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Salieron de la casa tomados de las manos. Ambos sonreían, ambos estaban felices.
Caminaron hasta una plaza cercana y se acostaron en el pasto. Él la abrazaba mientras buscaban formas en las nubes.
-Harry.- dijo ella y él la miró.- Harry.- volvió a repetir.
-¿Qué?- dijo frunciendo el ceño.
La chica señaló una nube.
-Parece una estrella.
Él sonrió y le besó la frente.
-Aquella parece un pato.
-¿Vos te sentís bien?- rió ella.- Eso no es un pato.
-Si, si es.- dijo él.
Ella levantó las manos en señal de inoscencia.
-Esta bien, es un pato.
Él rió y la rodeó con su otro brazo quedando de costado mirándola.
-¿Sabias que te amo?- preguntó él.
-Me había llegado el rumor.- rió ella.- Lo que no sabía era que te quedaba tan lindo el azul.
Él sonrió, estaba usando la remera que ella le había regalado días antes.
La besó y ella le siguió el beso. Ambos sonreían. Harry mordió su labio inferior haciendo que ella se quejara.
-¿Qué?- rió él.
-Me volves loca, Harry.- se quejó ella.- No vale morder.
Él rió a carcajadas pero ella no. Entonces él se acercó y volvió a besarla.
-Te amo.- dijo y volvió a besarla.- Te amo.- ella reía.- Te amo
- la chica estalló en carcajadas y rodeó su cuello con sus brazos.
-Yo te amo muchísimo más, tontito.- sonrió ella.
Después de un rato ambos se levantaron dispuestos a volver a la casa. Ella tenía frío pero no quería que Harry lo notara.
Estaban en una de las partes feas de Londres, ella conocía ese lugar. Miró sobre su hombro como un hombre se acercaba y apretó la mano de Harry apurando el paso. Ella seguía mirando al frente e indicándole a Harry que no volteara. El hombre no los perdía de vista y a ella le faltaba el aire.
-Sofi.- dijo Harry. -¿Estás bien?
Ella apuró mas el paso, faltaba una cuadra y estarían en la avenida.
Harry se detuvo y ella tiró de su brazo señalando al hombre con la cabeza. No podía hablar. Estaba ahogándose e intentaba tranquilizarse pero no podía. Harry siguió caminando y ella tuvo que hacer un esfuerzo mas grande para seguirlo. Intentaba respirar con todas sus fuerzas pero eso solo lo empeoraba. No tenía el inhalador, no lo tenía. Harry notó lo que pasaba justo cuando salieron a la avenida y se perdieron entre la gente. Él rebuscó en sus bolsillos rápidamente y le dio el inhalador. Poco a poco ella se tranquilizó.
-¿Estás bien?- ella asintió sonriéndole.- Vamos a casa, mi latina.
-Tengo una foto de tu pato.- dijo ella rompiendo el silencio minutos después.
Él sonrió a medias y ella se detuvo.
-¿Qué te pasa?
-Nada.- dijo él.
-Sé que si.
-Me preocupas.- admitió él tomándole la mano nuevamente.- No tenías el inhalador. ¿Y si te pasa algo y yo no estoy para ayudarte?
-Solo me lo olvidé.- se defendió ella.
-Lo sé, lo sé.- dijo él suavizando su tono y acercándose mas a ella.- Solo pensaba en qué podría pasar.
Ella lo miró con dulzura y le acarició suavemente la mano sin dejar de mirarlo.
-Ya no voy a olvidármelo. ¿Está bien?
Él asintió y ella lo besó.
-Ahora vamos a casa.- dijo él dándole su sweter.- Te me vas a congelar.
Ella sonrió y le pasó la mano por la cintura para seguir camino a la casa.
Al entrar, los chicos estaban ahí, pero no solo Liam, Zayn, Niall y Louis. También estaban Michael, Luke, Ashton y Calum.
La tensión se sentía en el aire. Harry apretó la mandíbula y ella bajó la vista automáticamente. Vio por el rabillo del ojo como Luke, Ashton, Michael y Calum miraban su mano entrelazada a la de Harry.
-Hola.- murmuró ella rompiendo el silencio.
-Hola, Sofi.- dijo Calum sonriendo forzadamente.- Nos mandó Steve, tenemos una reunión.
-Está bien.- dijo ella mirándolo.- Vamos.
Quería sacarlos de ahí, sabía que a todos les incomodaba. La chica se encaminó a la puerta pero Harry la detuvo.
-No te lo olvides.- dijo tendiéndole el inhalador. Ella sonrió. Creía que él se iba a enojar como lo hacía cada vez que se trataba de la banda.
-Gracias.- dijo ella en un susurro y le acarició la mejilla.
Michael pasó entre ellos haciendo que se separen. Harry lo miró con odio.
-Esperenme afuera, ya salgo.- dijo ella y los chicos asintieron. Ella miró a Harry.-¿Todo bien?
Él la miró con dulzura y asintió.
-Todo bien.- dijo él, ella sabía que lo intentaba.
-Está bien.- dijo sonriendo.- Nos vemos en un ratito. Te amo.
Lo besó suavemente y después se despidió de los demás prometiéndoles que iba a intentar que eso no volviera a pasar.
Al salir agradeció tener todavía el sweter de Harry. Era tarde.
Los chicos le indicaron que los siguiera. Ella caminó en silencio hasta el auto. Los chicos parecían acusarla de algo en su silencio.

Aun se puede caer mas bajoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora