MISS H, (riverdale) [#1]

chapter zero

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The Hills de the weeknd sonaba por los grandes parlantes de la fiesta, Archie se encontraba bailando acompañado de la Cooper menos inocente, Hera. Ella se movía al compás del ritmo disfrutando de la compañía del pelirrojo pero sabia que estar tan cerca de el no era agradable para su hermana del medio por lo que decidió mantener distancia, desde que había conocido a Archie mediante Betty, siempre supo que ella estaba enamorada de el y que ni los años iban a poder borrar sus sentimientos por el.

Polly apareció detrás de ella para tomarla de la cintura riendo, su hermana menor giro a verla y la abrazo por el cuello, las dos se encontraban bajo las influencias del alcohol, Archie sonrió viéndolas y Betty aprovecho que estaba solo para acercarse a bailar con el. La mayor de las Cooper tomo a Hera de la mano y la llevo rápidamente a la barra pidiendo mas shots de tequila, a pesar de que Hera era menor que ella y Betty, sabia como convencer a sus hermanas mejor que nadie de cometer locuras, llevándolas a fiestas y eventos que sus padres jamas permitirían.

Hera Cooper era la menor inocente de la familia y cada adolescente lo sabia, muchos habían tenido la suerte de sentir sus labios y cuan dulces eran, en muchas ocasiones se haba oído decir que sus labios sabían a cereza. Su mirada capto una chaqueta poco común en aquellos lugares, los serpents estaban ahí bebiendo y pasando el rato al igual que todos los que estaban en la fiesta, no les dio importancia, si no los molestas, ellos simplemente no se meten contigo, pero su atención fue hacia un hombre mayor, de ojos negros y con sonrisa cínica, si no fuese por que Polly la nombraba cada dos segundos, quizás se hubiese tirado encima de aquel hombre para besarlo.

— Hera, iré al baño. — la nombrada asintió antes de ver su cabellera rubia desaparecer entre el mar de gente, giro para continuar dándole tragos a los pequeños vasos de tequila que quemaban al llegar a su estomago, pidió otra ronda, sabiendo que si seguía tomando de tal modo terminaría con una horrible resaca que podría durar un mes entero.

— Me sorprende que la menor de las Cooper este en una fiesta. — una voz ronca sonó en su oído, sintió su piel erizarse y poco a poco fue girando para encontrarse con aquel señor que estaba junto a los serpents.

— Ser una Cooper jamas me detuvo. — dijo con una sonrisa completamente seductora, si ella estuviese consciente de lo que hacia probablemente le habría dicho que se alejara o llamaría a la policía, pero aquel hombre estaba causando sentimientos que ni Damon Salvatore podía.

— Eres igual a tu madre, Hera.

— ¿Me conoces?.

— Todos te conocen, linda.

— ¿Y tu eres?

— FP Jones. — y rápidamente lo reconoció como el padre de Jughead quien era su mejor amigo, a pesar de conocerlo tanto tiempo, muy pocas veces habían hablado acerca de su padre, no era alguien de quien se enorgullece y siempre había respetado eso, pero en ese instante, no le importaba, sonrió relamiendo sus labios.

— Es un placer. 

Segundos después estaban en una de las habitaciones de arriba besándose como si no hubiese un mañana, como si no quisieran que ese momento termine y a pesar que FP estaba arriesgando todo por aquella chiquilla, no le importo. No podía evitar sentirse atraído a ella, su pollera de cuero corta que lograba dejar admirar sus piernas y aquel top que resaltaba perfectamente su pecho, se veía jodidamente caliente. 

Paso sus grandes manos por la pequeña cintura de ella hasta llegar a su formado trasero y apretó de el provocando que suelte un gemido.

Esa noche lo había cambiado todo y Hera se olvido que tenia dieciséis

Que era menor de edad y que hacer aquello con un mayor traería mas problemas de los que imaginaba.

Mucho mas de los que se aproximaban a Riverdale