• Segunda temporada de Profesor Jeon.
Olivia sigue enamorada de JungKook pero él sigue teniendo la esperanza de que se enamore de alguien más porque considera que a su lado perderá el tiempo. Liv convencida que no es así, intentará levantar su ánimo...
La televisión estaba encendida, JungKook estaba sentado en el suelo con su espalda recostada del sofá escuchando el programa, su padre tomaba un baño luego de la jornada en la tienda de frutas y su madre estaba pelando algunas papas. Era evidente que la visita a esa muchacha había sido buena para él, no estaba decaído, no estaba triste y hasta sonreía en algunas ocasiones sonrojándose. Aunque a la mujer no le gustara admitirlo, su hijo tenía una buena influencia en su vida.
— ¿Has hablado con esa muchacha? —preguntó de la nada.
— ¿Con Olivia?
— ¿Hay más?
JungKook sonrió ladinamente negando con la cabeza.
—Iba a hacer una video llamada con ella, sólo alcancé a llamarla, su amiga respondió, dijo que estaba dormida.
— ¿Ya no quiere hablarte?
—Mamá.
— ¿Qué viste en ella, hijo?, ¿Y si rompe tu corazón?
La señora Jeon desconocía que anteriormente lo habían hecho.
—De eso se tratan las relaciones, ¿No?, muchas veces papá y tú insistieron que sentara cabeza con una chica, lo dijiste mucho cuando estaba en la universidad.
—Hablaba de una chica coreana, no extranjera.
—Mamá, Olivia es una buena chica. Me hace feliz, me hace sentir completo y me hace olvidar que no puedo ver—su madre lo miró con cierta compasión—Estamos haciendo las cosas con calma, sus padres me conocen y ahora quiero que ustedes la conozcan en persona.
— ¿Cuándo vendrá?
—Habíamos comentado la posibilidad de que aparezca para mi cumpleaños.
—Dormirá en el sofá.
—Yo dormiré en el sofá.
—Es tu habitación.
—Y es mi novia, no la dejaría dormir aquí en la sala.
—Espero que le aclares que las cosas aquí son diferentes a su país—se levantó recogiendo el bol con las papas peladas y otro donde tenía las cáscaras de éstas. Escuchó los pasos de su madre salir de la sala mientras que los de su padre se acercaban.
— ¿Discutieron? —el señor Jeon se sentó a su lado.
—Sé que aceptará a Olivia, debe hacerlo.
—Tu madre es terca, no te preocupes por ella, mejor dime, ¿Te sientes mucho mejor ahora?, bueno, ni debería preguntarlo, estás más sonriente—apretó su hombro— ¿Sabes algo?, estoy feliz por ti, hijo, te reuniste con la mujer que amas realmente, pocos hombres suspiran por la mujer correcta.
— ¿Crees que ella es la correcta?
—Con sólo esa video llamada lo comprobé.
— ¿No te molesta la diferencia de edad?
— ¿Ella es menor de edad en su país?
—No.
—Entonces no hay problema alguno—se encogió de hombros—Esa chica te recordará que no necesitas ver para poder tener la vida que quieres. Apuesto que pronto me dirás que se casarán.
—No, no—se apresuró a decir un tanto sonrojado—Olivia debe terminar sus estudios, yo debo aclarar mi mente.
— ¿Aclarar? —frunció el ceño— ¿No la amas?
—La amo—asintió—Pero... ¿No crees que es egoísta mantenerla conmigo teniendo esta discapacidad?
—Oh, vamos, JungKook, no te acomplejes, no te sientas inferior a nadie. Todos pueden enamorarse, tienen derecho a hacerlo—dio palmaditas a su espalda—Esa chica aceptó amarte de todas las maneras posibles, ¿Por qué dudas de ti mismo?, debes sentirte afortunado.
—Quiero una vida a su lado, papá.
—Entonces ve por ello.
—Olivia quería casarse, le dije que no era el momento. Me parece que debemos esperar un poco más...
—Nunca será el momento indicado, las mejores cosas ocurren en momentos inesperados.
Aquellas palabras se repitieron en su mente.
▪︎▪︎▪︎
— ¿Mamá? —la voz de JungKook hizo que la mujer volteara a verlo. Estaba desenredando su cabello antes de ir a dormir— ¿Estás aquí?
—Sí, ¿Qué ocurre? —se levantó de la silla de la peinadora. Se acercó a su hijo guiándolo a la cama.
—Sabes que te quiero, ¿No?
—Lo sé.
—Y sabes que cuando me siento incómodo en una relación acabo esa situación de inmediato.
—Lo sé.
— ¿Puedes estar feliz por mí?
—Estoy feliz por ti, me gusta verte alegre de nuevo, pero es ella quien me preocupa.
—Mamá, Olivia no lastimará mi corazón, ¿No crees que yo podría lastimarla con mi problema de la vista?
—No eres capaz de lastimar a alguien, hijo—lo abrazó—Soy tu madre y me preocupo por ti, me preocupa lo que pueda pasar.
—Olivia es una buena mujer para mí.
—Se ve muy joven, tan ingenua...
—A veces, sí, pero es madura en algunas ocasiones.
La señora Jeon tomó su rostro entre sus manos. Su hijo era un hombre desde hace mucho, eso lo sabía, ahora debía soltarlo porque alguien más estaba dispuesta a cuidarlo.
—No seas tan dura con ella, ¿De acuerdo?
—Lo intentaré.
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