27

208 9 0
                                    

-Harry...- susurró ella pero él la detuvo y se sentó en la cama, poniéndola a ella sobre sus piernas.
-No, dejame decirte qué pasó, por favor.- ella guardó silencio y el prosiguió.- Fui a esa fiesta buscando al idiota de Nash. Llevo tiempo buscándolo. Desde el momento en que me dijiste lo que él te dijo, no dejé de buscarlo, quería matarlo, lo odio. ¿Entendes? Lo odio por todo lo que te dijo, por lo que te hizo creer y, al mismo tiempo, estoy celoso de él. Lo admito. Él es todo eso que yo nunca voy a poder ser. Él nunca te hizo llorar como yo lo hago, él podía hacerte feliz y tenía celos.- ella abrió la boca para decir algo pero Harry no se lo permitió.- Entonces supe dónde encontrarlo. Fui a esa fiesta y esas chicas... no podía generar disturbio, iba a escaparse, pero te juro que no hay nadie más, vos sos la única mujer de mi vida. Cuando vi a esa rubia con mi teléfono tuve que contenerme las ganas de gritarle que se fuera al infierno y de traerla acá para que te pidiera disculpas en persona.- besó el hombro de ella con lágrimas en los ojos.- Te amo, latina. No me dejes, no te alejes de mi porque sin vos me muero. No quería lastimarte, estaba muy enojado y me apartaba para no lastimarte, no me di cuenta que así también estaba lastimándote. Por favor...
Ella pegó sus labios a los de Harry mientras las lágrimas caían por su rostro.
-Te amo.- fue lo único que consiguió articular sobre sus labios.
Harry le acarició la mejilla con el dorso de la mano y volvió a besarla.
-Yo te amo muchísimo más, mi latina. Perdoname por todo.
-¿Golpeaste a Nash?- preguntó ella.
-Lo merecía.- se defendió él.
-Está bien.- suspiró ella. -Si vos decís que lo merecía debe ser así.
-Sólo él lo merecía y el hombre de la pensión.- dijo recordando aquella vez en que ella había comparado la situación con lo que pasaba en su familia.
-Lo sé.- susurró recostando su cabeza en el pecho de él.
-Odio verte llorar.- dijo él, besándole la frente y recostándose en la cama con ella en brazos.- Pero lo que más odio es ser el imbécil que te hace llorar.
-Lo importante es que siempre estás para secar las lágrimas después.- susurró ella. -Nunca te compares con Nash, porque no hay comparación alguna. Él no es nadie para mi, Harry, vos sos mi novio y el único chico que amo de ese modo.
-¿De ese modo?- pregunto él, divertido.
-¿Los viste dormir? ¿Quién podría no amarlos?- preguntó refiriéndose a los chicos.
Harry rió suavemente y volvió a pegar sus labios a los de ella.
Liam, Louis, Niall y Zayn sonrieron, sabían que tenía que haber una buena explicación para el comportamiento de Harry y así era. Jamás creyeron que escucharían a Harry admitir que estaba celoso.

Aun se puede caer mas bajoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora