17

224 10 0
                                    

Caminaban por el centro comercial riendo todos juntos. Ella aún no se sentía del todo bien pero no era necesario arruinar el día de los chicos. Miles de chicas los miraban y no hacían nada.
-Ustedes nunca hubieran podido hacer esto en Argentina. Seguramente ya estarían bajo una enorme pila de chicas y no se si tendrían toda su ropa.- rió ella.- Todas las latinas somos muy... expresivas. No podríamos verlos desde el piso superior y aguantarnos las ganas de saltar.
Niall rió.
El celular de ella comenzó a sonar. Lo miró extrañada y volvió a guardarlo sin abrir el mensaje.
Harry la miró de reojo pero ella fingió que nada había pasado.
Se sentaron a comer y ella se fue al baño dejando el teléfono en la mesa. Harry lo tomó rápidamente.
-Harry.- dijo Liam.-¿Qué haces?
-Dejame.- dijo él.

Sofi necesito que hablemos- Nash

Mi amor, por favor- Nash

Contestame-Nash

Se que me fui y arruiné todo. ¿Si? Se que tendría que haber hecho algo al respecto pero no podía perder esta oportunidad. Bebe, podemos volver. Sabes que te amo, solo decime que me amas y volvamos.-Nash

-¿Qué haces, Harry?- preguntó Sofía llegando a la mesa.
-¿Quién es Nash?
-Yo soy Nash.- dijo un chico de cabello negro y ojos verdes claros. Debía ser de la altura de Harry y tener su misma edad o unos años mas.
La chica palideció al verlo.
-Necesito que hablemos.- dijo él.
-No, Nash.- dijo ella bajando la vista.- Yo sé lo que vos queres y no puedo.
-Pero nosotros no tuvimos problemas...
-Vos no tuviste problemas. No tuviste problema en venirte a vivir a Londres, en tirar todo lo nuestro a la basura, en despedirte. Ya no siento nada por vos.
-Eso no es verdad,- dijo él.- yo sé que vos me amas porque somos el uno para el otro.
-No, no lo somos y no te amo. Perdón si te lastimo pero prefiero decir la verdad.
-No me digas eso.- dijo él tomándole la mano.
Ella la retiró con delicadeza. Harry estaba parado a un lado de ella y Zayn al otro. La chica entrelazó sus dedos con los de Harry.
-Perdón, Nash.- dijo ella.
-No te disculpes.- dijo él. -Voy a lograr que vuelvas. Lo sabes.
El chico se alejó y ellos volvieron a sentarse. La chica apoyó su cabeza en el hombro de Harry.
-¿Estás bien?- preguntó Harry.
-Si.- dijo ella mirándolo y sonriéndole.- ¿Vos?
-Bien.- sonrió él y la besó.
-Dejá a mi nieta.- dijo Zayn apartándola de él.
-Abuelo malo.
Todos rieron a carcajadas. Después de un rato volvieron a la casa.
-Liam.- dijo ella entrando a su habitación.-¿Puedo hablar con vos?
-Claro, bonita.- dijo mientras ella se sentaba junto a él.
-Digamos que hice algo que sé que está mal, que no es el caso, pero suponé que sí. Si yo sé que eso está mal, que me lastima pero para encajar en cierto lugar tuviera que hacerlo. ¿Está bien?
-Si te hace mal no está bien.- dijo Liam. Ella suspiró y recostó su cabeza en las piernas de él.- Ahora decime qué hiciste.
-Mi vestuarista dijo que su trabajo conmigo era limitado porque yo estaba gorda.
-No lo hiciste.- dijo Liam incrédulo.
Ella cerró los ojos con fuerza y asintió.
-Ay, princesa.- dijo haciendo que se sentara bien para poder abrazarla.- No la escuches. Dios, todo es una mierda.- ella se tensó al escuchar esas palabras salir de la boca de Liam.- No la escuches, ni a ella ni a Steve ni a nadie que trate de cambiarte. Vos sos perfecta. ¿Entendes? Estás bien así. No lo hagas más por favor.
-No se lo digas a los demás.- pidió ella.
-No voy a decirles,- prometió él.- pero no lo hagas mas.

...

Harry la dejó en el estudio poco convencido. Así fue durante el siguiente mes. La dejaban e iban a buscarla.
Faltaban solo dos semanas para que el contrato finalizara y los chicos la veían muy nerviosa. Pasaba en ocaciones. No había vuelto a ver a Luke, Ashton, Calum o Michael.
Las cosas se complicaban. Ella tenía pesadillas. Estaba muy cansada y se dormía rápidamente sin poder hablar con los chicos.
El día de la finalización llegó.
-Vas a firmar.- gritó Steve.
La chica negó. Él le pego a la mesa. Ella grababa todo en audio.
-Te voy a dejar pensarlo cinco minutos pero fíjate bien lo que haces.
Ella salió del estudio y se chocó con Michael.
-Hola.- dijo el abrazándola.
-Sacame de acá.- pidió ella en un susurro.
Él se asustó ante el temblor de la voz de ella.
El chico del cabello rosa la llevó a su casa.
-El último día.- dijo él.
-Eso espero.- dijo ella.- No por ustedes. Es más, me encantaría seguir viéndolos, es solo... esto no es para mi.
Mike asintió en señal de entendimiento. La chica agradeció y bajó en su casa. Justo en ese instante Harry abría la puerta dispuesto a ir a buscarla. Ella se tiró en sus brazos con lágrimas en los ojos y ambos entraron en la casa dejando a Michael confundido.

Aun se puede caer mas bajoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora