Internado solo para chicas ||Min Yoongi||

Capítulo 18

Min Yoongi

Las clases del día terminaron, ahora estamos en nuestra habitación, preparándonos para cenar.

—Ya dinos por qué estas tan molesta—dijo Yuna.

Es verdad, Sumin ha estado molesta toda la tarde y no ha querido decir ni una sola palabra.

—Es que...—suspiró—Hoseok me pidió que regresemos.

—¿Y que le respondiste?—pregunté fingiendo no saber nada.

—Que si quiero volver con él—dijo y Yuna negó con su cabeza.

—¿Estás loca?—preguntó Yuna.

—Sí al parecer lo estoy, pero al final, él me dijo que necesita algo tiempo, para terminar con Eunchae y que mientras tanto podemos vernos en secreto—dijo y se puso molesta—es obvio que siente algo por ella, él no va a cambiar, no puede decidir y solo quiere jugar con las dos.

—¿Entonces?—preguntó Yuna.

—Entonces me molesté y le dije que no quería volver a verlo—dijo y su enojo se transformó en llanto—pensé, que él se dió cuenta de que solo me ama a mí, pero me equivoqué.

—Tranquila, lo mejor será que lo olvides de una buena vez—dije y abrace a Sumin.

—Soy una estúpida, le iba a volver creer—dijo Sumin entre sollozos.

—Ya no pasa nada, si quieres no vayas a cenar, te traeremos algo de comer—dijo Yuna.

—No, quiero ir, estoy bien—dijo Sumin y se secó las lágrimas.

—Si tu lo dices, vamos—dijo Yuna.

Salimos de la habitación, caminamos hasta la puerta principal y nos dirigimos al internado de los chicos. Al llegar tomamos nuestras bandejas con comida y nos fuimos a sentar.

—Te estaba esperando mi dulce Yuna—dijo Jin que se sentó con nosotras.

—Cuantas veces te tengo que decir que no me digas así—dijo Yuna.

—Lo seguiré haciendo, hasta que aceptes salir conmigo—dijo Jin.

—No quiero, eres igual o más mujeriego que tú amiguito Hoseok—dijo Yuna.

—Hoseok siempre va amar a una sola chica y es Sumin—dijo Jin—ha estado muy triste, porque no aceptaste volver con él.

—Sí claro, no creo que esté tan triste, para eso tiene a Eunchae, para que lo consuele—dijo Sumin molesta.

—Amor, no es así—dijo Hoseok que apareció de repente—te prometo que voy a terminar con ella, solo necesito tiempo.

—Yo también necesito pensar, así que lo mejor será que sigamos separados—dijo Sumin muy seria y se levantó de la mesa.

—Gracias por arruinar nuestra cena—dijo Yuna.

—Y para tú información mi amiga ya está conociendo a un nuevo chico, suerte volviendo con ella Hoseok—dije y lo ví muy molesto.

Salí de la cafetería riéndome hasta no poder más, ví a Yuna y Sumin esperándome en la salida del internado.

—Vamos, a dar un paseo, todavía no tenemos que volver—dijo Yuna.

Fuimos a caminar aunque no hay nada interesante por aquí, los dos internados quedan alejados de la ciudad, así que solo hay muchos árboles.

—Gracias por ayudarme, no sé que haría sin las dos—dijo Sumin y nos abrazo.

—No es nada, para eso estamos las amigas—dije con una sonrisa.

Caminamos por unos minutos más disfrutando del aire fresco, hasta que volvimos al internado y fuimos a la habitación para alistarnos dormir.

—Yo voy primero—dijo Sumin y entró al baño.

Yo me quedé solo con Yuna, ella se acercó a mí y me miró.

—Sabes Yoongi, estoy decidida, olvidaré mis sentimientos por tí, solo quiero ver a Sumin feliz y lejos del idiota de Hoseok—dijo Yuna.

—Gracias Yuna—dije y la abracé.

Ambos nos miramos a los ojos por unos segundos, entonces Yuna se acercó a mí y  me dijo muy cerca de mi oído:

—Pero antes, hay algo que he querido hacer—antes de que pudiera pensarlo ella me robó un beso en los labios.

Escuchamos el ruido de algo caerse al suelo, nos separamos y vimos a Sumin  que se quedó en shock, tanto, que sin querer tiró su celular.

—No es lo que piensas—dijo Yuna nerviosa—yo solo estaba a ayudando a Yonmi, porque tenía una pestaña en el ojo.

—No se preocupen, no me tienen que dar explicaciones—dijo Sumin—solo me sorprendí un poco nada más.

Yuna se puso roja de la vergüenza y entro al baño, dejándome únicamente con Sumin.

—¿Realmente amas a Namjoon?—preguntó Sumin.

—Claro que sí, lo que viste no fue lo que piensas , ella intentaba sacarme una pestaña en el ojo, hasta ahora me arde—dije y puse mi mano en mi ojo simulando que me duele.

—Por está vez les voy a creer, ahora ven aquí—ella se acercó a mí y me soplo el ojo.

—¿Mejor?—preguntó y me miró con una sonrisa.

—Sí gracias—dije nervioso, ya que mi corazón empezó a latir como loco cuándo se acercó a mí.

—Yonmi, solo quiero que sepas que no importa lo que pase, Yuna y tú seguirán siendo mis amigas, nada cambiará entre nosotras—dijo Sumin.

La abracé y suspiré, quisiera no tenerle que mentirle sobre mi verdadera identidad, sin embargo es la única manera de que ella esté a salvo.