Risks of the future | reescribiendo

I'm alive at five

Decidí alejarme de la temática de la historia un tiempo, sin alejarme completamente ya que aún tiene algo que ver con todo esto, pero se entiende el cambio.

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¿Algunas vez te diste el tiempo de preguntarte la existencia de la vida y el por qué nosotros estamos en esta misma? La existencia es algo que ni el ser más experimentado o antiguo podría resolver, dejandolo como el único misterio mayor existente en cualquier tipo de universo. Personas justifican con la ayuda de Dioses creados en algún momento de la historia, y propias creencias sobre alguna cosa inespecífica o cuerpos de luz. Otros eligen dejarlo en manos de quienes decidan resolverlo y dejar su vida en quien más les convenga.
El día de hoy una chica se levantó a preguntar el por qué ella existía, obviamente no pudieron responderle. Si bien la creación del mismo universo está en duda, no podríamos tener algun indicio sobre la creación de los cuerpos. Igualmente no malgastaría el tiempo intentando explicarle su existencia a una pequeña chica de 4 años.

- Mami, ¿puedo hacerte una pregunta?

- Claro, dilo.

La pequeña niña chillaba emocionada por una respuesta, una lastima sería que esa emoción fuera arruinada con tan solo unas palabras.

- ¿Existe una vida pasada a la nuestra? Ya sabes, siempre me hablas de coñs... consi... conpo..? ¡Esas cosas!, y dices que en otra vida podrías hacer una cosa...

La mujer quedó atontada ante su hija.
¿Que esperarías si una pequeña pregunta por la mismísima reencarnación? Muchos creen en esta, otro dudan de su existencia, y el resto prefiere no formar parte de estas personas.

- Claudia, esas mi...-

- ¡Mamá! ¡Dijiste que dejarías de decir esas cosas!

- Si, claro. De todas maneras, esas cosas no existen Claudia. Deberías saber diferenciar la realidad de lo falso, niña.

La pequeña e inocente Claudia quedó desilusionada, pero nada le podría impedir seguir con su cuestionario.

- Entonces... bueno, eso no importa mami. Pero me gustaría preguntarte acerca del mundo. ¿Por qué fuimos creados?

Nuevamente la mayor no tenía palabra alguna. Sin lograr comprender porque su hija decía esas cosas, ¿no tenía suficiente con molestarla todos los días? Además tenía que calentarle la cabeza.

- Oh, vamos. Niña, yo no puedo explicarte eso, probablemente lo vas a descubrir cuando crezcas.

- ¡Pero mamá...! Sam me dijo qué no podría vivir mucho tiempo más... ¿Eso significa que no podré saberlo nunca?

La pequeña había comenzado a llorar, dudas en su mente y un mal trato sin igual.

- ¡No llores! ¡Imbécil, deja de llorar!

La mayor perdiendo su paciencia, se retiró de la habitación. Buscó un cigarrillo y este mismo fumó.
La niña siguió a su madre, llorando en silencio para no molestarla aún más, el desagradable olor del tabaco llegaría una vez más hacia ella, ya acostumbrada.

- ¿Crees que algún día seré libre, mami?

Preguntó la niña una vez más, la mayor no le dedicó ni una mirada, hasta no sentir más su presencia inadecuada. La pequeña estaba en el suelo y poseía un charco de sangre saliendo de algún lugar trasero. Despreocupada, la mujer abandonó el lugar y dejo a la niña sangrar.
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