Aun se puede caer mas bajo

21

Sofía no había dicho palabra alguna desde que habían salido del hospital. Llevaban dos días en la casa y estaban muy preocupados por ella.
-Amor.- dijo Harry sentándose junto a ella en la cama. -Latina, mirame. ¿Qué pasa?
Los ojos de ella estaban fijos en los suyos, parecía que quería hablar pero sus palabras no salían. Él, preso del temor que se apoderaba de los ojos de ella, sintió sus ojos llenarse de lágrimas. Ella lo rodeó con sus brazos y se ocultó en su pecho.
-¿Por qué no me hablas?¿Qué te asusta tanto?
Ella no respondió, permaneció en silencio entre sus brazos, sintiéndose incapaz de mirarlo.
Así pasaron los siguientes días y semanas. Tras salir del baño se encontró a Liam, Niall, Louis, Zayn y Harry sentados sobre su cama. Quiso salir de la habitación, sabiendo que ellos querían hablar y temía el tema que quisieran tocar, pero no pudo huir ya que la puerta se cerró a su espalda.
-Sentate.- pidió Niall pero ella permaneció de pie.- Sofía, sentate.
La chica negó y señaló la puerta.
-No, vamos a hablar.- dijo Louis.
-No quiero hablar.- susurró ella y los chicos contuvieron el aliento.
-Sofi,- dijo Zayn acercándose a ella.- tenemos que hablar. ¿Entendes? Nos preocupas, estás actuando muy rara y... Sabemos lo que estás haciendo, no somos tontos, si no paras vamos a internarte no vamos a permitir que estés con problemas alimenticios otra vez.
La chica rompió en llanto sin lograr aguantarlo más, estaba desbordándose, no aguantaba más. Zayn la rodeó con sus brazos dejándola llorar en su pecho sin entender muy bien lo qué pasaba.
-Nash me lo dijo.- sollozó ella.
-¿Qué te dijo Nash?- preguntó Liam confundido.
-Él... Él me dijo todas esas cosas por las que jamás merecería estar con ustedes y... él tenía razón.- no podía ni siquiera mirarlos.
-¿Cuándo?- preguntó Niall.
-En el hospital.- susurró ella.
Harry se acercó y la abrazó con fuerza a la vez que la llevaba a la cama, con los demás y la sentaba en su regazo.
-Nunca podría ser como todas esas chicas con las que siempre los veía.
-No,- dijo Harry. - nunca vas a ser como ellas y no quiero que lo seas, ninguno de nosotros lo quiere. Sofi, vos sos algo que ellas nunca van a lograr ser, sos real, sos pura y única, sos hermosa en todos tus aspectos y nadie puede compararse con vos. Te amo, mi amor. Te amo y no quiero que te hagas daño del modo en que estás haciéndolo.
Ella seguía llorando contra su pecho pero se sentía un poco más tranquila ahora.
-Latina, te amamos así, no dejes que nunca nadie te cambie.- susurró Harry en su oído.
-Dámela, Harry.- dijo Liam y ella pasó a sus brazos. Siempre había sido así, Liam había sido el que más la tranquilizaba, de cierto modo había ocupado el lugar de Nicolás , antes de que muriera su padre.- Todo está bien, princesita. Estamos acá, nada malo va a pasar. ¿Si?
Ella asintió intentando ocultar que le aire no entraba en sus pulmones, no quería preocuparlos más.
-¿Sofi?- dijo Niall, ella no respondió, no podía.- ¿Dónde está su inhalador?
Los chicos comenzaron a buscarlo y Louis se acercó rápidamente tras haberlo encontrado. Cuando la respiración de ella volvió a la normalidad notó la tensión del cuerpo de Liam y la fuerza con la que sus brazos la rodeaban. Era claro que él también estaba asustado, después de todo, llevaba mucho sin tener un ataque así de fuerte. El regreso de los ataques sólo podía significar una cosa, ella no se encontraba para nada bien.