Señorita Miller • JJK (COMPLETA)

𝐶𝑎𝑝𝑖́𝑡𝑢𝑙𝑜 25: 𝐶𝑜𝑛𝑠𝑒𝑗𝑜 𝑚𝑎𝑡𝑒𝑟𝑛𝑜

Olivia tenía una hora despierta, comenzó a dar vueltas en la cama sin poder conciliar el sueño. Su cabeza le daba vueltas a un tema en específico, seguía sin ver nada negativo en el hecho de que quisiera casarse, aunque si le dolía lo que JungKook había dicho sobre no querer proponérselo, incluso cuando dijo que no en ese momento, se sentía mal por ello. Suspiró mirando al pelinegro que dormía, tenía sus labios entreabiertos y sus ojos cerrados, un brazo descansaba sobre su abdomen mientras que el otro descansaba sobre su cabeza. Tenía una camisa de mangas cortas que dejaba ver sus brazos fuertes.

"Realmente no veo nada malo en querer casarme"

Sí, era joven. Sí, tenía veintiuno y sí, podía conocer a otros hombres, pero amaba a uno y era él.

Mientras más lo pensaba más deseaba darle paso a ello. ¿Ser la esposa de JungKook?, sonaba como una idea maravillosa que podría volverse realidad si él no fuera tan... ¿Considerado?, Liv lo sabía, él era el más maduro de la relación y aunque a veces podían cambiar los papeles, él seguía siéndolo.

Chasqueó la lengua girando en la cama dándole la espalda a su novio, cerró sus ojos dejando salir el aire despacio, quiso olvidar el tema, pero su mente insistió en hacerla imaginarse con un vestido blanco caminando hacia el altar mientras JungKook la esperaba vistiendo con traje y en su imaginación se veía hermoso. Una tonta sonrisita se dibujó en sus labios, fantaseando con su mente no supo en qué momento se quedó dormida.

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— ¿Cuándo fue la última vez que te compré ropa?

—Ni lo recuerdo—Liv caminaba detrás de su madre en aquella tienda. La señora Miller quería que se reunieran como madre e hija, pero Olivia no tuvo en cuenta que ella querría comprarle ropa.

— ¿Todo va bien en la universidad?

—Normal como siempre.

— ¿Y las cosas con...ya sabes?

— ¿Con JungKook? —la miró tomar una chaqueta azul muy a su estilo—Está bien—se limitó a decir. Su madre la miró unos segundos para luego sonreír ladinamente.

—No está del todo bien, ¿Cierto?

— ¿Vinimos para hablar de mi relación?

—Te llamé porque quiero pasar tiempo contigo.

— ¿Por qué?

—Porque eres mi hija, Olivia, ¿Qué clase de pregunta es esa? —pareció ofendida.

—Pensé que mantendrían más distancia sabiendo que estoy con JungKook—se cruzó de brazos. La señora Miller suspiró dejando la chaqueta en su lugar para luego girarse hacia la chica.

—Antes de irnos a Corea éramos unidas, teníamos una buena comunicación y tú mantenías una buena comunicación con tu padre—colocó sus manos en sus brazos—No quiero que la distancia siga siendo más grande.

Y viéndola a los ojos supo que no mentía.

—Está bien—ella también los extrañaba un poco. Incluso cuando pasó lo sucedido en Corea entendía que ella hubiera reaccionado igual si estuviera en sus zapatos—Incluso con la falta de comunicación sé que sigues siendo mi madre, Julia y yo lo sabemos.

—Sé que no hemos sido los mejores padres, a este punto sólo nos queda aceptar que ya no eres ninguna niña.

— ¿Incluso si salgo con JungKook?

La mujer hizo una mueca pensándolo.

—Lo asimilo todavía, ¿Es suficiente por ahora?

—Está bien, pero no necesitas comprarme ropa.