré a comprar pie de manzana, le encanta.

Sonreí mientras él se ponía su abrigo.

—Los chicos están intentando no incendiar la cocina—dijo señalándola.

Cuando me acerqué, los escuché susurrando.

—¿Y qué le dijiste?—preguntó Keila.

—Lo qué pasó—respondió Bastian despreocupadamente—Bueno, lo que recuerdo que pasó, mi memoria no es muy buena.

—Si él no lo sabía es porque Lina no quiso contarle.

—Probablemente no quería incomodarla preguntándole, es un tema sensible.

No le di mucha importancia a su conversación cuando entré a la cocina.

—He vuelto.

En cuanto oyeron mi voz, fingieron estar ocupados.

—Genial—dijo Keila con nerviosismo.

—Tú—señalé a Bastian—tienes prohibido acercarte al pavo a más de un metro de distancia.

Puso los ojos en blanco y siguió cortando los vegetales.

Keila y yo comenzamos a preparar el pavo con la esperanza de tener más suerte que Bastian y terminar a tiempo para la cena.

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