Mi lejano futuro (Rusper)

Capitulo 25: Academia Parte 2

Varias semanas habían pasado desde que la chilena conoció a sus nuevos amigos, la academia en si le parecía super sencilla, ella por su condición le parecía fácil todos los temas. Pero le encantaba que entre clases, o después de clases, se ponía a cantar todas las canciones que podía, y eso le fascinaba ¿No podía ser su vida mejor?

Es más, hasta el director la había exonerado de varias clases, ahora solo debía entrar ahí para dar exámenes y comprobar que ella ya sabía de los temas, algo sencillo para ella.

Ahora mismo, la pequeña peliazul caminaba por los vacíos pasillos de la academia, iba por primera vez a su salón privado donde estaría con un profesor propio. El director la convenció de que se quedase ahí, pero le pondrían un profesor propio de universidad para que le enseñe de todo, aparte de prepararla para la universidad.

Ella solo aceptó para ver si al fin tenía un reto, quería ver si ese profesor universitario de verdad podría enseñarle algo, y si no, le haría la vida un infierno para que se valla. La verdad, solo se quedaba en esa academia por sus nuevos amigos, nunca había tenido unos tan sinceros que no hablaban de ella a sus espaldas, de verdad les agradaba.

Chile: —Sala.. A-504 en el quinto piso, espero que ese profesor no sea demasiado cruel, sería horrible humillarlo..— respiró hondo un tanto nerviosa, había escuchado como algunos profesores universitarios eran demasiado estrictos con los alumnos y eso la preocupaba. Sin embargo, al entrar en aquel salón, notó como aquel profesor se levantó de su asiento para recibirla... No podía ser cierto.. —Ah... ¿Papá Nazi?—

Nazi: —Chile... Hija— con tan solo caminar un par de pasos, aquel alemán pelirrojo recibió un fuerte abrazo por parte de la pequeña... Hacía tantos años que no la había visto, apenas la conoció un día, y ya la apreciaba como una hija —Alemania te extrañó tanto todos estos años... Créeme, cuando te fuiste, te comenzó a escribir todos los días, el primer año, hasta más de dos veces al día... Tengo que llamarlo, él-..—

Chile: —No no, no lo llame, a esta hora está en sus clases y después trabaja... Si he visto a Alemania papá, siempre hablamos después de su trabajo—

Nazi: —¿Lo estás viendo? ¿Desde cuando? Él está viviendo en la ciudad de Nortwest City—

Chile: —Lo sé, mi hermana mayor también vive ahí con mi hermano, los tres viven en una casa y los fines de semana voy a verlos ¿Recuerda? Puedo abrir portales a lugares donde ya he ido, o a lugares donde se encuentran las personas que conozco—

Nazi: —Lo sé... ¿Ya puedes hacerlo a tu propio control? Recuerdo que nos comentaste que no podías controlarlo antes y siempre te perdías.. ¿Cuándo se detuvo eso?—

Chile: —Dos años después de conocerlos, ahí recién pude ir a lugares donde ya he estado, y al primer lugar que aparecí fue ese parque donde Ale me encontró... Nunca los encontré, busque por toda la ciudad ese día...—

Nazi: —Lo lamento... Nos mudamos después de un año, pasaron algunos problemas y... De verdad Alemania quería verte... Nos mudamos a la dirección que decía la nota en tu collar, Ale la conservó todo ese tiempo—

Chile: —Ya veo. . . Perdón, nosotros durante un largo tiempo nos empezamos a mudar cada ciertos meses... por eso las notas con la dirección todos los días—

Nazi: —Entiendo el punto de tu padre por mudarte tanto..— acarició ligeramente el cabello de su pequeña hija antes de besarle la frente, ya se imaginaba como su hijo habrá reaccionado al volverla a ver —Estás tan grande Chile... Y me sorprende mucho que yo sea tu profesor privado en una academia tan grande—