Un Uchiha en el Sonido

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Estuvieron toda la tarde revisando las carpetas con los casos que había dejado inconclusos Nagato. Las fotos de las evidencias, los resultados de los laboratorios. Un sin fin de información que se quedó toda grabada en su cabeza. Incluso una foto de perfil de su hermano de uno o dos años atrás. Al ver la foto un nuevo frío le recorrió el cuerpo. Levantó la vista para encontrarse con la mirada fija de Konan sobre él; de nuevo, como si hubiera tenido el tiempo calculado. Él por supuesto ya sabía que Itachi pertenecía a la organización, sin embargo hasta ahora no conocía las condiciones en que se había unido. Ella sin embargo no quiso darle más información de la que había en el folio, lo que constaba únicamente de su alias.

Sobre las siete de la noche lo dejó volver a casa. En otras palabras lo obligó a irse, no le permitió tampoco llevarse las carpetas con él, sospechaba que de hacerlo el Uchiha pasaría la noche en vela revisando todo.

En la recepción había el mismo ruido que se había encontrado en la mañana, el desorden parecía imperar en el recinto y eso lo asqueaba un poco.

Salió con destino al apartamento, pero antes de entrar al edificio se detuvo en un restaurante familiar. No habían comido un buen almuerzo, Konan se había limitado a pedir algunos bocadillos a domicilio sin permitirle ir a comer algo decente. No se quejaba, de todas formas su atención durante toda la tarde había estado enfocada en los expedientes. Reconoció que aún le costaba trabajo entender algunos términos con los que los detectives se refieren a ciertos hechos, la crudeza con la que llenaban los informes, pero sobre todo le fue difícil acostumbrarse a la jerga utilizada por los del sonido. Le dolía la cabeza. Pidió un plato de verduras y pescado frito. Esperaba que el mesero se acercara con su plato cuando su teléfono celular sobre la mesa sonó, era un número desconocido por lo que dudó en contestar.

—Bueno —saludó. Del otro lado solo había silencio. Estuvo cerca de terminar la llamada cuando escuchó su voz.

—Hola... ¿Dónde estás? Necesito hablar contigo.

—¿Conmigo? ¿Sobre qué, sobre cómo vas a entregarte?

—Dale con eso. —Naruto refunfuño del otro lado de la línea—. ¿Dónde estás?

—¿Por qué te interesa saberlo?

—Estoy en tú casa y... —se quedó en silencio, Sasuke también lo hizo, ¿que podía estar haciendo en su casa? Naruto de verdad olvidaba quien era— bueno, no estoy en tú casa ahora, estuve, en tiempo pasado.

—¿Qué hacías en mi casa? —Naruto tardó en contestar, como si estuviera nervioso, o esa fue la impresión que le dio. El mesero llegó con su comida y la dejó en frente suyo, movió las verduras de un lado al otro aún a la espera de que Naruto dijera algo más. Se sentía tranquilo, podía escuchar su respiración agitada del otro lado y un murmullo indeciso, incluso pudo sentir su aroma alrededor. Estaba autosugestionado, porque era claro que del restaurante solo podía llegarle el olor de la comida y alcohol— ¿Estás bien? No voy a estar en la ciudad por un tiempo, lo mejor sería que te entregaras, sobre todo si estás pasando inconvenientes. —Lo escuchó sisear del otro lado de la línea, enojado por su última frase, ¿pero que más esperaba que le dijese? De repente la llamada se cortó. Sonrió con satisfacción.

Al día siguiente llegó muy temprano en la mañana con ánimo de ponerse a la tarea nuevamente de leer los expedientes. Había uno que le llamaba principalmente la atención. Para su sorpresa encontró a Konan en su escritorio. Desde su escritorio descubrió que podía ver la oficina de Orochimaru, su actual capitán. Pero él no había llegado aún, lo había hecho media hora después de que él llegara. Esta vez de nuevo lo impresionó, vestía un traje gris ceñido al cuerpo, su cabello caía suelto sobre sus hombros y parecía tener los ojos delineados por lo que el color miel de sus ojos resaltaba mucho más. La corbata morada también llamó su atención, del mismo tono que las uñas de Konan, y otros artículos en los demás detectives, como sus lapiceros, los marcos de sus gafas, y demás. El morado era el color de la unidad de homicidios del departamento de policía del Sonido.

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