S𝚎𝚗𝚝𝚒𝚖𝚒𝚎𝚗𝚝𝚘𝚜 [Yυɳʂαɳ]

14

Pasaron varios días, 5 para ser exactos cuando ocurrió ese raro suceso, San y Yunho seguían su vida normal, obviamente no hablaron del tema, todo estaba tranquilo y calmado.

De momento.

Eran las 2:30 de la tarde. Ambos se encontraban en la sala "viendo" la televisión, San estaba a penas almorzando, hoy salieron temprano del colegio debido a la ausencia de un profesor a la última hora, y claro que lo primero que hizo el menor al llegar fue dormir. Y Yunho solo estaba con su celular.

– En un rato voy a la casa de mi madre– dijo el mayor dejando su celular a un lado sillón.

– Llegarás tarde? – este lo pensó un poco.

– Estaré con mi padre, no creo que hagamos mucho, si preguntas por la puerta déjala cerrada, llevaré las llaves – San asintió lentamente, no le agradaba la idea de quedar solo pero ni modo le tocaba.

Yunho no era de visitar a su madre pero hoy debía hacerlo, no porque quisiera, sino porque su padre fue a visitarla y quería verlo.

– Hyung – el mayor lo miró – No sería si sea adecuado preguntar pero... Tus padres viven juntos o separados? – San no quería preguntarle a Yunho eso pero la curiosidad lo mataba, cuando iba a la casa de su mamá iba porque su papá estaba. Sacó conclusiones de que su padre viajaba y llegaba en vez en cuando pero también sospechaba de que no vivian juntos.

– Ellos están separados... – respondió mirando ahora la televisión – ¿Porqué preguntas?

– Nada... solo curiosidad... como dices que vas a la casa de tu madre para ver si tu padre pensé que él viajaba... – Claro que no podía quedarse callado, se regañó mentalmente por decir algo que no debía o así lo creía. Oyó como el mayor soltó una pequeña risita que se convertía en una sonrisa leve.

– No... mis padres se separaron hace 3 años, porque vieron que lo suyo no funcionaba , mi mamá prefería estar sola y mi padre... pues... se dio cuenta de su verdadera... sexualidad – San lo miró atento – creo que me entiendes, encontró a un "él" – el bajito asintió lentamente algo sorprendido, no se esperaba eso.

– Entiendo... – murmuró y se puso a pensar lo difícil que pudo haber sido para Yunho ver como sus padres ya no vivirían juntos – pero... te sientes bien con eso?

– Si... digo, agradezco que hayan podido saber manejar la situación sin discusiones ni peleas como otros padres, mientras ellos estén feliz me tranquiliza 

– Oh eso es bueno, creelo – dijo sonriendo – ojalá pasara lo mismo con mi familia.... – Yunho volvió a mirar a San.

– Puedo saber que pasa con tus padres? – preguntó algo preocupado, pues cada vez que San iba a su casa regresaba de mal humor, con los ojos llorosos o como la última vez que lo vio, golpeado, la mirada de San había cambiado con esa pregunta se veía ahora perdida – No me tienes que decir...

– No pasa nada – respondió y se acomodó cruzando sus piernas en el sillón y miró la alfombra – Solo éramos mi madre, mi padre y yo... solo tres, y me sentía bien con eso, pero mi papá nos dio una noticia que yo la tomé como algo malo, el jefe de mi padre decidió que trabajará en el extranjero, mi padre aceptó porque le iban a hacer un aumento, y por otra parte mi madre no quería, pero mi padre quería dar lo mejor por nosotros y se fue, prometiendo que nos llamaría y nos enviará lo que necesitemos. Y ese mismo año mi madre trabajaba en una cafetería en turno de la mañana, pero un día mi mamá me dijo que mi abuela iría por mi, ya que una compañera cambió un turno porque debía hacer algo y le dieron el turno a mi madre en la noche, salía a las 9... – se detuvo por unos segundos – ella cuando estaba volviendo se encontró con un señor borracho y drogado y para no hacer larga la historia, abusó de ella... – Yunho estaba sorprendido por aquello –  yo me sentía mal por ella, por como lloraba, pero como era algo pequeño le llame a mi padre y me dijo que como no iba a poder volver mandaría a un abogado para que ella denunciara al señor, pero más grande fue la sorpresa de que estaba embarazada... Cuando fueron al juicio ese hombre manipuló al juez diciéndole que el se haría cargo del bebé que venía en camino, todo para evitar quedar en la cárcel. Pero de igual estuvo, pero 2 meses... por el trafico de drogas

– Le hubieran dado más... – San lo miró, el alto pudo ver que el menor quería llorar –  lo siento...

– Y desde que nació mi hermana ese hombre ha entrado a nuestra casa como si fuese suya, ha vendido nuestras cosas para seguir comprando drogas y cervezas, a mi hermanastra no la cuidaba, la golpeaba y yo tuve que intervenir eso recibiendo sus golpes, igual que me madre y... – se detuvo un momento, estaba hablando rápidamente – N-No sé si pueda seguir... – sus manos temblaban... estaba haciendo un gran esfuerzo para no llorar frente a su amigo. Yunho al darse de cuenta no sabía que hacer, solo se acercó y acarició la espalda de este suavemente pero al instante la quitó.

– No te contengas, puedes soltarlo todo si deseas... – eso fue todo para que las lagrimas del menor cayeran como lluvia, eso a Yunho lo rompió, ver a San llorando es algo que no desearía ver de nuevo, se veía como idiota viendo a su amigo llorar sin hacer algo, así que se acercó lentamente quedando más cerca del menor y puso su mano temblorosa en la espalda para dejar leve caricias y acercarlo un poco mas pasando sus brazos hacia su hombro, no era fan del tacto pero era lo poco que podia hacer, basicamente tenia su brazo rodeando su espalda – lamento que hayas pasado por algo así... 

– E-Está bien... – dijo San ya calmandose y secando sus lágrimas.

– Me imagino que ese hombre es el culpable de los moretones no? – el menor miró a Yunho confundido, hasta que reaccionó y recordó, asintió lentamente – dan ganas de golpearlo... – San soltó una risita.

– Yo ya lo hubiera hecho... si no fuese tan débil  

– Espera ahí, no eres débil, eres fuerte, muy fuerte... estás aguantando mucho, solo los débiles se darían por vencidos... y tú no, sigues protegiendo a tu hermana, a tu madre, eres muy valiente – San lo miró – sigues yendo sin miedo de ir a tu casa y enfrentarte con tu padre, eso es de débil? – no hubo respuesta – No lo es... grábate esto, eres muy fuerte... más que yo... yo me hubiese ya rendido desde hace tiempo... – el menor a oír eso lo miró confundido Yunho al darse de cuenta lo que había confesado le entró unos grandes nervios – ignora eso... 

El silencio volvió, pero esta vez uno incómodo, tanto para Yunho que para San. 

El mayor reaccionó y miro su celular, eran las 2: 52 

– V-Voy tarde... – se levantó y fue a su habitación dejando a San en un estado confundido.

Era la primera vez que había tenido una conversación profunda con Yunho. Había descubierto  varas cosas sobre el mayor, cosas muy interesantes. 

Habían pasado aproximadamente 30 minutos y Yunho salió de su habitación listo para irse a su casa, aliviado de no haberse encontrado a su amigo por ahí después de aquello, sabía que hablar de más no era una buena idea. Antes de salir fue a la cocina por un vaso de agua.

Mientras San estaba teniendo un dilema en su habitación, tenía ganas de hacer algo pero temía que Yunho se sintiera más incómodo o lo apartara, pero después de oír la puerta del mayor cerrarse supo que no debía perder tiempo, así que salió y se encontró con Yunho ahora yendo hacia la puerta principal.

– Yunho! – el nombrado volteó y miró a San que se había acercado a él, se quedó callado esperando que el menor hablara – Yo... – se acercó a él y lo abrazó, dejando sorprendido al alto, San luego se regañaría por eso pero luego pudo sentir las manos de Yunho envolverle. Ambos podían sentir el corazón del otro palpitar rápidamente como si se fuera a salir en algún momento. Pero como todo lo bueno tiene su fin, el abrazo se deshizo por parte de ambos que decidieron separarse – No sé porqué piensas de ti así, pero yo también te veo como una persona muy fuerte – sonrió – anda a ver a tu padre que ya se te va a hacer tarde – luego de eso se fue rápidamente a su habitación y se encerró en ella sentándose justamente en la puerta para pensar en lo que había hecho.

El mayor también quedó procesando la situación y segundos después sonrió, sin duda el había necesitado ese abrazo, sin más rodeos decidió salir para irse ahora si a su casa. 

(...)

Pido perdón pero andaba en modo emocional cuando hice esto, además con este cap se me hará más fácil hacer los otros porque ya entenderán.

Y también pido perdón por si hay fallas ortográficas