chapter three

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Hera salió de Pop's tras haberse cansado de escuchar a la chica Lodge, caminaba por la calle dirigiéndose hacia su casa pero un mensaje llegó a su celular haciendo que cambie de rumbo.

FP🐍

Estoy en mi casa, ven. 

Llego en cinco minutos. ✅

Aceleró el paso para dirigirse hacia el lado sur del pueblo, muchas veces había oído por su madre decir que aquel lugar era peligroso y quiénes pertenecían a los serpents vivían allí. Se encontró frente a la casa de FP y sonrió antes de caminar hasta la puerta para golpearla.

Ésta se abrió y él la tomó rápidamente de la cintura haciéndola entrar, cerró la puerta para apoyarla a ella allí con una sonrisa y besó cortamente sus labios.

— ¿Largo dia?.

— Si, pero te sorprenderá toda la energía que tengo aun.

Ella rio cuando él colocó sus manos en sus piernas y la impulsó para que rodeen su cintura, unieron sus labios en un beso lleno de pasión, caminó con ella hasta su habitación para acomodarla en la cama con cuidado, bajó sus labios por su cuello y dejó una marca que se notaría mañana. 

Sus ropas fueron desapareciendo hasta que ambos quedaron sin nada y se sumieron a una noche llena de pasión, dónde el único testigo además de aquellos dos era la luz de la luna que ingresaba por la ventana, dando un toque más romántico, sin necesidad de encender una luz.

 — Mierda, mierda, mierda. Mama me va a matar. — dijo Hera despertándose mientras veía la hora en su celular, eran las doce de la noche, giro para ver a FP y este se encontraba frente a la ventana fumando. — ¿Estas bien?.

— ¿Es normal querer hacer las cosas y que todo salga mal?. — pregunto sin dejar de ver por la ventana, Hera curvo sus labios en una mueca y suspiro.

— Para hacer las cosas bien, tienes que dejar muchas cosas. — dijo ella poniéndose de pie y esta vez el la miro. 

— ¿Te vas?. — ella asintió poniéndose la ropa que estaba esparcida por toda la habitación.  — ¿Quieres que te lleve?.

— Si, por favor.

Una vez que ambos se encontraban con sus prendas puestas salieron de aquella casa y se subieron en la camioneta. El camino hasta su casa se basó en un silencio que no era incómodo, ninguno sentía la necesidad de decir algo y Hera prefería quedarse así. 

La música los acompañó hasta que él dejó a la rubia en una esquina que daba en la cuadra de su casa, besó su mejilla y se bajó del auto para ir corriendo hacia su casa, al estar frente a ésta intentó relajarse y sus nervios aumentaron cuando una luz se prendió, pero aquella sensación desapareció al darse cuenta de que era en la habitación de Betty. 

Tomó una piedra y la tiró para dársela en la ventana, Betty completamente sorprendida y hasta asustada, se acercó para ver quién era el que hacía aquello, encontrándose con su hermana pequeña, rodó los ojos y rio por lo bajo haciéndola una seña con la mano antes de desaparecer. 

Y cuando Hera se preguntaba dónde se había metido apareció en la puerta de la entrada, la había abierto de forma sigilosa para que nadie pudiese escuchar que era abierta. 

— ¿Dónde has estado?. — pregunto cuando la tuvo enfrente.

— Otro dia te cuento.

— ¡Me diras mañana!.

Hera la ignoró y entró a su habitación para cerrar la puerta detrás suyo, se tiró en su cama con una gran sonrisa en su rostro y finalmente se durmió, mañana era el comienzo de la escuela. 

° ° °

Hera abrió sus ojos para ver que en su alarma marcaban las seis de la mañana, dejó su celular cargando mientras ella se disparaba hacia el baño, se quitó toda la ropa y abrió ambas canillas esperando a que se ponga tibia, dejó sus cremas para el pelo a un lado de la bañera. 

Ingresó a la bañera y sonrió al sentir tan tibia el agua, se quedó allí adentro por unos cuántos minutos hasta que enjuagó su cuerpo y lavó su cabello. Su madre entró en el baño provocando que abra sus ojos en grande. 

— ¡Mama!. — dijo jadeando ante aquello, odiaba que su madre entrara así a todos lados, incluida su habitación.

— Hola, linda. — sonrió acercándose a su hija para besar su frente. — ¿Qué querrás desayunar?.

— Ensalada de fruta y yogur. — Alice asintió con una sonrisa y tras haberse mirado en el espejo por ultima vez salió del baño.

Hera soltó un suspiro y terminó de lavar su cabello para salir de la bañera rodando una toalla de color rosa ─típico ¿no?─; por su cuerpo, salió del baño dirigiéndose hacia su habitación y una vez allí secó su cuerpo para que no quede ni una sola gota en su cuerpo, pasó una crema hidratante en él y se colocó su ropa interior. 

Se colocó la ropa que había escogido, se sentó frente al espejo tomando el cepillo de pelo, lo pasó por su largo pelo rubio dejándolo lacio, tomó su secadora y comenzó a secarlo para después con la plancha de pelo, aplastarlo aún más. Se pintó los labios con un color mate rosa y sus ojos llevaban rímel alargando sus pestañas.

Tomó un pequeño bolso color blanco dónde colocó sus auriculares, sus llaves y su celular, comenzó a bajar las escaleras para encontrarse a su madre en la mesa disfrutando del desayuno, Betty bajó al mismo tiempo que ella y se unieron al desayuno.

— ¿Papa se fue?.

— Si, salió temprano. — dijo ella, Hera asintió comenzando a comer sus frutas cortadas en trozos, adoraba aquel plato.

— Vamos, H. Llegaremos tarde. 

La menor asintió antes de ir con su hermana a la puerta donde se encontraron a su madre en el auto viéndolas con una sonrisa, ellas rieron por lo bajo y no dudaron en ir hacia el, subiéndose para de éste modo ir a la escuela riverdale.

Alice Cooper estacionó frente a la escuela y ambas hermanas bajaron, Hera no estuvo mucho tiempo al lado de su hermana ya que al ver a su grupo de amigas esperando a por ella desapareció. Betty soltó un suspiro antes de divisar a Kevin e ir hacia él.

Hera miró a su gran amiga, Giselle, ella le comentaba todo lo que había ocurrido en el verano e incluso las cosas que había hecho con su padre. Por otro lado, Michelle le hablaba con cuáles chicos había estado durante las vacaciones.

— Lo siento. — dijo una voz al chocar contra ella haciendo que por poco caiga, al abrir bien sus ojos se encontró con los ojos cafés de Archie.

— Andrews. — murmuro mientras acomodaba su ropa para después intentar alejarse de el pero la tomo del brazo impidiendo que se vaya.

— Tenemos que hablar, Hera. 

— No lo creo.

— Por favor, déjame decirte que en verdad lamento haberles arruinado las cosas. 

— Si, nos vemos. — se alejo de el dejándolo en mitad del pasillo completamente triste, sabia que aquella Cooper no era para nada fácil y tendría que hacer algo mas que un lo siento.

Entró a su primer clase, la cuál era, Lengua. Se situó a un lado de Giselle y esperó a que la clase diera inicio mientras que ésta vez era ella quien le contaba todo lo que había ocurrido durante aquellas semanas de vacaciones, la de cabello castaño chilló ante cada comentario que ella hacía.



MISS H, (riverdale) [#1]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora