Capítulo 8

11.8K 763 37
                                    

Hambre. Eso era lo que tenía. ¡Hambre! Además que mejor forma de subir el ánimo que con un buen helado. 

— ¡Helado de chocolate! ¡Allá voy! —Cogí una sábana y la coloqué en la espalda. Salí corriendo como Superman. 

Está semana ha pasado muy lenta. Yo dejé el tema de los hermanos O'conell, sobre todo con Jacob porque Emma me dijo que yo me había vuelto una obsesionada con ellos, que por parte, era cierto. Jacob me ignora. Cuando pasa por mi lado, golpea mi hombro y causa que me caiga, cosa que no me gusta. Para nada. Es demasiado fuerte y aunque intente quedarme fuerte, no lo logro.

Salí de la casa en busca de mi helado de chocolate, —claramente, me quité la sábana—caminé hasta la heladería más cercana. Entré y sonó la campanita, indicando que había llegado un cliente. Me senté en una mesa, muy alejada a la puerta.

— Buenas tardes, ¿qué se le ofrece? — Me preguntó una chica que trabajaba ahí.

—Un helado de chocolate, por favor —sonreí y la chica me imitó. 

—Enseguida —anotó mi pedido en su libreta y con eso se fue.

La chica me trajo el helado 5 minutos después. Pasaron los minutos y nuevamente suena la campana de la puerta. Me congelé y no fue exactamente por el helado. Eran ellos: los O'conell. Los de mis pesadillas. Mis ojos me delataron en busca de Jacob y lo encontraron al fondo. Fue el último en entrar. 

Finn me vio, les dijo algo a ellos y después caminó hacia mí. Yo lo seguía mirando.

— ¿Puedo sentarme? —preguntó Finn y extendió la mano en la silla señalando el puesto libre. Yo miré la silla. Agarré mi helado.

—Claro, de igual forma, ya me iba — dije, comencé a levantarme, pero él habló antes que pudiera levantarme.

— No, es decir, era para hablar contigo — Dijo y yo me sorprendí. Claro, si es uno de los chicos más temibles de la escuela. —Avalon, quiero pedirte disculpas. —comentó Finn. ¿Disculpas? ¿Él me está pidiendo disculpas?

— ¿Por qué? Tú no me has hecho nada — dije, pero claro que me había hecho algo. Es mejor estar alejados de ellos a que comiencen a tratarme normal. Sobre todo Jacob. 

— No por mí, te pido perdón por mis hermanos. Ellos son...no, lo siento, nosotros somos...especiales y raros —Finn se mordió el labio y pasó una mano por su cabello luego de decir eso.  ¿Le echaste la culpa a tus hermanos cuando también tú eres el grosero?

— Está bien, no te preocupes. Ahora, si me permites, me retiró — dije

—Bien —Nos levantamos y yo, por mi parte, caminé hacia la puerta, pero antes, me di cuenta de que no solo eran 5 hermanos sino 6.

Espera y me acuerdo de sus nombres. Finn, Chris, Nick, Cody (Claro que de él si me acuerdo) Jacob y...no sé, me rindo.

— Es Jason — Me susurró Finn. — Otro hermano. —pareciera que hubiese leído mi mente.  Lo miré con intriga pero él solo sonrío. 

— Ohhh...- No salía palabra de mi boca. Jason, el nuevo hermano, me miraba fijamente.

En serio, estos hermanos no tienen otra cosa que hacer en vez de mirarme.

***

Caminaba por los pasillos de la escuela, ya no había nadie. Estaba sola. Caminé hacia mi casillero, pero un fuerte dolor en mi cuello no me dejaba. Abrí los ojos y vi a ¿Jacob? ¿Otra vez?

— ¿Quién eres? — Me preguntó Jacob con una mirada bastante temible. 

— ¿Qué? —Pregunté. No podía pensar correctamente. 

— ¿¡Quién eres!? — Gritó. Me dio miedo.

— A...va...lon —Tartamudeé.

— Te lo preguntaré una vez más. ¿Quién eres? —Jacob acercaba su cara más a la mía, que hasta podría pensar que estaba a punto de darme un beso.

— Avalon— Dije más segura de mí. No voy a dejar que otro chico crea que puede hacerme daño.

— ¿Por qué? ¿No lo sabes? —Me soltó un poco y comenzó a alejarse con una cara de confusión. 

— ¿Saber qué? — Pregunté y me toqué el cuello para ver si estaba herida.

— Qué eres especial.

Our bloodDonde viven las historias. Descúbrelo ahora