Señorita Miller • JJK (COMPLETA)

𝐶𝑎𝑝𝑖́𝑡𝑢𝑙𝑜 19: 𝑈𝑛 𝑡𝑒𝑟𝑟𝑖𝑏𝑙𝑒 𝑠𝑢𝑠𝑡𝑜

JungKook despertó sintiéndose aturdido y adolorido por el golpe recibido en su cabeza. Al tocar su frente hizo una mueca de dolor, deslizó sus dedos cuidadosamente por su cabello y antes de llegar a la herida una mano lo detuvo.

—Ten cuidado, tuvieron que cerrar la herida con dos puntos.

— ¿Hyung?

— ¿Cómo te sientes?

—Algo perdido—captó un olor inusual que sólo tenían los hospitales— ¿Dónde estamos?

—En el hospital, robaron algunos departamentos del edificio incluyendo el de las hermanas Miller—explicó—Olivia llamó a Julia cuando iban en la ambulancia, dijo que te encontró inconsciente en la sala y sangrando—JungKook recordó lo ocurrido—También dijo que la puerta estaba abierta.

— ¿Dónde está Olivia?

—Con Julia, fueron por algo en la cafetería, Liv se altera con facilidad si se trata de ti, me recordó cuando fue ella la herida al caer por las escaleras—el pelinegro se incorporó en la camilla un tanto mareado—Ten cuidado, un golpe en la cabeza es delicado.

—Recuerdo que escuché un ruido en el departamento, pensé que era Julia contigo, no pensé que serían ladrones—hizo una mueca de dolor—La cabeza me está matando.

—Le diré a una de las enfermeras que te de algo para el dolor.

Justo en ese momento Olivia y Julia se acercaron a la camilla, el chico estaba en la sala de emergencias con unas cortinas que brindaban cierta privacidad para el paciente. Liv no dudó en ir donde JungKook abrazándolo, éste dio palmaditas a su espalda intentando calmarla.

—Estoy bien.

—Me asusté tanto al verte así.

—Tranquila, estoy bien. Sólo tengo un leve dolor de cabeza.

—La policía atrapó a los ladrones—Julia intervino—Tomaron testimonio de los vecinos y hace poco tomaron el nuestro.

—Lamento no haber defendido el departamento...

— ¿Estás loco?, lo que importa es tu salud, gracias a Dios que no te dispararon o hirieron gravemente—reprochó—Iré con NamJoon.

JungKook escuchó sus pasos alejarse, Olivia volvió a abrazarlo recostando su cabeza en su hombro. Éste acarició su espalda estrechándola entre sus brazos.

—Incluso yo que puedo ver no pude defenderte.

—Fue mejor que no estuvieras allí.

—Estabas sangrando mucho.

—Ya pasó—besó su cabeza—No te preocupes, estoy bien, señorita Miller—ella sonrió ladinamente ante eso sin soltarlo, se sentía más cómoda ahí.

▪︎▪︎▪︎

— ¿Y está bien?—Emily se escuchaba preocupada del otro lado de la línea.

—Sí, bueno, tiene una cicatriz en la cabeza pero estará bien, fue un desagradable susto—bostezó— ¿Podrías decirle a los profesores que faltaré a clases hoy?

—Supongo que no has dormido nada.

—Absolutamente nada.

—Pasaré a verte por la tarde.

—No es necesario...

—Claro que sí—se apresuró a decir—Llevaré algo para comer y beber, no te preocupes.

Justo cuando Emily colgó, otra llamada llegó al teléfono de Liv. Era su padre, respiró profundo respondiendo.

—Hola, papá.